OMS recomienda tratar de mantener dieta saludable en Navidad
No resulta tarea fácil dadas las características y tradiciones de la época
22/12/24.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) no baja la guardia en Navidad, por lo cual ha compartido una serie de recomendaciones para que seamos capaces de mantener una dieta saludable en la época más complicada del año para hacerlo.
“Lo que comemos y bebemos puede afectar la capacidad de nuestro cuerpo para combatir infecciones, así como la probabilidad de que desarrollemos problemas de salud en el futuro, como obesidad, enfermedades cardíacas, diabetes y diferentes tipos de cáncer”, explica el organismo internacional.
Según la OMS, los ingredientes exactos de una dieta saludable dependen de diversos factores, como la edad y la actividad que tenemos, así como los tipos de alimentos disponibles en el lugar donde vivimos.
Durante el periodo navideño, la comida se convierte en uno de los pasatiempos preferidos en la mayoría de las casas y uno de los momentos perfectos para poder pasar un rato agradable con familiares y amigos. En esta época, siempre se cree que no se consumen los suficientes nutrientes, ya que con frecuencia los productos típicos suelen ser ricos en grasas y azúcares.
En general, en el último mes del año, las personas optan por menús y recetas más elaboradas que incluyen salsas e ingredientes ricos en grasas y azúcares. Igualmente, en muchos hogares son comunes los dulces y postres, aperitivos antes de las comidas que incluyen frituras y cócteles con altos niveles de azúcar, además de otro tipo de bebidas alcohólicas, que no son recomendables y perjudican la salud.
Pero independientemente de nuestra procedencia, hay algunos consejos comunes para ayudarnos a mejorar nuestra alimentación y que deberíamos mantener más allá de las festividades navideñas.
- Dieta variada. Ningún alimento contiene todos los nutrientes necesarios por lo que es necesario incorporar a nuestra dieta diferentes tipos como trigo, maíz, arroz, legumbres, mucha fruta fresca y verduras, así como alimentos de origen animal (carne, pescado, huevos o leche) y evitar, en la medida de lo posible, que sean alimentos procesados.
- Menos sal. El consumo excesivo de sal es otro de los factores que debemos controlar ya que incide directamente sobre la presión arterial y podemos estar más expuestos a sufrir enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares. La OMS recomienda un consumo máximo de 5 gramos al día, el equivalente a una cucharadita.
- Reducir el consumo de grasa y aceite. La grasa es necesaria en nuestra dieta, pero no es lo mismo la procedente de carnes blancas o pescados que de la roja. También es importante evitar los alimentos procesados ricos en grasa si queremos reducir el riesgo de obesidad, enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular. Evitar freír los alimentos y optar por otras formas de preparado como hervirlos o cocinarlos al vapor es también recomendable.
- Cuidado con el azúcar. El consumo de azúcar puede ser la antesala de problemas graves y crónicos de salud. Lamentablemente está muy presente en muchos alimentos y bebidas y habitualmente no somos conscientes de las cantidades que ingerimos por lo que es aconsejable evitar los dulces, refrescos, bebidas energéticas y, en general, todos aquellos productos procesados que de una forma más o menos explícita contengan azúcar.
- El peligro del alcohol. Para la OMS no hay una dosis segura de consumo de alcohol y no forma parte de una dieta saludable por lo que debe evitarse en la medida de lo posible, no solo por los efectos nocivos para nuestra salud como daño hepático, cáncer, enfermedad cardíaca y enfermedad mental ya que, además, su consumo afecta nuestra conducta y puede conllevar importantes consecuencias y lesiones, sobre todo si vamos al volante.
LUCILA CONTRERAS / CIUDAD CCS