12/08/2022.- Este viernes, en el Salón Willian Lara, del Concejo Municipal de Caracas, se realizó un homenaje a Darío Vivas, a un año de su desaparición física, donde hicieron acto de presencia conocidos y allegados a este carismático dirigente quienes rememoraron, algunos entre lágrimas, vivencias junto al exconcejal y exdiputado.

El dirigente político nació en San Cristóbal, estado Táchira, el 12 de junio de 1950 y se caracterizó por su entrega y pasión con la Revolución Bolivariana. Durante su larga trayectoria desempeñó diversos cargos, entre los más resaltantes está su participación como vicepresidente en la Organización y Movilización del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Fue diputado de la Asamblea Nacional (AN) y miembro de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC, 2017-2020).

Entre los años 2010 y 2011 ocupó el cargo a vicepresidente en el Poder Legislativo. En 2020 estuvo al frente del Gobierno del Distrito Capital tras su designación por el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro.

Su papel como legislador fue destacable. Gracias a su gran desempeño, dijeron sus allegados, brindó y recibió confianza por parte un pueblo que lo acompañó durante mucho tiempo, como también de aquellos líderes quienes le propusieron grandes retos y desafíos, los cuales con esfuerzo y perseverancia logró asumir.

La militancia y la conciencia revolucionaria que plasmó Darío Vivas durante su estancia en este plano terrenal continúan latentes en cada una de las gestiones realizadas por el Gobierno Bolivariano.

Un gran ser humano y luchador

Hombre movilizador y revolucionario, así es recordado Darío Vivas por sus amigos, quienes además afirman que él tuvo grandes cualidades políticas pero, sobre todo, humanas y que fortaleció las asambleas de barrio en aquel entonces para así poder organizar de manera contundente al pueblo, quien siempre fue su principal objetivo en cada uno de sus trabajos.

Recuerdan que siempre poseía una presencia resaltante, vibrante y combativa, que era amante del trabajo, prestaba total atención a los pequeños detalles y tenía criterio ante determinados problemas que pudiesen presentarse pero lo más resaltante es su don de mando y por supuesto, su visión futurista.

Nunca huyó de las vicisitudes, afirman, y mucho menos de sus responsabilidades. Siempre se mostró resiliente ante aquellos ataques golpistas que tenían como meta perjudicar al pueblo y a la revolución bolivariana. Destacó siempre por su espíritu, humanidad, valentía, lealtad, compromiso y lucha patriótica.

La primera en relatar anécdotas vividas con el dirigente político fue Yulimar Hernández. Contó que su madre, a mediados del año 2017, a instancias de Vivas recibió un cheque para poder realizarse una operación de columna la cual fue de gran ayuda para aquel entonces, mientras que su hermano también recibió una ayuda laboral.

Mauro Hernández, padre de  Hernández, trabajó con el dirigente Darío Vivas en la realización de las campañas para el Partido MAS y gracias a esa pequeña relación, Yulimar asegura que tanto ella como su familia pudieron recibir ayuda médica.

Orgullosa de las labores del dirigente parlamentario, ella agradece todas las labores realizadas para el pueblo, las cuales estarán grabadas en su corazón. Yulimar Hernández finalizó su discurso con la siguiente frase “adelante con nuestro presidente Maduro”.

La siguiente en homenajearlo fue Carmen Varela de Soto, licenciada en Enfermería, quien cuenta con 86 años de edad. Ella desempeñó labores en el año 1980 como concejal suplente de Darío Vivas, a quien califica como una “persona muy humilde” ya que brindaba su ayuda a quien sea que la necesitara sin ningún tipo de discriminación, razón por la cual no le importaba dirigirse al lugar que fuese necesario con tal de dar su más sincero apoyo.

Carmen Valera asegura que siempre ora y le pide a Dios “para que lo lleve al cielo y de voluntad de que está descansando en paz  porque él se lo merece”. Humilde y servicial, fueron las palabras utilizadas por la licenciada para describir a aquel hombre dedicado a tratar y cubrir las necesidades del pueblo.

Por su parte, Netdaly Ovalles quien fue gran amigo, aseguró que durante los años 80 fue “un rebelde sin causa” quien habitaba en la Cota 905, específicamente en el Barrio San Miguel. Su relación con el parlamentario surgió debido a los recorridos que éste realizaba por los alrededores de la zona antes mencionada, incluyendo Santa Rosalía, Santa Teresa y la parroquia El Paraíso.

Ovalles relató que Darío Vivas era un hombre a quien no le gustaba “que el pueblo tuviera sed” esto debido a la escasez de agua presentada en aquel entonces por los sectores que éste recorría. A pesar del entusiasmo que el diputado mostraba para que los ciudadanos pudiesen abastecerse con el vital líquido, éstos no deseaban reunirse debido al miedo generado por las represiones de aquel momento.

Ovalles es escultor de losas artesanales, plomero y carnetillero y a pesar de su poca experiencia en el área política ayudó al exconcejal en su trabajo comunal, quien depositó su confianza en el obrero para llevar a cabo sus funciones ya que lo consideraba como alguien capaz, debido a que el dirigente siempre tenía como legado que “un revolucionario debe estar formándose constantemente”.

ANA BÁRBARA PARRA / CIUDAD CCS/ FOTOGRAFÍA: PRENSA CONCEJO MUNICIPAL