27/04/24.- Si un hombre tuvo una luz brillante dentro del mundo político venezolano, ese fue el “profe” Aristóbulo Iztúriz, incansable luchador social y gremial que siempre se mantuvo del lado del más necesitado.

Aristóbulo Iztúriz nació en Curiepe, estado Miranda, el 20 de diciembre de 1946, y cambió de plano un 27 de abril de 2021, a los 74 años de edad, dejando un enorme legado de ejemplos y tareas en sus casi 60 años de lucha política.

Defendió el Estado Docente y habló de educación universal, gratuita y de calidad para todas y para todos, así como de la masificación de la educación igualitaria, eso lo puso en la Constitución siendo miembro de la Asamblea Constituyente de 1999.

En el campo educativo, continuó su labor impulsando cambios profundos dentro del sistema de la educación venezolana que se tradujeron en Simoncitos, Escuelas Bolivarianas, Misión Robinson, Misión Ribas, Misión Sucre, 47 universidades y escuelas de formación.

Su empeño por impulsar una educación gratuita y masificada llevó a que Venezuela fuese declarada por la Unesco, el 28 de octubre de 2005, como Territorio Libre de Analfabetismo, hecho logrado por el alcance de las misiones Robinson y Rivas.

Político, diplomático, luchador social, sindicalista, deportista, comunero, luchador afrodescendiente, y en todas esas facetas era sobre todo un maestro. Aristóbulo dijo en algún momento: “Nos hicimos maestros para ser los creadores, defensores de la verdad y la libertad”.

Recordado como el “Cimarrón Mayor”, fue un hombre de sonrisa espléndida, pero de carácter firme, multifacético, básicamente entregado a la docencia, incansable luchador social que acompañó al presidente Chávez y posteriormente al presidente Maduro; fue vicepresidente de la Asamblea Nacional Constituyente, ministro de Educación, gobernador del estado Anzoátegui, vicepresidente de la República, ministro para las Comunas y vicepresidente sectorial del Socialismo Territorial, siendo esta la última trinchera de batalla del “profe Aristóbulo”.

Las estrategias creadas e implementadas por Venezuela en materia educativa durante la pandemia, reconocidas en todo el mundo, tuvieron la influencia y la experiencia de este maestro venido de Curiepe y de quien el presidente de la República, Nicolás Maduro, recuerda por una de sus frases: “A donde usted me manda para allá voy, soy un soldado de la Revolución”.

TOMÁS MORENO HERNÁNDEZ / CIUDAD CCS