Mundo alerta | Ministro de Defensa israelí...
"Luchamos contra animales"
Campo de refugiados de Jabalia, Gaza, en la frontera con Israel.
26/11/2023.- En un contexto humanitario de 2 mil 600 palestinos e israelíes muertos, con otros millares heridos, 150 secuestrados y seis periodistas fallecidos —solo hasta octubre—, la prensa estadounidense cesó la cobertura independiente (que nunca lo fue del todo) del frente de batalla en Gaza, dominado por una violación masiva del derecho internacional. La información es parte de un reportaje publicado en octubre de 2023 en el programa de televisión y radio Democracy now!, dirigido por la periodista norteamericana Amy Goodman, una de las pocas —tal vez la única— que discrepa públicamente del gobierno de Estados Unidos. Amy reseña una inhumana declaración oficial contra los combatientes de Gaza: "Hemos impuesto un bloqueo total… No habrá comida, agua ni combustible. Todo estará cerrado. Estamos luchando contra animales humanos". La declaración ofrecida a la prensa por el ministro de Defensa de Israel, Yoav Galant, ilustra la pobreza intelectual del funcionario (ningún animal es humano), pero también la dimensión del desprecio que el gobierno de Tel Aviv siente por los 2,4 millones de seres —casi la mitad, niños— atrapados en Gaza.
En materia de derechos humanos, Galant no se anda por las ramas. El pasado 6 de agosto, ante el ataque inicial de Hamás, explicó con claridad hasta dónde está dispuesto a llegar contra cualquier país hostil. Dijo que no dudaría en atacar a Hezbolá y "devolver al Líbano a la Edad de Piedra", si atacan a Israel por el norte.
La verdad conduce a la paz
Goodman y su colega Denis Moynihan sostienen que:
A medida que Israel intensifica su brutal respuesta a la organización Hamás, es importante escuchar las voces de quienes se encuentran en la línea de fuego, en ambos lados del conflicto. Los principales medios de comunicación de Estados Unidos nos ofrecen constantemente las voces de los israelíes que han sufrido los actos de violencia de Hamás. Ojalá los medios cubrieran también de esa forma el dolor que padece la población civil de Palestina, ya que rara vez escuchamos su voz. Escuchar el relato de las víctimas en su propia voz es el primer paso para derribar barreras y cultivar una comprensión que pueda allanar el camino hacia una paz justa.
Raji Sourani, director del Centro Palestino de Derechos Humanos en Gaza y ganador del Premio de Derechos Humanos Robert F. Kennedy, expresó:
No hay un solo lugar que se pueda considerar como refugio seguro en Gaza. Hay aviones de combate o drones surcando todo el cielo. [Las bombas] pueden caer en un edificio con cientos de apartamentos, en una casa, en un hospital, en una escuela o en un refugio utilizado por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina.
Mientras hablaba, la casa de Sourani se estremeció a causa de una explosión, pero él continuó: "Netanyahu dice que los gazatíes deben abandonar Gaza. ¿Para ir adónde? No tenemos un corredor seguro (…) Es algo claramente genocida".
Por su parte, Ofer Cassif, un judío israelí que integra el Parlamento de Israel, denunció que
Recibí un mensaje de WhatsApp de una amiga muy cercana que estaba escondida con su marido en el kibutz. Me dijo que tenía mucho miedo y que podía oír a los combatientes de Hamás afuera. Por desgracia, esas fueron probablemente las últimas palabras que escribió, porque la asesinaron junto con su esposo, justo después de enviarme ese mensaje. Era una muy buena amiga mía, votante de nuestro partido, que también está en contra de la ocupación (…) Civiles inocentes de ambos lados, tanto israelíes como palestinos, están pagando el precio de una ocupación arrogante y criminal.
Las cadenas de televisión estadounidenses envían corresponsales a Israel para cubrir los episodios de violencia, pero rara vez entrevistan a palestinos, a activistas israelíes pacifistas o a periodistas que se oponen a la ocupación. Informes sobre la supuesta decapitación de bebés por parte de Hamás tienen amplia difusión en los principales canales de noticias, un hecho que también fue mencionado por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden. Al ser interrogada, la Casa Blanca rectificó la afirmación de Biden y señaló que no "han podido confirmar" la decapitación de infantes.
Músicos asesinados cantando al amor
Los hechos reales de violencia ya son bastante horribles: fueron masacrados 260 jóvenes en un festival de música dedicado a "la unidad y el amor". Un kibutz habitado por israelíes, a quienes un residente describió como "pacifistas", fue destruido. Más de 100 de ellos perdieron la vida y varios fueron secuestrados por Hamás. Mientras tanto, en Gaza, las bombas israelíes están aniquilando familias y barrios enteros. Hospitales y ambulancias están siendo atacados.
Rashid Khalidi, reconocido académico palestino-estadounidense y profesor de la cátedra Edward Said de Estudios Árabes Modernos en la Universidad de Columbia, dice a Democracy now!:
La idea de que puedes encerrar a cinco millones de personas, ponerlas entre muros, endurecer el asedio sobre ellas, permitir solo la entrada a cuentagotas de algo de comida, algo de agua y un poco de electricidad, esa idea ha explotado como resultado de los terribles acontecimientos (recientemente acaecidos). Esto no puede continuar así.
En opinión de Khalidi, "Estados Unidos debería tratar de apaciguar la situación (…) Financiamos esta ocupación. Financiamos esta violencia. Hay armas estadounidenses utilizándose hoy, ahora mismo, en Gaza, para matar a civiles inocentes, en violación de la ley estadounidense".
Estados Unidos tiene la capacidad de ejercer presión sobre Israel para que cese su ocupación de Gaza, Cisjordania y Jerusalén. Como primer paso, los medios de comunicación deben permitir que la sociedad estadounidense escuche las voces de las víctimas de todas las partes involucradas en este conflicto.
Raúl Pineda