13/09/22.- La Comisión Permanente de Desarrollo Social Integral de la Asamblea Nacional (AN) inició este martes la consulta pública del Proyecto de Ley Especial de Trabajadores y Trabajadoras a Domicilio, luego de ser aprobado por unanimidad en primera discusión, así lo dio a conocer la diputada Gisela Tovar, miembro de esta comisión.

Este instrumento jurídico tiene como objetivo dar protección al trabajador remoto, al trabajador que desarrolla funciones desde su casa, pero con una relación de dependencia con un patrono que queda libre de muchas regulaciones laborales.

Indicó la parlamentaria que el proyecto normativo toma en cuenta al trabajador a domicilio, el emprendedor y el trabajador informal urbano, pero aclaró que existen diferencias entre ellos.

Explicó que el trabajador a domicilio tiene una dependencia con un “patrono” y el trabajador está en la obligación de transformar materia prima o prestar un determinado servicio por el cual obtiene un beneficio.

Los emprendedores o trabajadores informales no tienen ningún tipo de dependencia con terceros, ellos son sus propios patronos y sus ganancias van a depender únicamente de su esfuerzo y capacidad de trabajo.

Por otro lado, el trabajador a domicilio puede contar con la ayuda de toda su familia, pero esa fuerza de trabajo opcional no es reconocida, la relación laboral, que sí existe, es entre él o ella y el patrono distante.

Comentó la diputada Tovar que el trabajador a domicilio no es autónomo, en el caso de la transformación de materia prima él no puede cambiar la receta, no puede ser creativo, ni cambiar el uso de maquinarias o herramientas encomendadas, mientras que el trabajador informal o emprendedor sí lo puede hacer.

Expresó la legisladora que el trabajador a domicilio está sometido a supervisión y evaluación porque su función está regulada por el cumplimiento del trabajo de una manera determinada para obtener unos resultados específicos.

Para el diputado Oliver Rivas es importante la regulación de este tipo de trabajo o relación laboral, que hay que regularizar el esfuerzo y el tiempo de la jornada laboral, además de gastos adicionales como la formación y el pago de servicios.

También señaló el parlamentario que "hay hogares donde seguramente podemos encontrar niñas y niños realizando trabajos y eso no lo podemos permitir, tenemos que proteger a nuestros niños y niñas".

Para culminar, indicó la parlamentaria Gisela Tovar que este tipo de trabajo en algunas partes del mundo es considerado como una forma de esclavitud y nuestro proceso revolucionario humanista no lo puede permitir.

TOMÁS MORENO HERNÁNDEZ / CIUDAD CCS