Hunter Biden podría ser sentenciado por varios delitos

Agentes federales reunieron pruebas suficientes para acusar al hijo del presidente

Los pasos del empresario fueron monitoreados por mucho tiempo.

 

07/10/22.- Tras varios meses de investigación, este jueves, a través del diario estadounidense The Washington Post, se dio a conocer la alarmante noticia que involucra a Hunter Biden, quien es acusado de posesión de armas y consumo de drogas.

Chris Clark, abogado de Biden, ofreció una declaración al canal NBC donde expresó que la información expuesta por el medio de comunicación antes mencionado es filtrada, considerando esta acción como un delito federal.

Los agentes encargados de dirigir el caso aseguraron a The Washington Post haber acumulado pruebas considerables que direccionarían a Hunter Biden a una condena. Sin embargo, el fiscal federal de Delaware, designado por el ex presidente Donald Trump, decidirá si se presentan cargos contra Biden.

¿De qué se le acusa a Hunter Biden?

Desde el inicio de este escándalo, las acusaciones contra Hunter Biden se debían supuestamente a diversas violaciones de leyes y multiples transacciones tanto financieras como comerciales a nivel internacional.

Con el tiempo, estas investigaciones se centraron en otros aspectos; por este motivo, ahora se intenta demostrar que Hunter Biden mintió sobre unos documentos para la compra de una pistola en 2018 y no declaró ingresos relacionados con diversas empresas comerciales.

Respecto al consumo de drogas, Biden aseguró en un formulario federal que no era "usuario ilegal o adicto a la marihuana o cualquier depresivo, estimulante, narcótico u otra sustancia controlada". Sin embargo, según expuso en su propio libro de memorias en 2021, donde habla de su lucha contra el abuso de sustancias, en esa época fumaba ‘crack’.

Las imágenes encontradas en el computador portátil de Hunter, que fue motivo de polémica antes de las elecciones presidenciales de 2020 en EEUU, muestran que consumió el estupefaciente. Además, sus prácticas comerciales han sido objeto de un mayor escrutinio a medida que las organizaciones de medios continúan investigando el contenido del material procedente del ordenador.

 

ANA BÁRBARA PARRA / CIUDAD CCS


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