10/11/22.- Los niños tienen derecho a ir a la escuela y aprender en un entorno seguro. Estos derechos están enunciados en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño (Artículos 28 a 33), la cual dicta que la educación debe respetar la dignidad de los niños y su derecho a participar en la vida escolar. También pide que se tomen medidas para proteger a los niños contra todas las formas de violencia física, sexual o mental.

Por estas razones, el acoso escolar es uno de los principales problemas que se deben solucionar en todo centro educativo y el primer paso es la prevención.

La abogada Mayrene Martínez, conocedora de la Ley Orgánica para la Protección del Niño, Niña y Adolescente, asegura que para prevenir el acoso escolar es importante incluir a la comunidad escolar y al núcleo familiar del niño, niña y adolescente en programas y dinámicas que erradiquen este tipo de persecución y que fomenten la convivencia armoniosa en el hogar y el plantel educativo.

Igualmente declaró, en entrevista para el programa Buena Vibra, transmitido por Venezolana de Televisión (VTV), que el problema del acoso escolar se origina en las familias que tienen patrones de conducta basados en el irrespeto y la violencia, acciones que los niños reproducen en sus centros educativos.

“Otros factores que pueden incidir en la conducta de los acosadores son una situación socioeconómica desfavorable en casa, poca organización en el hogar o tensiones entre los padres”, agregó la jurista.

Por otra parte, recomendó al grupo familiar del infante o adolescente que atraviese por algún episodio relacionado al tema acudir a terapias psicológicas, agregando que se debe educar a los niños sobre la comunicación asertiva y abierta de sus emociones.

Hizo énfasis en que si algún educador, padre o representante observa alguna conducta agresiva en los infantes o adolescentes, deben canalizar acciones para tratar el problema de raíz y eliminar el acoso en las escuelas.

En relación a este punto, la abogada Martínez recomendó a las familias de los niños que son víctimas de algún tipo de intimidación o violencia en el colegio a denunciar ante el Consejo de Protección del Niño, Niña y Adolescente en su municipio si el centro educativo hace caso omiso a las alarmas que presente el representante.

La cantidad de casos de acoso escolar en las instituciones educativas del mundo es tan alarmante, que ha llegado a preocupar por igual tanto a padres como a docentes, quienes buscan maneras de afrontar este tipo de incidentes tan nocivos para el crecimiento y desarrollo de los niños.

“El acoso escolar no es una forma de divertirse, nadie lo merece, no es parte de la infancia y no forma ni fortalece el carácter del niño. Ser burlado, golpeado, excluido o amenazado no es normal y no es un comportamiento socialmente aceptado a ninguna edad. Debemos promover la empatía, es decir, enseñarles a los niños a ponerse en los zapatos de los demás. Es vital promover el respeto para garantizar la convivencia pacífica entre iguales sin prejuicios ni discriminación”, concluye el doctor Johnny Marante, pediatra y nutriólogo adscrito a Sanitas Venezuela.

Síntomas del acoso

Existe una serie de indicadores que el acosado puede presentar y alertar a los padres y profesores en caso de que esté sufriendo de persecución o violencia escolar. Entre ellos, problemas de memoria, dificultad en la concentración y atención y descenso del rendimiento escolar; depresión, ansiedad, irritabilidad, falta de apetito, dolor de cabeza, malestar generalizado, cansancio; dificultad para dormir, pesadillas o insomnio; aislamiento social, apatía e introversión; no querer ir al colegio, ni juntarse con otros niños; llanto incontrolado, respuestas emocionales extremas; temblores, palpitaciones, inquietud, nerviosismo, pesimismo; y lo peor: ideas e intentos de suicidio.

Algunos consejos para la prevención

Para los profesores

• Es importante crear un ambiente de confianza donde los alumnos expresen cómo se sienten.
• Durante las clases, explicar qué es el acoso y qué repercusiones tiene.
• Supervisar el comportamiento de los niños o jóvenes, con el fin de detectar actitudes negativas.
• Actuar rápido, si se presenta algún caso de violencia escolar.
• Permanecer en coordinación con el área de Psicología para reducir o evitar más casos en el colegio.

Para los alumnos

• No juzgar a los demás por su apariencia o condición social. Aplicar el refrán: “no hagas a otros lo que no te gustaría que hagan contigo”.
• Apoyar a aquellos compañeros que se sientan solos en clase.
• No usar la violencia como mecanismo de defensa o solución de problemas con otros compañeros.
• Si eres testigo de algún caso de acoso, avisar a las autoridades del colegio.
• Y si eres víctima de algún tipo de abuso en tu colegio, conversar con tus padres y profesores. Ellos sabrán orientarte.

Para los padres

• Fomentar valores en los hijos para evitar que tengan malas reacciones.
• No dudar en poner límites a tus pequeños, en caso de ver actitudes negativas en ellos.
• Conversar sobre el acoso en casa y todo lo que puede provocar.
• Tocar el tema en las reuniones de padres y buscar soluciones si se presenta algún caso en el colegio.
• Si alguno de sus hijos es víctima, buscar apoyo en psicólogos, profesores u otros padres. Mientras más consejos encuentras, más rápido pondrás solución a este problema.
• Recuerda que la mejor forma de solucionar el acoso en las escuelas es conversando sobre ello y educando a los menores de edad. Busquemos un mejor ambiente para ellos, donde no repriman y desarrollen sus habilidades sin complejos.

LUCILA CONTRERAS / CIUDAD CCS