Historia viva | Esequibo: usurpación en marcha
11/10/2023.- Recientemente un lector de la red manifestó contrariedad ante el título del programa de radio Viaje en el tiempo, "Historia de un despojo", y aducía que no podía llamarse "despojo" porque no se había consumado la usurpación del territorio continental y marítimo de la Guayana Esequiba.
Lamentablemente, debo ratificar que el despojo está en "pleno desarrollo", como lo diría un conocido periodista del tema internacional, en tanto la consumación de las firmas de contratos para explotar la plataforma marítima en la Zona en Reclamación del Esequibo ya es un hecho.
La firma de las concesiones hechas por el gobierno de Guyana sobre esa zona en reclamación, suscritas por compañías petroleras como ExxonMobil, tan solo espera la confirmación de las firmas de ratificación, de acuerdo a una declaración del vicepresidente de la República Cooperativa de Guyana, Bharrat Jagdeo, quien señaló el pasado jueves 5 de octubre de 2023 que la evaluación de las catorce ofertas recibidas para los bloques petroleros restantes frente a la costa de Guyana podría concluir la próxima semana, según un reporte del diario Guyana Times.
Todavía más: el gobierno de Guyana, desde septiembre de 2022, abrió las ofertas en los catorce bloques subyacentes en la costa afuera, incluyendo los localizados en la Zona en Reclamación, cuando comenzó un proceso de exploración y luego de subastas para la participación de las compañías petroleras que estuvieran interesadas en extraer petróleo y gas en dichas zonas.
En tal sentido, un año después de las discusiones y tiranteces por las subastas entre las compañías ofertantes y el gobierno guyanés, ya "alcanzaron acuerdos felices", sin considerar en lo más mínimo los reclamos y advertencias del gobierno de Venezuela ante el acto de usurpación en marcha.
En el área de reclamación está ubicado uno de los bloques más apetecidos por la transnacional ExxonMobil. Sin consideración de la legalidad internacional procedieron desde 2016 a hacer exploraciones y sondeos para determinar las reservas que en este se encuentran. Se trata del bloque Stabroek, que tiene 6,6 millones de acres y 11 mil millones de barriles de petróleo probados.
En los próximos días está por firmarse, en Georgetown, lo que para Venezuela significa el despojo de una de las reservas petroleras más importantes de su soberanía territorial, cuando el gobierno de Guyana, por incapacidad logística y técnica, entregue contratos petroleros leoninos a las siguientes compañías: ExxonMobil; Sispro Inc (Guyana); Total Energies EP Guyana BV; Qatar Energy International E&P LLC; Petronas E&P Overseas Ventures SDN BHD (Malasia); Delcorp Inc Guyana; Watad Energy y Arabian Drilling de Arabia Saudita; Liberty Petroleum Corporation de Estados Unidos; Cybele Energy Limited (Ghana); International Group Investment Inc y Montego Energy SA (Gran Bretaña).
Por otro lado, el presidente de la Exxon, Darren Woods, se muestra sorprendido por la celeridad con la cual ha actuado el gobierno de Guyana, al apresurar los cronogramas de trabajo y pasos para la contratación con esta compañía norteamericana, como lo señala en una entrevista:
Si luego miras lo que hemos entregado desde ese período, estamos trayendo esos barcos [buques flotantes de producción, almacenamiento y descarga] y esa producción antes de lo previsto; hemos superado el cronograma para los dos barcos [Liza Destiny y Liza Unity] que tenemos y el tercero [Prosperity], en el que estamos trabajando, se espera que supere el cronograma.
Por cierto, Woods sustituyó en la presidencia de la Exxon a Rex Tillerson, cuando este fue nombrado jefe del Departamento de Estado por el expresidente Donald Trump, y ha sido uno de los cuentadantes de las inversiones en Guyana para someter ese país a los designios insospechados de la política exterior agresiva de EE. UU. contra Venezuela.
Es decir, que el fraudulento Laudo Arbitral de 1899, que entonces fraguaron Gran Bretaña y Estados Unidos contra los intereses de Venezuela, en razón del conocimiento que tenían estas potencias de la existencia de oro en el Esequibo, sigue vigente y hoy tomó un giro a otra gran reserva (adicional), que colocaría a Guyana como una de las naciones con la mayor reserva de hidrocarburos del mundo, y en base de operaciones para controlar el espacio marítimo en la fachada atlántica de Venezuela, incluyendo el estratégico río Orinoco, a merced de los intereses militares y económicos de Estados Unidos.
El Acuerdo de Ginebra de 1966 fue burlado y violado, en tanto Guyana inició desde entonces una política de colonización del Esequibo desde el sur en el Rupununi, en los años setenta, hasta el sol de hoy, cuando las transnacionales petroleras norteamericanas están por apropiarse de nuestros recursos soberanos.
Aldemaro Barrios Romero