Historia viva | La nueva era comenzó
31/07/2024.- Mientras trato de concentrarme para escribir esta nota, una verdadera guerra de mensajes digitales viejos, falsa información, cacerolas ruidosas, mucha bulla y desatados rumores tratan de borrar la dimensión del resultado de la votación mayoritaria del pueblo venezolano, este 28 de julio, para profundizar las transformaciones sociales del siglo XXI.
Es sencillamente la guerra cognitiva en pleno desarrollo, que exportarán los medios internacionales para mostrar el supuesto caos que vive Venezuela, generado en puntos neurálgicos de Caracas, para proyectarlo negativamente sobre un imaginario de falsedades que desdicen de la voluntad de paz del pueblo venezolano.
En el contexto internacional, la próxima firma de incorporación de Venezuela en los Brics abre para este país un universo de posibilidades en el plano comercial, de intercambios y de desarrollo industrial, que desplegará las potencialidades de generación y producción secundaria de nuestros recursos mineros y agropecuarios.
En contraposición a cuando teníamos una economía estancada en la monoproducción petrolera, con mercados dependientes de Estados Unidos de manera casi exclusiva, ahora se abre una oportunidad en el campo energético, pues al Venezuela incorporarse a los Brics, estos
... controlarían el 26,2% del total mundial. Si se suman Arabia Saudita e Irán, sería el 35,3%. En el caso del gas, pasaría del 25,2% al 28,6% con la adhesión venezolana. En suma, la adhesión venezolana catapulta a los Brics como potencia petrolera1.
Son cifras que en reciprocidad generarían mayor diversidad en la producción agrícola y pecuaria, pues algunos países miembros de los Brics no tienen las condiciones climatológicas, hidrológicas y geopolíticas necesarias. Venezuela tiene esas ventajas, especialmente en comparación con algunos países asiáticos de la mencionada asociación.
La industria farmacéutica de la India, una de las más desarrolladas del mundo, le daría a Venezuela una ventaja competitiva en la región latinoamericana y caribeña como industria próspera, con tecnología de avanzada y profesionales nacionales formados para ese rubro.
Ya vemos cómo la economía nacional repuntó en el primer semestre del año 2024, apenas con algunas medidas que generan confianza y seguridad en las inversiones. Baste ver cómo han proliferado los comercios de bienes en la ciudad de Caracas desde enero a julio de 2024.
Si los subordinados fundantes hubieran ganado, estos planes no serían posibles, pero el pueblo venezolano le dio la confianza a los insubordinados fundantes para que, mediante el Plan de la Patria, Venezuela alcance la cualidad de potencia industrial.
Aunque es duro decirlo, a Europa no le queda otra fuente energética más que la venezolana, toda vez que mataron sus relaciones con los rusos al involucrarse en la guerra de Ucrania y no tener los campos energéticos de esa nación para suplir sus altas demandas de petróleo y gas.
Con la elección de Maduro como presidente reelecto, hemos saltado al otro lado del abismo de las hostilidades y medidas coercitivas unilaterales que han impuesto los gobiernos de Estados Unidos, desde Bush hasta Biden, todos derrotados por la Revolución Bolivariana.
En la dimensión nacional, las proyecciones de la gestión del gobierno priorizan la asistencia social y, una vez superadas las coyunturas y el dolor generados por las medidas coercitivas, las finanzas del país ya están siendo proyectadas en recuperación franca. Esto debido, en especial, a la solidaridad de un nuevo relacionamiento mundial, lo que derivará en nuevos y favorables contratos con la clase trabajadora nacional.
Estas nuevas interrelaciones de reciprocidad y reconocimiento de los derechos laborales de la clase trabajadora venezolana, como lo ha señalado el propio presidente Maduro, van a sumar un nuevo estado de felicidad para el buen vivir de la familia venezolana, como prioridad de una gestión orgánica popular.
Por eso, hemos señalado el carácter histórico de la elección del domingo 28 de julio. Venezuela ahora está en un parto, por la presencia de los demonios del caos. En contrafuerza, está la voluntad firme del pueblo venezolano de vivir en paz y con estabilidad política.
Tenemos las ideas del pensamiento bolivariano, los recursos para alcanzar esos objetivos y la conformación de las estructuras sociales para defender esos logros de manera segura y equilibrada, pero, sobre todo, para avanzar a estadios superiores del desarrollo humano y social que impactarán positivamente en América Latina y el Caribe.
Aldemaro Barrios Romero
Fuente consultada:
1García Fernández, A. Siete claves sobre el ingreso de Venezuela a los Brics. (2023, 10 de junio). Celag Data. https://www.celag.org/siete-claves-sobre-el-ingreso-de-venezuela-a-los-brics/