Dolarización de aranceles, ¿está la UCV en un proceso privatizador?
Estudiantes de Agronomía rechazaron el cobro de aranceles para procesos administrativos
01/06/24.- Crece la indignación de la comunidad de la Universidad Central de Venezuela (UCV), por lo que denuncian como “un proceso de privatización paulatina de la educación universitaria”.
El descontento ha sido por la decisión de los decanos, aglutinados en el Núcleo de Decanos, de hacer caer la crisis universitaria y el bajo presupuesto de la institución sobre los estudiantes, obligándolos a pagar aranceles por procesos administrativos indispensables para la prosecución académica.
Ante este escenario, el diario web Ciudad CCS, se puso en contacto con el doctor Miguel Alfonzo, profesor titular de la Facultad de Medicina y de Farmacia, quien fue candidato a rector y miembro del Consejo Universitario durante la gestión de Cecilia Arocha.
Conversamos vía telefónica sobre lo que se contempla como el avance en la privatización de la educación universitaria, un grave retroceso para una histórica conquista de los estudiantes y del pueblo trabajador alcanzada hace décadas, el acceso a la educación gratuita.
“Durante mi estadía de quince años en el Consejo Universitario con la gestión de la ex rectora Cecilia Arocha, siempre voté de forma negativa ante lo aumentos anuales de los aranceles que traía el profesor Belmonte secretario de la UCV, primero por los montos, segundo porque lo hacen en dólares”, expresó el doctor apenas inició la conversación.
“Que supuestamente son una referencia y se cobra en bolívares” continúa explicando; “los montos son muy altos para los ingresos de la mayoría de los estudiantes de la UCV, vamos a empezar por ahí”.
Miguel Alfonzo explicó que “la Universidad Central y otras universidades están trasladando la solución de sus problemas de ingresos a través de los aranceles y otras partidas”, y señala que “esto se debe a qué, a la crisis que está viviendo el país por todo lo que hemos pasado, por las sanciones, la guerra económica, por todo”.
El profesor denuncia a las actuales autoridades de la UCV, por cubrir las necesidades de la Universidad a través de los aranceles de los estudiantes de pregrado. “Toda la comunidad universitaria sabe que la matrícula estudiantil bajó, bajó enormemente, más de 40 % en los últimos años, o sea casi la mitad de los estudiantes se fueron de la universidad, por razones económicas principalmente, para ponerse en el mundo laboral”.
“Entonces los que se quedan tienen que pagar en dólares o liquidar el equivalente en bolívares oficiales. Caramba no, eso no es así, en la Constitución y en la Ley Orgánica de Educación plantean claramente que la educación hasta pre grado es gratuita, es gratis”, explica.
“No podemos darle más carga al estudiante porque así vamos a quedarnos con la cuarta parte de la matrícula. La situación económica de todos, unos más que otros, es considerable y las becas son de bajo monto”, añade.
“A mí siempre me ha parecido un exabrupto” agrega el profesor “y repito siempre ha sido mi voto negativo ante esas decisiones que de forma casi unánime aprobaban en el Consejo Universitario”.
Igualmente, Alfonzo aseguró que “se están metiendo la daga en su propio cuello las autoridades” y la universidad debe buscar “otras manera de cubrir sus necesidades a través de ingresos propios con la investigación, con los servicios que ofrece la universidad, pero que no sea a costa de los estudiantes”.
“Al subir esos aranceles con esos montos van a tener como consecuencia la baja de la matrícula estudiantil, y no estoy exagerando porque es sumatoria de cosas y eso deben estar conscientes”, puntualizó.
La reacción de los estudiantes
El pasado 10 de mayo, el Centro de Estudiantes de Ingeniería Agronómica y el movimiento estudiantil Verde Agro tomaron el Consejo de Facultad en el núcleo Maracay para exigir la nulidad inmediata de los cobros.
En varias escuelas y facultades de la UCV ya se vienen implementando el cobro de aranceles a los estudiantes, una propuesta que permanece en discusión “sin consulta previa, sin encuesta, sin estructura de costos cabe destacar”, denuncian los estudiantes de Agronomía, “sabiendo que la educación en las universidades autónomas y públicas es gratuita”.
Los montos por arancel van desde 2 dólares por retirar una materia, 10 dólares por inscripción, 20 dólares por un examen de recuperación; y el monto más alto, 60 dólares por una copia de las notas certificadas.
Asimismo, se cobra 30 dólares por constancias de equivalencia, 30 dólares por constancias especiales y 60 dólares por constancia de horario.
“Todo esto ante el silencio cómplice de los dirigentes estudiantiles de la Federación de Centros Universitarios y en otras escuelas y facultades donde ya se han comenzado a cobrar estos montos que a parte de inaccesibles para el estudiante de a pie, pareciera un negocio bastante rentable para las autoridades”, explicó Armando Machado, presidente principal del Centro de Estudiantes de Ingeniería Agronómica.
Los estudiantes de Agronomía, señalan cómo se está naturalizando la mercantilización de la educación en una universidad pública, expulsando a los estudiantes de menos recursos. “El que pueda pagar que lo haga, el que no, que se quede en el camino, expulsado por vía de hecho de la educación universitaria”, comentan.
¿Dónde está la FCU?
Sobre el papel de la dirigencia estudiantil encabezada por la Federación de Centros Universitarios ante esta situación, el profesor Miguel Alfonzo nos asegura que “ha sido una actitud no beligerante, complaciente y yo realmente estoy sorprendido de eso”.
Afirma que esta situación “no es de ahorita sino de hace varios años, las diferentes dirigencias estudiantiles que ha pasado han sido mudos sordos y ciegos (…) no puede ser que estén aprobando una decisión que está en contra de los intereses de los estudiantes (..) El estudiante se encuentran sin sus representantes en los espacios de decisión y es por ello que los estudiantes de la Facultad de Agronomía allá en Maracay decidieron tomar el Consejo de Facultad, yo los entiendo”.
El profesor dice ser afectado igualmente por esta situación, “la subida anual de los aranceles cada vez es más fuerte, que ni siquiera los mismos padres pueden cubrir; es más si a mí me toca pagar esos aranceles se me hace cuesta arriba ante el sueldo que yo gano en la UCV, yo no cobro en dólares” concluyó.
Jimmy es un joven de 21 años que no pudo inscribir su 2º semestre en Arquitectura, ya que no tenía el monto completo para los aranceles. La solución que le propusieron fue pagar una parte y otra más adelante. El joven que según confiesa atraviesa los altibajos económico y familiares que todos los venezolanos padecemos en estos difíciles años, finalmente decidió como reza una letra de Leonardoi Favio "otra vez será" y tomó la riendas de responsabilidades que tiene que asumir en su hogar y no puede postergar.
La Universidad Central de Venezuela es una universidad autónoma, pública y gratuita, “la casa que vence las sombras”, sin embargo, las actuales autoridades siguen avanzando aceleradamente en el cobro de aranceles en dólares a los estudiantes. No dejemos que la oscuridad se apodere de estos espacios, “los negos no sabemos hacer silencio”.
JUAN CARLOS TORRES / CIUDAD CCS