27/10/2023.- El sistema capitalista decadente necesita otra guerra. Inocentes los analistas que piensan que se trata de una bravuconada de un pequeño país rebelándose contra un vecino más grande. Inocentes los analistas que repiten la versión de las transnaccionales petroleras que compraron a toda la clase política de Guyana para que dijera que ellos tienen derecho a desarrollar sus actividades económicas en cualquier parte de su territorio. En Venezuela estamos claros, y lo denunciamos siempre, pero además lo confirmamos con lo expresado por el expresidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Donald Trump, cuando afirmó que ellos estaban listos para invadirnos y apropiarse de nuestro petróleo, y así se evitarían comprarlo.

Es la misma ley Monroe de siempre: "América para los americanos". Es decir, para los norteamericanos, que se creen dueños de nuestros territorios y todas sus riquezas naturales.

Convencidos como están de que Venezuela tiene la razón histórica y jurídica. Convencidos como están de ese despojo que hizo Inglaterra y los Estados Unidos a nuestro territorio, y de que el Acuerdo de Ginebra de 1966 es la vía sensata para resolver este diferendo, ellos ahora, con el financiamiento de las transnaccionales petroleras, quieren empujarnos a una guerra. Saben que la diplomacia bolivariana de paz los ha vencido y contenido hasta hoy. Entonces quieren una guerra entre Venezuela y Guyana para, con el gobierno títere de ese país, validar la tesis de Donald Trump y arrebatarnos nuestro petróleo y otras riquezas existentes en el territorio Esequibo.

El pueblo de Venezuela debe estar alerta y los pueblos del mundo deben escuchar esta denuncia: "Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia a plagar la América de miserias, en nombre de la libertad". La denuncia profética de Simón Bolívar no ha desaparecido y, por el contrario, hoy la vemos en esta acción concreta. Ellos, los norteamericanos y sus aliados de la OTAN, no quieren una solución pacífica. Ellos quieren una guerra en nuestra frontera con Guyana y aprovechar para arrebatarnos nuestras riquezas.

Venezuela quiere hoy más que nunca una solución pacífica y mantendrá con firmeza su apego a la solución negociada.

¡No a la guerra!

Luis Lira Ochoa