02/10/22.- Voceros de las y los productores artesanales de cocuy, la ancestral bebida producida en la zona semiárida de los estados Lara y Falcón, junto al alcalde del municipio Urdaneta del estado Lara, Hamad Al Chaer, el pasado viernes procedieron a la juramentación del Consejo de Protección del agave de cocuy.

El Consejo de Protección que congrega más de 250 productores artesanales del auténtico y patrimonial cocuy, en Siquisique y Baragua, junto a las autoridades e instituciones locales, regionales y nacionales, velará por la protección de la cultura que rodea la práctica ancestral de la producción.

Organización clandestina

La organización de los “cocuyeros” no es nueva. Durante el siglo 20 estos productores fueron perseguidos para evitar que fabricaran el famoso cocuy; por presiones de las grandes licoreras a los gobiernos de turno, estos se encargaban de eliminar la competencia de las grandes empresas productoras de ron.

Los gobiernos “democráticos” y las dictaduras, luego de destruir los alambiques encarcelaban a los productores, pero los cultores del agave que seguían trabajando de manera furtiva, se encargaban de la manutención de las familias de los encarcelados.

Así nacieron las primeras organizaciones, los consejos de cocuyeros, como resistencia a la persecución de los poderosos.

Domingo Guaidó, heredero de la cultura del agave, que ha mantenido el oficio que su padre aprendió del abuelo y este de su bisabuelo, también heredó la responsabilidad de la organización.

Guaidó “el Bueno”, como le dicen sus compañeros, es maestro de la cultura del agave y todo lo relacionado con esta actividad, como tal lo reconocen sus compañeros, además es el presidente de la Asociación de Cocuyeros de Siquisique, estado Lara.

Domingo Guaidó manifestó: “Este acto de juramentación es la formalización de lo que desde siempre hemos hecho, proteger a la familia productora y al agave de cocuy, esa maravillosa planta de donde se saca nuestra bebida nacional por excelencia, pero la producción de la bebida no sería posible sin las manos de nuestro pueblo, mujeres y hombres que en perfecta armonía con el medio ambiente y en resguardo de nuestra tradición conservamos los saberes, esto es una cultura arraigada por más de siete generaciones”.

El Consejo tiene quien le asesore

Honorio Dudamel “El Chispiao” militante revolucionario, luchador social y abogado, forma parte de la comisión asesora de la Asociación de Cocuyeros del municipio Urdaneta,  junto a Erick Jimeno, Alonzo Guaidó, Luis Ladino, Miriam Díaz, Miguel Dudamel “Musicario”, “El Toro”, entre otros y otras, forman parte de este equipo asesor.

Dudamel comenta: “Esta es la principal actividad económica del semiárido larense, está vinculada a las cabras, no hay cocuy sin cabras, por tanto está relacionada con la producción de carne y productos lácteos, no hay cocuy sin sábila, sin sisal”.

La persecución cambió de método

Prosigue Dudamel: “La mujer trabaja codo a codo con el hombre en la producción del cocuy durante todo el proceso, en el corte; el pilado, el prensado. Las niñas y niños también participan porque es una actividad familiar que debemos preservar y no permitir que los mismos empresarios que antes perseguían a los cocuyeros ahora vengan a apropiarse de su trabajo embotellando el producto de una cultura y secuestrando un patrimonio ancestral para ganar premios obtenidos del sudor y la explotación de un pueblo”.

“Ya no persiguen al productor para meterlo preso, torturarlo y asesinarlo, ahora lo persiguen para comprarle el producto barato, encapillarlo en bonitas botellas y hacerse más ricos”.

JESUS ARTEAGA / FOTOGRAFÍAS: JESÚS ARTEAGA / CIUDAD CCS