Lanzando letras | El nuevo viejo experimento
29/12/2023.- Javier Milei es un ensayo ya conocido, traído a la política de la mano del capitalismo en su fase neoimperialista. Desde los experimentos con Collor de Mello en Brasil, figuras sacadas del llamado marketing político son lanzadas como outsiders antipartidos —también llamados antisistema— para captar el voto popular molesto y descontento con los gobiernos de turno, sin entender exactamente por qué. Menem, Macri, Bolsonaro, Juan Manuel Santos, y una larga lista de etcéteras, solo tienen explicación en el marco de El malestar en la cultura de Freud o en los análisis de neofascismo e ideología del deseo de Michel Clouscard. En ellos se busca, en la alienación más profunda de las mentes y la movilización y manipulación más terrible de las emociones, la explicación al motivo por el que el pueblo de a pie termina votando a sus futuros verdugos, represores y fascistas que de manera rápida irán contra todo lo que huela a derechos para los más desasistidos. En estos momentos, ya comenzó un pequeño brote de protestas en Argentina. El Frankenstein de turno comenzó a hacer lo que ofreció en su campaña —él lo dijo—: eliminación de subsidios, liberación de precios, recorte del Estado, entre otras cosas, lo que no es más que la ya conocida receta del FMI y la moda neoliberal, con nuevos elementos añadidos como la dolarización exprés.
En los meses previos, la derecha se alineó y aumentó los precios de los insumos hasta en un 80%, y de los alimentos básicos hasta en un 20%, y se supone que todo se debía a erráticas políticas económicas del gobierno saliente; pero no era más que parte de las líneas —ya ensayadas en toda América Latina— para causar malestar popular y empujar hacia la derechización el voto. Así pasó: la gente, cansada de penurias y carestía, votó por su futuro verdugo. Hoy sufre las consecuencias y ha empezado a salir a la calle. No bastó el recuerdo de Messi y Argentina logrando el campeonato del mundo; no bastó con que sigan punteando las eliminatorias para el mundial siguiente; la gente maneja rabia y frustración profunda y está dispuesta a volver a salir y derribar los proyectos del dictador, tipo Videla, en gestación. El pueblo, una vez que pase la borrachera del "sí se puede" de la clase media, una vez que pase el espejismo consumista de la navidad y se dé cuenta de que votó de la peor manera; entonces tendrá que decidir si retoma la lucha o acepta las imposiciones dictatoriales y neofascistas de Milei. Parafraseando a Bolívar: "Confío más en los consejos del pueblo que en los de los sabios".
Por eso apuesto a que el pueblo argentino renacerá de estas cenizas y retomará la senda libertaria marcada por San Martín.
Dr. Luis Lira Ochoa