Emtrasur: Volar sin alas, una amenaza crucial para el imperio
El juez Federico Villena, emitió una orden para que el FBI allanará el avión de Emtrasur
16/08/2022.- Un avión venezolano surca la letanía de la cordillera andina, apenas ha tenido tiempo para adaptarse de su última escala en tierras persas, con el calor sacudiendo sus alas y el polvo del Sahara dejando su impronta en las turbinas, que se levantan erguidas soportando estoicas el peso de carga.
La Empresa de Transporte Aerocargo del Sur, S.A (Emtrasur), filial de Conviasa, se atrevió adquirir a la línea aérea iraní Mahan Air, el Boeing 747 Dreamliner, con fines comerciales para transportar rubros de interés nacional para Venezuela y romper el bloqueo económico impuesto por Estados Unidos, la Unión Europea y países satélites en la región.
Orgullosa Emtrasur emprende su vuelo con los cóndores dominando el cielo. Apenas con unos meses operando, el 6 de junio aterrizó en Argentina, luego de un viaje procedente de México, que hizo escala en Venezuela y posteriormente trasladó una carga compuesta de autopartes de la empresa alemana Volkswagen, en Argentina.
“Sin embargo, cuando se dispuso a abandonar el territorio argentino el mismo 6 de junio, ninguna empresa les proveyó de combustible por temor a las sanciones a las que podría recurrir EEUU”, refiere Sputnik.
Con apenas dar un breve paso por el aeropuerto de Córdoba, provincia argentina, donde la torre de control no le permitió aterrizar; la tripulación se vio obligada a ingresar en el espacio aéreo de Uruguay, mientras se permitía su aterrizaje oficial en la tierra de Carlos Gardel.
La aeronave entonces se dirigió a Uruguay el 8 de junio con la intención de cargar combustible para retornar a Venezuela, pero las autoridades uruguayas rechazaron la solicitud de aterrizaje en su territorio y el avión tuvo que volver al aeropuerto de Ezeiza en Buenos Aires.
De pronto el vuelo soberano se acabó; el transitar de la aeronave con siglas venezolana YV3531 de Emtrasur, en un abrir y cerrar de ojos fue detenida ilegalmente el 8 de junio en el Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini (Ezeiza) en Buenos Aires, Argentina.
El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, el 3 de agosto del 2022, describió la aeronave como "un avión gigantesco, moderno, de carga", en una entrevista concedida a VTV donde aseguró que cumplía "una función fundamental en la vida humanitaria de Venezuela" y ahora "pretenden robarlo con una orden de un tribunal imperial del estado de la Florida”.
El juez federal argentino, Federico Villena, sin tón ni són, emitió una orden para allanar el avión venezolano sin que hubiese cometido ningún delito. El Boing 747 quedó retenido al igual que sus 19 ocupantes, cinco de ellos de procedencia iraní, todos pilotos profesionales que fueron contratados por Emtrasur.
Estos pilotos iraníes tenían la responsabilidad de entrenar los pilotos venezolanos para manipular el avión de carga, según lo determina la regulación internacional, que exige personal calificado para tripular este tipo de transporte aéreo.
Debemos esclarecer que luego de Emtrasur adquirir el avión de carga Boeing 747-300, a partir de ahí pasó a ser un bien estatal del país, tal como lo establecen los diversos tratados y organismos que regulan la aviación comercial, civil y de carga a escala mundial.
Sin embargo Villena, desconociendo las leyes internacionales ordenó a los organismos de seguridad argentinos despojar de sus pasaportes a la tripulación venezolana-iraní e impedir su salida del país austral, hasta tanto permaneciera en investigaciones judiciales.
Para ello, el juez argentino aludió un supuesto nexo de uno de los tripulantes con integrantes de la Fuerza Quds, una división de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán; calificadas por EE.UU como instructores del grupo Hezbolá.
Villena argumentó, cual juez y verdugo, la causa emprendida contra la tripulación y el avión de Emtrasur, por la supuesta conexión del piloto iraní Gholamreza Ghasemi, con el atentado terrorista acontecido contra la Asociación Mutual Israelita-Argentina (AMIA) en 1994.
Por su parte el ministro de Inteligencia de Paraguay, Esteban Aquino, afirmó el 16 de junio que Ghasemi, piloto iraní, está vinculado a la Fuerza Quds, catalogada como terrorista por los EE.UU. “Él ha estado acá (Paraguay). Estuvo en nuestro territorio y eso es algo que sigue abierto y en investigación”, señaló el titular de la SNI en declaraciones a radio ABC Cardinal 730 AM. “La presencia de esa persona, de acuerdo a lo que sabemos y confirmaron agencias aliadas, es que se trata de una persona vinculada al Quds, sin ninguna duda. No es parecido, homónimo ni nada. Es preocupante”, remató en la misma entrevista, refiere Infobae.
Luego de comprobar que no existían pruebas contra los acusados, Villena decidió consultar a EE.UU, si tenía algún requerimiento contra el avión. El 2 de agosto de 2022, el imperio solicitó a Argentina la incautación de la aeronave después que un juez de Florida, del distrito de Columbia, emitiera una orden por considerar que se violaron las leyes de exportación estadounidenses, cuando Emtrasur adquirió el avión a línea iraní Mahan Air.
A raíz de este hecho, Venezuela levantó la voz firme de denuncia contra el secuestro del avión de su propiedad, por parte de Argentina quien alegó la causa AMIA para retener ilegalmente a su tripulación y la aeronave de Emtrasur. "Venezuela levanta su protesta y le pide al pueblo argentino todo su apoyo para recuperar ese avión que le pertenece a una empresa venezolana y pretende ser robado después de tenerlo secuestrado durante dos meses", fustigó Maduro, a la justicia argentina el 3 de agosto durante una cadena nacional.
El Jefe de Estado dejó bien clara la afrenta ejecutada contra todas las hijas e hijos del pueblo de Simón Bolívar, pues se trata de un bien estatal que sirve para transportar e intercambiar rubros de interés comercial con soberanía venezolana.
Intereses oscuros fluyen en la región
El cuento sigue y va in crescendo; las miradas recelosas de líneas aéreas comerciales de la región se despiertan al ver trastocados sus intereses económicos con la nueva oferta venezolana de carga de Emtrasur, que ofrece una aeronave de muy alta calidad y un servicio más económico de flete internacional.
La pandemia del Covid-19 sin duda alguna, tiró al traste el interés económico de todos los vuelos comerciales y de carga a nivel mundial, paralizando inclusive al sector por meses y años en sus vuelos.
Este fenómeno dejó a varias empresas de la región al borde de la quiebra, todas con presencia en el mercado de cargas previo a la pandemia, como Latam y Avianca; y otras de Europa pero con rutas en la región, como Lufthansa y Air France.
Y es justo aquí donde la cosa se pone interesante: un estudio realizado por la Comisión Económica Permanente para América Latina y el Caribe (CEPAL), determinó que “América Latina y el Caribe es la región más severamente impactada por la reducida capacidad de transporte de carga”, consecuencia económica de la pandemia.
El mismo estudio de la Cepal aseguró que las acciones de las aerolíneas en América Latina bajaron en conjunto un estrepitoso 69,1% en el 2020.
Por supuesto esto hizo crecer monstruosamente los precios de los fletes de carga aérea en todo el mundo. En ese contexto, la medida de Conviasa de comenzar a operar un avión de gran porte en la región tiene que haber encendido alarmas.
Emtrasur entraba a disputar el espacio de un negocio aéreo en crisis, con una ventaja comparativa vital: el precio del servicio. Es decir, que la cosa del avión venezolano va mucho más allá del cuento chino inventado por la mediática internacional, para justificar lo injustificable: el secuestro.
Así lo dejó ver el presidente Maduro cuando afirmó "Pretenden robarnos el avión también, como nos robaron el oro en Londres, o pretenden robarnos el oro en Londres, como se robaron la empresa Citgo (...) Venezuela levanta su voz de protesta y pide la solidaridad de la gente honesta del pueblo argentino", arengó el mandatario.
Mario Arraga, gerente de Finanzas de Emtrasur y uno de tripulantes retenidos en Buenos Aires, explicó en una entrevista a la TV Pública argentina que desde febrero de 2022, Emtrasur “se ha posicionado en la región” por “la capacidad de carga que ofrecemos con nuestra aeronave y los precios que manejamos”, reseña el portal argentino Digital Questión.
Arraga explicó que el acceso al combustible para el avión de Emtrasur permitía a la empresa “ofrecer precios ventajosos, en un mercado en crisis, con reducción y consiguiente creciente monopolización de actores”.
La entrada del avión venezolano en el complejo escenario de la aviación de carga en América Latina quedó demostrada. La aeronave llegó a Buenos Aires con una carga de la automotriz Volkswagen, desde México, pese a las voces dantescas de quienes han hecho hasta lo imposible por destruir nuestra creciente economía.
El despojo legalizado
El juez federal argentino decidió seguirle el juego a EEUU y dispuso la incautación de la aeronave, un carguero Jumbo 747, apoyado en un convenio de cooperación entre el país norteamericano y Argentina.
Medios locales en Buenos Aires aseguran que ahora el avión quedará secuestrado a disposición conjunta entre la justicia argentina y la estadounidense. La operación tenaza entonces se cierne sobre la aeronave, y sale a la luz la colaboración activa del Gobierno de Uruguay, la poderosa e influyente dirección de la comunidad judía en Argentina y la habitual complicidad mediática, refiere Digital Questión.
Villena decide cortarle las alas a Emtrasur y tramita la incautación como un expediente separado de la causa madre, que investiga a los 19 tripulantes de la aeronave —14 venezolanos y cinco iraníes— por presuntos vínculos con el terrorismo.
El viraje “legal” del trámite deja sin capacidad de apelación a Venezuela y a la empresa estatal Conviasa. El expediente principal debe determinar si el objetivo de algunos miembros de la tripulación era diferente al comunicado en el plan de viaje.
El avión transportaba autopartes de una multinacional y la carga fue entregada, pero una denuncia de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) puso el ojo sobre los cinco tripulantes iraníes a bordo.
Tuvieron que pasar dos meses, en los que el gobierno de Alberto Fernández se mantuvo, primero en silencio, y luego instruyó al juez la solicitud de EEUU de incautar del avión, indispensable para la decisión judicial que se conoció el 12 de agosto. Una delegación de la Asamblea Nacional de Venezuela visitó la embajada argentina en Caracas y se entrevistó con su embajador, Oscar Laborde.
El diálogo permitió identificar a Laborde como un “amigo de Venezuela”. Sin embargo, la incautación del avión ya era un hecho. Bastó un día apenas para que el flamante embajador Laborde en su cuenta de la red social Twitter, asegurara que le “reprochó duramente” al jefe de la delegación parlamentaria, Pedro Carreño, “sus agravios inadecuados e inoportunos hacia nuestro presidente Alberto Fernández”.
El oficialista diario Página12 de Argentina, señaló la tarde del 12 de agosto que “el fallo implica una aceptación del bloqueo norteamericano sobre la aeronave venezolana, en el marco de un tratado de asistencia jurídica mutua firmado entre ambos países en 1991. El pedido había sido canalizado por el Ministerio de Justicia argentino”, lo que provocó el reproche de Venezuela.
El show mediático judicial sobre supuestos y difusos vínculos de Irán y Venezuela con el “terrorismo”, se tradujo en otro episodio de ampliación del bloqueo comercial y financiero de EEUU contra Venezuela. Lo que comenzó con Barack Obama, por allá en 2015, cuando declaró a Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria; se profundizó con los desmanes de Donald Trump y su bloqueo económico unilateral, ahora pica y se extiende como una patente de corso a favor del gobierno de Joe Biden.
El pueblo arrecho reclama se derecho
El pasado 9 de agosto se celebró en Caracas una marcha en la avenida México que partió desde la plaza Morelos, en Bellas Artes y llegó a una tarima ubicada a una cuadra de la Asamblea Nacional.
A raíz de los hechos acontecidos el presidente Maduro llamó a iniciar una "gran campaña" de protesta para rescatar los recursos venezolanos que están retenidos por otros Gobiernos.
Miles de personas marcharon bajo un sol inclemente de mediodía exigiendo la devolución del avión de carga y otros bienes del Estado venezolano que países aliados de EEUU mantienen "secuestrados" en el extranjero.
Igualmente integrantes del Poder Legislativo, tren Ejecutivo y altos representantes del ámbito político, resolvieron dejar elevar su protesta por el arribismo del país austral. “¡Nos devuelven el avión y a nuestros hermanos secuestrados!”, dijo el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, durante una sesión en la que se aprobó un acuerdo en repudio a “la intención aviesa del Gobierno de los EEUU de apropiarse ilegalmente del avión secuestrado”. “Que no nos vengan con mentiras, fue un vulgar secuestro. Queremos de vuelta a nuestros compatriotas que están retenidos en Argentina sin ninguna excusa”, insistió, reseña el diario El País, de Argentina.
Además, el mandatario venezolano expresó su molestia con el gobierno de Alberto Fernández en Argentina, por la situación irregular que mantienen desde hace dos meses las autoridades de ese país contra "la tripulación de Conviasa que está secuestrada". "¡Estamos bien arrechos por lo que está pasando en Argentina,en arrechos y bien indignados por el robo del avión en Argentina, ya basta de abusos contra Venezuela, ya basta!", protestó Maduro.
El pueblo venezolano salió a las calles a dar un mensaje contundente al mundo: exigimos la devolución de nuestro oro secuestrado en Londres, el avión de Conviasa y los demás bienes nacionales que pretenden robarnos. ¡Basta de atropellos! No dejaremos de levantar nuestra voz. pic.twitter.com/EgnqyWef89
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) August 9, 2022
En la lucha contra la persecución criminal tenemos dos prioridades: recuperar el oro en Londres, el avión de Conviasa quegpretenden robarnos y a su tripulación secuestrada en Argentina. Nos causa profunda indignación este robo descarado. ¡Basta de abusos contra Venezuela!.
Diosdado Cabello fue igual de enérgico al cargar contra la doble moral de gobierno de Fernández, quien se ha visto sacudido por las masas de su país, tras la firma con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que compromete las finanzas argentinas por miles de millones de dólares en préstamos. Cabello, vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), increpó al mandatario argentino, Alberto Fernández. “Nosotros no queremos ese avión dentro de cinco años, lo queremos ya porque ese avión es de Venezuela”, sentenció.
Villena la vuelve a hacer
El pasado lunes 1 de agosto, el juez argentino devolvió los pasaportes a los 12 tripulantes -un iraní y el resto venezolanos- pero retuvo los de los otros siete: -cuatro iraníes y tres venezolanos. Quienes recibieron el pasaporte están libres de salir del país; refiere El País.
El juez argentino, entre tanto, continúa terco con el proceso judicial, espera la información que pidió a terceros países. De Uruguay quiere saber por qué impidió el aterrizaje del vuelo de Emtrasur cuando ya había autorizado la ruta.
A Venezuela le solicitó los datos sobre el embarque y desembarque de los pasajeros en las diferentes escalas del vuelo previo a su aterrizaje en Buenos Aires; Aruba y República Dominicana, a su vez les exigió detalles sobre el paso del avión por sus territorios. En el fallo de Villena contentivo de 260 páginas, difundido por Telam, explicó que desea saber si “bajo la apariencia o ‘pantalla’ de una actividad lícita, parte de la tripulación estaría (…) financiando operaciones de terrorismo (concretamente con Hezbolá)” o son parte de “un plan vinculado a esa organización terrorista”.
El juez se basa en el derecho que tienen los países para adoptar “medidas preventivas para reprimir la preparación de todo acto de terrorismo, considerando que el primer paso para ello es la financiación”, El País.
Villena escribió en su fallo que el FBI entregó un documento “respecto de la asociación del ciudadano iraní Gholamreza Ghasemi (piloto del avión de Emtrasur) a los grupos terroristas designados, las Fuerzas Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Iraní (IRGC¬QF) y Hezbolá”.
FBI inspecciona avión venezolano
El pasado jueves 12 de agosto la justicia argentina aprobó la solicitud de EE.UU. para incautar un avión Boeing 747 propiedad de Emtrasur, retenido en un aeropuerto de Buenos Aires desde hace dos meses, por presuntamente violar las leyes de control de exportaciones del país norteamericano, reseña Rusia Today .
Federico Villena dictaminó que la aeronave quedará a disposición de su juzgado y del juez federal de Washington D.C., Michael Harvey, a pesar de que una comisión de diputados de la Asamblea Nacional de Venezuela entregara a la embajada de Argentina en Caracas, un reclamo oficial donde exige la inmediata devolución del avión y liberación de sus 19 tripulantes, informa La Nación.
Agentes del Buró Federal de Investigación (FBI) ese mismo día inspeccionaron la aeronave, cumpliendo con el inventario exigido por Harvey. El juez argentino igualmente autorizó a los alguaciles realizar una inspección mecánica del avión y del hangar donde permanecerá estacionado en el aeropuerto de Ezeiza (Buenos Aires).
Venezuela agradece la solidaridad del pueblo argentino
El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Carlos Faría, resaltó la solidaridad del pueblo argentino, quien se manifestó a través de una campaña en redes sociales para exigir la liberación de la tripulación y del avión venezolano retenido en Buenos Aires desde el 6 de junio.
"La solidaridad del pueblo argentino se manifiesta en este video bajo la consigna "de vuelta los queremos". "Exigimos la libertad de la tripulación de [aerolínea venezolana] Emtrasur y la devolución de la aeronave, ambos secuestrados por el Poder Judicial argentino", escribió el funcionario venezolano en su cuenta de la red social Twitter.
La solidaridad del pueblo argentino se manifiesta en este video bajo la consigna #DeVueltaLosQueremos. Exigimos la libertad de la tripulación de Emtrasur y la devolución de la aeronave, ambos secuestrados por el Poder Judicial argentino. pic.twitter.com/SQJYLfB06t
— Carlos Faría (@Fariacrt) August 15, 2022
De igual manera, el canciller venezolano recordó este 15 de agosto que mientras millones de argentinos disfrutan de sus familias, trabajan y se divierten; la vida de 14 venezolanos tripulantes del avión, se ha detenido por completo. Además, el Ministerio de Transporte de Venezuela, afirmó durante ésta misma jornada que el país bolivariano se mantiene “en pie de lucha” y exige a la justicia argentina que liberen la tripulación de su aeronave retenida. “Basta de abusos, persecuciones, bloqueos y sanciones criminales”, expresó la Cartera, reseña HispanTv.
#DevuelvanElAvion ✈️En pie de lucha Venezuela exige al sistema de justicia de Argentina que liberen a la tripulación. Basta de abusos, persecuciones, bloqueos y sanciones criminales.#DevueltaLosQueremos #LiberenALaTripulacion pic.twitter.com/Go9lzDkQYS
— Ministerio del Poder Popular para el Transporte (@TransporteGobVe) <ahref="https://twitter.com/TransporteGobVe/status/1559178473394081797?ref_src=twsrc%5Etfw">August 15, 2022
Por su parte, Irán instó a Argentina ano dejarse someter a las presiones por parte de EEUU en el caso del avión venezolano retenido y pidió la liberación de los tripulantes iraníes.
La Cancillería iraní citó a mediados de julio al encargado de negocios temporal de la embajada argentina en Teherán, para expresarle su fuerte protesta por la retención de los cinco tripulantes iraníes.
Teherán calificó de una flagrante violación de los Derechos Humanos (DDHH) impedir la salida de sus ciudadanos iraníes de Argentina y exigió su inmediata liberación.
Embajador argentino reconoce secuestro del avión
Por último el martes 16 de agosto el embajador de Argentina en Venezuela, Oscar Laborde, admitió que el avión venezolano está secuestrado en tierras australes por orden del juez Villena.
Laborde hizo las declaraciones en una entrevista concedida a una emisora radial del país. Allí criticó la incautación y manifestó que "el avión Boeing 747-300, cargado con piezas automotrices, está secuestrado porque el juez lo ha determinado”, expresó.
El embajador agregó que el pueblo de Bolívar se siente impotente ante el vil despojo. “Hay una sensación del pueblo venezolano de injusticia”, manifestó al tiempo que aseguró que este tema aún no ha logrado dañar la relación bilateral entre Argentina y Venezuela.
“Todavía hay mucho que recorrer respecto al avión secuestrado. Hay que transitar con inteligencia el proceso, porque hay muchos intereses que buscan que esto sea una pelea”, sentenció Laborde; reseña Ciudad CCS.
JOSÉ ANTONIO RAMÍREZ / CIUDAD CCS