14/09/24.- La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, hizo este sábado un llamado de alerta a su pueblo para mantenerse en defensa de la democracia ante las amenazas golpistas y de desestabilización política que se ciernen sobre el país centroamericano.

Durante un discurso pronunciado ante miles de personas en Tegucigalpa, la mandataria reafirmó su compromiso de garantizar elecciones limpias y transparentes en 2025, y destacó la importancia de que la clase obrera y el pueblo todo se mantenga en defensa democrática y respaldando los logros del Gobierno socialista hondureño.

"Invito a la clase trabajadora a defender nuestra democracia", expresó Castro en su enérgico discurso en el que también advirtió que no permitirá que se organice un nuevo golpe de Estado en la nación.

Destacó que más de un millón de campesinos han recibido semillas y fertiizantes, gracias al impulso del polo tecnológico como parte de los esfuerzos por mejorar la producción agrícola y asegurar la alimentación de la población rural.

Asimismo, la educación y la salud también fueron puntos centrales de su discurso. Castro resaltó que ahora miles de niños de su país tienen acceso a la educación gratuita y afirmó que se están recuperando varios centros de salud en el país.

También anunció la entrega de miles de becas y el apoyo a la juventud para acceder a instalaciones deportivas con el objetivo de fortalecer el desarrollo integral de las nuevas generaciones hondureñas.

"Los vencimos en las calles y los vencimos en las urnas, y los volveremos a derrotar en las urnas", señaló Castro haciendo hincapié en la resistencia popular que ha marcado su mandato y su determinación de continuar el rumbo trazado por la voluntad democrática del pueblo.

En el cierre de su alocución, la jefa de Estado expresó: "¡Prohibido olvidar que somos resistencia!".

Hace 15 años, el 28 de junio de 2009, el entonces presidente de Honduras, Manuel Zelaya, fue sacado del país a la fuerza por militares, durante la madrugada, y fue llevado a Costa Rica en lo que se consolidó como un golpe de Estado con la marca del imperialismo estadounidense.

Durante su gobierno, Zelaya se adhirió a las iniciativas de Petrocaribe, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio (ALBA-TCP), apoyó a Cuba y al presidente de entonces de Bolivia, Evo Morales.

Zelaya también propuso una consulta popular no vinculante para preguntarle a la población si aceptaba que en las elecciones de noviembre de 2009 se le consultase si estaba o no de acuerdo con una Asamblea Nacional Constituyente, elementos que causaron rechazo en Washington y que aceleraron el golpe de Estado en su contra.

CIUDAD CCS