05/10/23.- Más de ocho viviendas ubicadas en el Callejón Ávila, en la zona limítrofe entre La Florida y el barrio Chapellín, en Caracas, se encuentran en peligro de colapsar a causa de los frecuentes derrumbes ocasionados por las fuertes precipitaciones que han ido socavando el suelo que sustenta a las residencias afectadas.

“Del lado derecho del callejón  -subiendo- hace años pasaba un río, pero con los años fueron construyendo casas, carcomiendo y debilitando el terreno aledaño a la ribera de la quebrada que por allí pasa, lo cual ha convertido en zona de riesgo el lugar, debido a los constantes derrumbes que se han venido sucediendo”, explicó la señora Lourdes Delgado, habitante del sector.

Una de las viviendas más afectadas es la del señor Ramón Benítez; se trata de la casa que pertenecía al señor Fernando Bustamante, chofer del vehículo Hudson Excel Supersix, quien pasó a la historia por estar asociado al arrollamiento del Dr. José Gregorio Hernández, motivo por el cual el propietario actual hace un llamado a las autoridades en general, pero en particular a las del Instituto del Patrimonio Cultural (IPC), y del Instituto Municipal de Gestión de Riesgo (IMGRAD).

Benítez indicó que a través de la organización del Consejo Comunal Callejón Ávila, conjuntamente con el que corresponde a Chapellín, se han dirigido a los entes oficiales y han sido atendidos por las autoridades pertinentes, quienes se han apersonado en el sitio y han presentado un proyecto de solución al problema de acuerdo a las características de inaccesibilidad del terreno, lo cual es un obstáculo fuerte a vencer para la introducción de maquinarias para estabilizar el terreno y construir un muro de contención. "Dada la contigencia, lo más seguro es que los derrumbes seguirán, porque estamos en una época donde llueve todos los días; por lo tanto pedimos a las autoridades que le den celeridad a la solución que ellos tengan a bien tomar", señaló.

Por su parte, Mercedes Hernández, vecina afectada, detalló que están muy nerviosos, y con cada aguacero que cae su preocupación aumenta. "Si esto se cae, no solo nosotros seremos los afectados, sino las casas de abajo, pues sobre esas viviendas caerían los escombros", aseguró.

Hernández agregó que hace tres semanas hubo un deslizamiento, motivo por el cual llamaron a Defensa Civil (DC). "Ellos vinieron y observaron, pero hasta ahí. Dijeron que venían la semana siguiente y nos quedamos esperándolos", indicó.

En la misma calle, unas casas más arriba, en la entrada del callejón, justo al lado del Instituto Moral y Luces, está la Quinta Villa Adelaida, donde sus dueños hacen un llamado a los entes gubernamentales a cortar un gigantesco árbol que amenaza con caer encima de unas viviendas frágiles que están del lado de Chapellín, y asimismo claman por la culminación  del muro de contención que hace unos 10 años comenzaron, y ha servido de sujeción para el terreno de esa parte de la calle, pero quedó inconcluso, por lo tanto claman por su culminación.

FIDEL ANTILLANO / FOTOGRAFÍAS: AMÉRICO MORILLO / CIUDAD CCS