1/02/24.- Sobrevivió a un impacto de bala en la columna vertebral mientras con su cámara, captaba los hechos violentos del 11 de abril de 2002, en plena avenida Baralt.

Mientras se encontraba en el suelo, personas que se hallaban cerca lo tomaron para socorrerlo mientras los intercambios de disparos se agudizaban, con francotiradores en sitios estratégicos, además de la fuerte arremetida de la Policía Metropolitana.

“En seguida yo sé donde me lo dan, las piernas no me responden, se me cae la cámara y mi primera reacción es tratar de recuperarla y no la alcanzo. No fue una bala perdida, estoy convencido de que me apuntaron. Hay que tener bolas para dispararle a alguien que lo que está es con una cámara en las manos”, relató en aquella ocasión.

Jorge Recio sobrevivió a este encuentro cercano con la muerte pero jamás pudo caminar, postrándose en una silla de ruedas, lo que no le imposibilitó para contar su historia durante años y sumarse al testimonio extenso de un grupo de colegas que fueron heridos en cumplimiento de su trabajo por captar bajo el lente de sus cámaras, un hecho trascendental.

Desde Barcelona, España, se extendió la noticia sobre su fallecimiento este jueves a los 61 años, legando para la posteridad imágenes que recrean un momento que marcó el curso de la historia de Venezuela para los años siguientes, con una etapa de cambios propulsada con el comandante Hugo Chávez hasta el Gobierno de Nicolás Maduro.

Jorge Recio llegó al periodismo gráfico movido por la inquietud de narrar los sucesos y no esperar detalles sobre los hechos, por lo que tomó su cámara analógica Nikon F4, de manera independiente, sin laborar en medios impresos y registró las manifestaciones de ese año, en ambos polos de la capital.

Todo ocurrió durante un paro corporativo organizado por la Federación Venezolana de Cámaras de Comercio y Producción (Fedecámaras) y la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV).

Pero en el día que fue alcanzado por el proyectil, en diversas gráficas tomadas por Recio en la avenida Baralt y Puente Llaguno, se pueden apreciar a los policías señalándolo de manera amenazante, con intenciones de atentar contra su vida.

En el documental Jorge Recio: Testigo y Protagonista, describe que las balas provenían desde edificios altos, con francotiradores colocados estratégicamente.

A pesar de sobrevivir sin la capacidad de caminar, Recio se rehuso a permanecer detenido e inactivo, por lo que continuó desempeñándose en su oficio hasta donde le permitió su condición física, convencido de que el reportero gráfico es un obsesionado por captar cada detalle, por más mínimo que sea. 

Hoy, el gremio fotográfico lamenta su muerte, pero su trabajo periodístico para documentar episodios que describen una Venezuela casi al borde de un colapso en diversos sentidos perdurará.

CIUDAD CCS