17/08/22.- Mediante dos cartas enviadas respectivamente al Gobierno colombiano y al Ejército de Liberación Nacional (ELN), el excomandante de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño alias "Timochenko", elogió el martes a ambas partes por sus esfuerzos encaminados a lograr la paz y poner fin a más de medio siglo de conflicto en el país suramericano.

Timochenko aseguró que el diálogo siempre debió ser la ruta para terminar los conflictos, por lo que se ofreció para intermediar entre ambas partes debido a su experiencia en la firma del Acuerdo de Paz entre el gobierno del entonces presidente Juan Manuel Santos y las FARC, suscrito en 2016.

“Como signatario y representante de la alta parte contratante del Acuerdo de Paz entre el Estado colombiano y las FARC-EP, pongo a disposición del Gobierno y del ELN la experiencia colectiva que guardamos los firmantes de la paz para facilitar el diálogo y el entendimiento entre las partes”, afirmó en la misiva.

Londoño, el último comandante de las FARC, destacó el encuentro entre las autoridades colombianas y el ELN en Cuba, para la reanudación de los diálogos de paz, al tiempo que agradeció a La Habana por sus contribuciones a la paz en el país neogranadino.

Con Petro al poder, soplan vientos de cambio y de paz con justicia social

El excomandante de las FARC confió en que “del encuentro solo pueden emanar cosas positivas para el conjunto de la sociedad” y saludó el arribo al poder del izquierdista Gustavo Petro con quien, definió, han empezado a soplar en Colombia “vientos de cambio y de paz con justicia social”.

El presidente colombiano quiere extinguir el conflicto armado que ha azotado al país por más de medio siglo. Para ello, dijo que retomará los diálogos de paz con el ELN, al tiempo que llamó a las bandas armadas del narcotráfico a dejar las armas a cambio de beneficios judiciales.

El ELN es la segunda guerrilla más importante de Colombia, junto al mayor grupo de disidentes de las FARC, en haberse apartado del Acuerdo de Paz. Por su parte, el llamado Clan del Golfo —principal brazo armado del narcotráfico— ha aceptado las ofertas de diálogo de Petro. Las dos últimas organizaciones han planteado incluso por separado un alto al fuego.

La violencia en Colombia se disparó durante los cuatro años del Gobierno del expresidente Iván Duque (2018-2022), como consecuencia del rechazo a la implementación del Acuerdo de Paz. Ahora Petro quiere sepultar el legado violento de Duque consolidando la paz con los grupos irregulares.

JOSÉ ANTONIO RAMÍREZ / CIUDAD CCS