12/06/24.- El presidente de Francia, Emmanuel Macron, aseguró este jueves que "en los días próximos" nombrará un nuevo primer ministro y afirmó que cumplirá "plenamente" su mandato como jefe del Estado "hasta el final", en 2027, frente a los que piden su dimisión. 

Esta reacción del presidente Macron obedece a la renuncia presentada por el recién nombrado primer ministro, Michel Barnier, tras el fin de su gobierno por una moción de censura aprobada por el parlamento francés.

Se trata de la primera vez en 62 años que una moción de censura triunfa en Francia. La última fue el 4 de octubre de 1962, bajo la presidencia de Charles de Gaulle, cuando cayó el gobierno de Georges Pompidou.

La dimisión del gobierno ha dejado al país sin aprobar los presupuestos y sin ellos, por ley, no se pueden recaudar impuestos en 2025. Hay varias salidas legislativas posibles, pero hay una en concreto que es bastante discutible desde el punto de vista democrático.

En este contexto para el ya bastante debilitado gobierno de Macron, el mandatario galo insiste en formar un nuevo gobierno de urgencia y aprobar los presupuestos por decreto, sin pasar por el parlamento, con la sola firma del presidente. Esto llevaría a una nueva moción de censura. 

Según se refieren medios franceses, la otra alternativa que podría utilizar el mandatario francés sería la opción de votar una ley especial antes del 19 de diciembre para poder recaudar los impuestos y funcionar temporalmente con los presupuestos de 2024. Sin embargo, el margen de maniobra, desde el punto de vista temporal, es muy corto.

Izquierda francesa quiere gobernar  

Según el medio Prensa Latina, los líderes franceses agrupados en el bloque de izquierda Nuevo Frente Popular, exigieron este viernes al presidente Emmanuel Macron la designación de un primer ministro que salga e sus filas tras el derrocamiento este jueves de Michel Barnier.

El primer secretario del Partido Socialista, Olivier Faure, declaró a la cadena France Inter “que la izquierda debe gobernar”, e instó al mandatario a recibir a las diversas fuerzas políticas del llamado Frente Republicano, que excluye al partido de extrema derecha Agrupación Nacional ( enfermera registrada).

Asimismo, Faure dijo que su partido no busca la dimisión de Macron, al contrario de la Izquierda Insumisa, liderada por Melenchón, quien sí asumió esta postura después que en la Asamblea Nacional la izquierda y RN se aliaron, pese a sus diferencias ideológicas, para hacer caer al actual gobierno con una moción de censura.

Por otra parte, Marine Tondelier, líder de los Movimientos Ecologistas exigió al jefe de Estado nombrar a un primer ministro de izquierda, recordando que fue el Nuevo Frente Popular el ganador de las elecciones legislativas de julio. Igualmente, la jefa de la bancada de LFI en la Asamblea Nacional, Mathilde Panot, advirtió que esa fuerza perseguirá la censura de cualquier primer ministro que no sea de la izquierda.

Por su parte, el bloque integrado por insumisos, socialistas, ecologistas y comunistas resultó la lista que más diputados logró, aunque lejos de la mayoría absoluta, por lo que llamó a Macron a aceptar su propuesta. Pero el mandatario optó por dar el puesto del Palacio de Matignon al político conservador Barnier.

Macron designó a Barnier y le encargó formar gobierno, una nominación rechazada de inmediata por la izquierda, que reclama el derecho a proponer ese cargo, tras ser la lista que más diputados lograron en las legislativas (193), aunque lejos de la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional (289).

Sin embargo, existe consenso de que el presidente Macron no tardará tanto para nombrar al jefe del Palacio de Matignon, como lo hizo cuando en julio aceptó la renuncia de Gabriel Attal, tras durar 51 días en ejercicio del cargo.

Ciudad CCS