09/08/2024.- ¡No me empujen, que yo me caigo solito! Menos mal que no ganamos, porque se hubiese formado el verguero en este país. ¿Se imaginan esa vaina? ¿Quién carajo iba a esperar el 10 de enero para tomar posesión? Ni de vaina. El mismo 29 de julio tomábamos Miraflores, y al carajo los enfermos. Ahora andamos con ese peo de pedir que publiquen las actas, que de paso, esa vaina ya no existe. Eso era antes, en las elecciones manuales, que nos robamos durante muchos años, con aquella jodedera de "acta mata voto". Ahora son comprobantes, que no tenemos, pero que los pusimos en el fake CNE que creamos, o en el CNE Plana, como aquellas planillas planas que también hicimos hace algún tiempo. Es que no escarmentamos. Antes de meter esas actas, o como se llamen, en el CNE, se las hubiésemos dado a la compañera Teresa Albanes para que las quemara, y listo, se acababa el peo. Pero, coño, seguimos haciendo las mismas vainas, pero siempre la dictadura nos jode. Ahí está "Edmudo", que no sabemos qué carajo irá a hacer, porque parece que ya no se puede autojuramentar como el compañero Guaidó, porque ni siquiera se presentó en Las Mercedes, porque la compañera María —Súmate— CM salió de la clandestinidad y dejó a "Edmudo" en su lugar. Ahí en Las Mercedes nos llevamos el gran coñazo del año: no había la gente que esperábamos, porque ni siquiera Espoleta Allup se presentó, y mucho menos el Andrés —A Cero Cincuenta— Velásquez. Esa gente nos está sacando el culo, literalmente, porque saben que nos jodimos, aunque es mejor que sigamos pecando, pidiendo publicación de actas y lo que nos dé la gana, porque así somos nosotros, que nos queremos tanto.

Las vainas que nosotros hacemos aquí no las hace nadie en ningún otro país. Primero, no firmamos el acuerdo que nos pidió el CNE verdadero, porque sabíamos que íbamos a perder y no íbamos a reconocer, ni de vaina, al dictador. Eso era buscar cuchillo para nuestro pescuezo. Después, no fuimos al TSJ cuando nos invitaron. Ahora, cuando vuelven a invitar al compañero "Edmudo", él publica un comunicado, cagadísimo, donde dice que se siente amenazado, y no va. Menos mal que los malandros que contratamos no fueron por él, porque le hubiese dado una vaina, y la pena y vergüenza que estamos pasando con los compañeros en el exterior, que nos llaman y nos dicen que cuándo carajo nos montamos en Miraflores, porque allá, en el exterior, se creen que Mambrú se fue a la guerra, y este país es un peo donde no se puede salir a la calle. Lo que no les queremos decir es que la vaina se enfrió, que ya la vaina no tiene vida, pero nos da una pena del carajo. Hasta el compañero Antony Blinken nos llamó y se dio cuenta de que no habíamos ganado un carajo y salió corriendo a decir que todavía no reconocían al presidente, pero como ganador sí, una vaina que tiene loco al compañero Rosales, porque él pide que le expliquen esa metáfora gringa. Ahora todo quedó en manos de los comunistas Lula, López Obrador y Petro, es decir, que estamos más jodidos que el hombre que se sentó en un pajar y se clavó la aguja que tenía años perdida.

El papá de Margot, llorando, nos dijo: "No es mi llanto, es el humo del cigarrillo que me hace llorar. Somos la gente a la que más han engañado en este país. La oposición violenta, como la llaman, nos ha dejado tristes y solitarios. Ahora, pedimos actas, ¿qué vaina es esa? Eso no tiene sentido. Después que el compañero Elon Musk le metió 30 millones de ataques a la página del CNE, ¿qué carajo queda para nosotros? Hasta aquí me trajo el río. Decimos que somos la gente decente y pensante de este país, y no hemos podido engañar a estos chavistas brutos y desdentados. Estoy a punto de tirar la toalla al medio del ring. Yo no aguanto más este aguacero de derrotas, carajo". Y se fue al cuarto y le metió ese coñazo tan duro a la puerta que la vecina salió enfurecida gritando: "Ya, muérgano, yaaaaaaaaa".

—Que la vida iba en serio, uno lo comienza a entender más tarde... —me recita Margot.

Roberto Malaver