Una temporada de beisbol en homenaje a Víctor Davalillo
El viernes iniciará el torneo en honor al pelotero fallecido el pasado diciembre
04/10/24.- La temporada 2024-2025 de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), cuya inauguración está señalada para el viernes 11 de octubre, en el estadio Universitario con el juego entre el campeón Tiburones de La Guaira y Navegantes del Magallanes, estará dedicada el glorioso Vitico Davalillo, quien tuvo una brillante carrera como jugador.
Es necesario escribir algún recordatorio sobre uno de los mejores peloteros que han actuado en los campos de beisbol, porque las preguntas o las discusiones en Venezuela son permanentes cuando se trata de señalar al mejor o a los mejores peloteros nacidos en el país, que han hecho carrera tanto en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional como en las Grandes Ligas, en Japón, en México y otros países donde el juego de pelota tiene miles de seguidores y constituye un atractivo muy especial.
Son muchos los peloteros nativos que podemos señalar, pero hay uno muy especial, que en su época llenó de gloria su actividad y fueron muchas las páginas que se escribieron en su nombre como jugador, para quedar como uno más entre los inmortales de nuestro beisbol.
No hay que indagar mucho en la historia de la LVBP para señalar a Víctor José Davalillo Romero, cuyo nacimiento se señala el 23 de julio de 1939, quien presentó su último saludo en la tierra, durante la celebración de la Serie del Caribe 2023, realizada en el estadio Monumental Simón Bolívar de la parroquia Coche y pasó a formar parte del firmamento sagrado de la gente que se ganó la gloria con su conducta como pelotero y ciudadano ejemplar en la vida.
En el mundo del beisbol fue conocido como "Vitico" en países del Caribe y como "Vic" en Grandes Ligas, en ambos ambientes dejó plasmada su versatilidad como jugador, tanto a la ofensiva como en la defensiva.
Pelotero profesional
Se inició en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional en la temporada 1957-58, con Leones del Caracas, equipo con el cual actuó, en forma consecutiva, hasta la 1974-75. En la siguiente 1975-76 militó con un equipo fusionado, denominado Tibuleones, el cual jugó en Acarigua, estado Portuguesa, porque tanto Tiburones de La Guaira y Leones del Caracas no llegaron a un acuerdo con la Fundación UCV sobre el arrendamiento del Estadio Universitario.
Desde la temporada 1976-77 a la 1985-86 jugó con el conjunto de Tigres de Aragua y en la 1986-87 volvió a Leones del Caracas y lo que constituyó su retiro definitivo.
En la Liga Venezolana de Beisbol Profesional estuvo activo en un total de 30 temporadas, en las cuales jugó en 14 round robin y 10 finales. Actuó en 1.282 juegos, con 4.636 veces al bate, 666 carreras anotadas, 1.505 imparables, cifra que lo coloca como el bateador con más hits en el circuito. A esas estadísticas se le anotan 197 dobles, 50 triples, 34 jonrones, 483 carreras impulsadas y 138 bases robadas, con un excelente promedio ofensivo de 325.
Atrapada memorable
En el beisbol hay recuerdos de jugadas excepcionales, que quedan en la mente de los aficionados. Bob Darwin, en la temporada 1972-73 con el Magallanes, quedó campeón jonronero con 19. En la final, realizada en febrero de 1973, fue escogido como refuerzo de las Águilas del Zulia para enfrentarse a los Leones del Caracas.
En el sexto partido con las Águilas ganando 3 por 2, Darwin se enfrentó al derecho venezolano Luis Peñalver; conectó un batazo hacia los lados del jardín central y Víctor Davalillo, que no había perdió de vista a la bola, con un enorme salto realizó la atrapada para quitar ese vuelacercas. Había dos hombres en base por lo que evitó que se anotaran tres rayitas.
Jugador en Estados Unidos
Inició su carrera en Estados Unidos como lanzador en las ligas menores, donde se desempeñó hasta que en 1962 lo colocaron como bateador en la Liga Internacional, donde disparó 200 incogibles para titularse campeón bate, además de 24 bases robadas, 18 triples, 296 bases alcanzadas y 246 de promedio ofensivo.
En 1963 se inició en las Mayores con el equipo Indios (ahora Guardianes) de Cleveland, año en que fue candidato a Novato del Año. En 1964 ganó un Guante de Oro como jardinero con el mismo equipo. En 1965 conquistó el tercer mejor promedio ofensivo de la Liga Americana. En 1970 fue colocado como bateador emergente y ese año estableció un récord al conectar 24 imparables consecutivos en esa posición ofensiva.
Fue ganador de dos anillos de series mundiales en 1971 y 1973, con Piratas de Pittsburgh y Atléticos de Oakland, respectivamente. Su retiro se produjo en 1974. Luego pasó a la Liga de México. En 1977 Tom Lasorda lo hizo regresar a las Grandes Ligas con Dodgers de Los Ángeles. Jugó hasta 1980 para un total de 16 temporadas, lapso en el cual actuó en 1.458 partidos, tuvo 4.017 turnos al bate, anotó 509 carreras, conectó1.122 hits, 160 dobles, 37 triples, 125 bases robadas y dejó promedio ofensivo de 297.
Liga mexicana
A partir de 1974 jugó durante tres temporadas en la Liga Mexicana de Beisbol Invernal con Cafeteros de Córdoba y luego en 1977 con Rieleros Aguas Calientes, conjunto con el cual fue campeón en 1978. Volvió a las Grandes Ligas en 1980 y al año siguiente regresó a actuar con Aguas Calientes.
Homenajes
Fue condecorado por varias gobernaciones de estados, por organizaciones deportivas y sus méritos fueron suficientes para ser exaltado a los salones de las famas del Deporte Venezolano en 1961 y del Beisbol en 2003.
Es considerado hijo ilustre de Cabimas, estado Zulia, donde el estadio municipal fue bautizado Víctor Davalillo en su honor. Dicho campo fue sede del equipo Petroleros de Cabimas entre las temporadas 1991 y 1995 y de las Águilas del Zulia en 1998-99.
¡Bien se merece que la temporada 2024-2025 se realice con su recuerdo y con su nombre!
JULIO BARAZARTE / CIUDAD CCS