La victoria de la coalición política izquierdista colombiana Pacto Histórico constituye para Venezuela una buena noticia en el panorama latinoamericano y mundial.

Gustavo Francisco Petro Urrego, economista, administrador público, exalcalde de Bogotá, senador, es el presidente de la República de Colombia 2022-2026, líder del Pacto Histórico, nacido el 19 de abril de 1960 en Ciénaga de Oro, Córdoba, Colombia, hace más de 62 años, y es uno de los políticos con más carisma en el territorio colombiano, quien se alzó con el triunfo en las elecciones presidenciales del vecino país, en segunda vuelta, el 19 de junio de 2022, con el 50,44 %  de los votos, en unidad con la líder social afrodescendiente del medioambiente, Francia Márquez.

Dentro del breve espacio de este comentario, trataré de dar una idea del deseo del anterior presidente de Colombia, Iván Duque. Este personaje, sin autoridad ética, creyó para sí, durante su período de gobierno, en un golpe de Estado y un juicio contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro, valiéndose del informe sobre derechos humanos de la chilena Michelle Bachelet, quien contextualizó la realidad venezolana de forma maquiavélica. Duque fue utilizado por la oligarquía colombiana, perpetuada en el poder con falsos positivos, miles de mujeres y hombres asesinados. Así maquilló delitos contra el derecho internacional durante la espiral de violencia en Colombia, país donde siguen asesinando líderes sociales.

Petro piensa hacer de la política exterior de Colombia un ejemplo de realismo. Se pronunció en el 77.° período de sesiones de la ONU por la distensión y el desarme a favor de la paz mundial, con una clara y firme posición contra el fracaso de su país y Estados Unidos en las guerras contra las drogas.    

Gustavo Petro llega al poder en condiciones muy difíciles. Los cuatros años del gobierno de Duque han sido desastrosos para la nación colombiana, dejando las finanzas en situación muy deficitaria. Petro ofreció durante la campaña electoral restituir el nivel de vida del pueblo, restaurar el valor de las pensiones y de los seguros sociales y erradicar el desempleo.

El presidente electo declaró que aplicará una política expansiva alentando las inversiones públicas y privadas, cosa muy poco común en la Colombia anterior sacudida por una alta inflación. El triunfo de Petro tendrá favorables repercusiones en otras naciones, especialmente en Brasil, donde se espera que Ignacio Lula da Silva gane las elecciones del 2 de octubre de 2022.

Por eso decimos que la victoria de la izquierda es una buena noticia en el panorama mundial tan cargado de peligros y acechanzas tras la ofensiva desencadenada por EE. UU.                   

J. J. Álvarez