18/08/2024.- Las cifras de padecimiento de enfermedades metales a escala mundial son exorbitantes, todos podemos estar vulnerables a tales padecimientos debido a factores sociales, biológicos, entre otros; estas están definidas por el Instituto Nacional de Enfermedades Mentales como un trastorno mental, de conducta o emocional que puede variar de grado muy leve a un nivel severo.

Existe un grupo de personas vulnerables con gran riesgo de padecer enfermedades mentales y con niveles bajos de actividad física, entre ellas mujeres embarazadas, pacientes con cáncer, los privados de libertad y personas adictas a algún tipo de sustancia ilícita.

La Organización Mundial de la Salud indica que el 16% de las mujeres embarazadas padecen trastornos mentales como pueden ser depresión, ansiedad o trastorno de la bipolaridad, provocando en algunas ocasiones resultados negativos durante el embarazo, los pacientes con cáncer en su gran mayoría padecen síntomas depresivos debidos a sus diagnósticos. 
Por otro lado, en los reclusos se observan altas tasas de enfermedades mentales, debido a su encarcelamiento, y aproximadamente la mitad de los consumidores de sustancias experimentan enfermedades mentales, ya que existe una estrecha relación entre el consumo de sustancias y la ansiedad, depresión, trastorno de la bipolaridad y trastorno límite de la personalidad.

Se ha demostrado que los programas de actividad física pueden afectar positivamente a la depresión, la ansiedad, el estrés e incluso los antojos. Trotar, nadar, montar bicicleta, caminar, levantar pesas, bailar, etc., son solo algunas de las actividades que tiene un impacto positivo en la mejora de la salud mental. La OMS recomiendan que la población adulta realice al menos 150 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada semanales.
La actividad aeróbica reduce los síntomas de abstinencia, las ansias de consumo de drogas, depresión y ansiedad. A los presos se les recomienda realizar actividad física diaria al aire libre, con el fin de reducir los sentimientos de desesperanza y aumentar las oportunidades sociales que conducen a una mejor salud mental. 
Los ejercicios de mente y cuerpo, como el yoga y la meditación pueden tener efectos profundos en nuestros estados de mentales, en conclusión, debemos saber cómo la cotidianidad puede afectarnos de manera distinta; es por ello que tomarse un tiempo para el cuidado personal y manejo de nuestra salud mental con actividad física y recreativa es de vital importancia. 

Ydalmis Bravo