19/01/23.- ¡Es fácil tener un Mustang! Ahora los chavistas quieren usar las marcas que usamos nosotros. Hace algún tiempo, cuando le preguntaron a Pedro –Alboroto– Carreño, por la corbata Luis Vuitton que tenía encima, no supo qué decir. Ahora llegó desde Táchira el gobernador Bernal y declaró que era cierto que varios miembros del PSUV estaban dando brincos con unos zapatos carísimos y eso era mal visto, sobre todo en este momento en que la mamazón es grande, y uno no puede darse esos lujos de andar por ahí en una camionetota mientras se te acerca un niño de la calle y te pregunta si te lava el vidrio. ¡Ni de vaina! Los chavistas van a tener que leerse el manual de ética que publicó el partido y no sé sabe dónde lo metieron, y seguro que Carreño no lo ha leído todavía. Habrá que revisar ese manual lo más pronto posible para que no se sigan metiendo en vainas. La canción de Shakira parece que estaba destinada a la gente de la dictadura, porque muchos de ellos han cambiado sus relojes Casio por Rolex y sus viejos cuatro ruedas por camionetotas Toyota. En fin, que la gente está arrecha porque están pelando bola y mucho más, “y míralo, por ahí va el carajito ese con tremenda pinta encima que no baja de mil dólares”. Hasta una diputada del PSUV se arrechó y dijo unas vainas ahí, que si el bloqueo y las sanciones han jodido a unos, pero a otros no, que no, que no, que así que no trabajo yo.

Y de nuestro lado, el poeta Leopoldo López soltó el yoyo y dijo un montón de vainas cuando intentaron tomar el poder aquel 30 de abril del cual tengo ya el recuerdo. Dice el hombre que él tenía todo controlado, y en su casa hizo las reuniones con todos los cuerpos policiales que lo iban a acompañar, pero Julio Borges fracasó estrepitosamente en la parte jurídica que había conversado con el presidente del Tribunal Supremo. Pero antes había dicho que Julio –Asesino de niños– Borges había manejado todo el dinero del gobierno interino porque era el canciller de Guaidó. Y cuando le preguntaron al poeta de qué vivía, se disparó esa vaina que no se la cree nadie y mucho menos nosotros que fuimos tan sinceros, dijo que ahora era investigador social, y que se la pasaba viajando entre España y Estados Unidos para publicar un libro el mes que viene, acerca de la lucha para derrotar las autocracias. ¡Qué arrechos somos! Y quien dejó prácticamente moribunda a la Plataforma Democrática fue Nicmer Evans, el hombre decidió renunciar a participar en las elecciones primarias porque ahí estaban todos los corruptos que se habían robado los reales del gobierno del interino y ni de vaina, no se presta para esa comparsa, así dijo el hombre. Y el doctor, Jesús María Casal, quien está al frente de la comisión para las primarias, está de capa caída. “Así no se puede”, declaró al intentar levantar la múcura que está en el suelo.

Y el robo de la corona que le hicieron a la venezolana en el Miss Universo fue una vaina tan vulgar, que parecía hecha por nosotros, por lo ordinario y falta de respeto y tan evidente. La gente de aquí, es decir, nosotros, que no protestamos porque nos robaron Citgo y nos tienen clavados con las sanciones y el bloqueo, salió a protestar por todas partes gritando: “Nos robaron. Nos robaron. La corona es de Dudamel”. Así gritaban algunas señoras. El robo se vio en pantalla.

El papá de Margot se levantó del mueble y llegó hasta la sala y me preguntó: “¿Qué marca de camisa es esa?”. “Hugo Boss”, le contesté y me dijo: “Muy bien. Lo importante es la marca. No importa que seas bruto, pero si usas las mejores marcas te van a reconocer en todas partes como un hombre elegante y serio y honesto. La inteligencia no se ve por fuera, pero la elegancia sí. Así que de ahora en adelante, siempre y cuando podamos, tenemos que usar las mejores marcas. Ya cambié mi Casio por un Tissot, que no es tan arriba, pero es mejor”. Y se fue al cuarto y agarró la puerta y le metió ese coñazo tan duro, que la vecina gritó:

—Cómprate una Multilock.

—Solo en La Estancia encontrarás, el buen sabor… Me canta Margot.

Roberto Malaver