23/01/23.- Hoy sería un día especial para el campo corto de todos los tiempos, Alfonso “Chico” Carrasquel y son muchos que lo recuerdan,  porque se trata de su cumpleaños número 95. Nació en Caracas, el 23 de enero de 1928 y su existencia siempre estuvo incluída de lleno en el beisbol.

Se caracterizó por ser sobresaliente como jugador, mánager, entrenador, técnico y laboró, luego de su retiro, como comentarista, para la colonia latina en el circuito estadounidense de los Medias Blancas de Chicago. Su fallecimiento se produjo el 26 de mayo de 2005.

El vocablo “Chico” es muy caraqueño y como Carrasquel nunca perdió el acento de esta ciudad, donde vio luz por primera vez, ni siquiera en Estados Unidos, donde estuvo residenciado por más de cuatro décadas y como nunca perdió su tono, se comunicaba con los demás con la palabra chico por delante y de allí le fue colocado el apodo.

Cuando se llegó al norte, se expresaba de la siguiente manera: “Chico, cuídate de ese lanzador, chico cuida un poco más la raya”. De allí, hasta que a sus compañeros de equipo se les olvidó el apellido, muy extenso por demás y comenzaron a llamarlo Chico, apodo que los aficionados y el público lo tomaron como nombre propio.

El mismo advertía a muchos compatriotas que siguieran con su tono regional y no imitaran el acento del Caribe, que se oye en República Dominicana, Puerto Rico, Cuba y en otros sitios de la zona, porque decía que se podía perder la identidad del venezolano. También aconsejaba sobre el particular, porque era una forma de perder el sentido de nacionalidad.

ANECDOTARIO

Hablar con el “Chico” Carrasquel era para pasar una tarde con el oído atento a los chistes, charlas amenas y llenas de interesantes historias. Siempre refería que cuando llegó por primera vez a Estados Unidos, donde la discriminación estaba en plena vigencia, se observaban carteles con inscripciones como la siguiente: “No se aceptan negros, perros y mexicanos” y él como buen latinoamericano lo más que podía, para hacer notar que era caraqueño con el “chico” por delante y evitar ser expulsado de los comercios y sitios públicos, donde exhibían los citados anuncios. Sin embargo, en más de una oportunidad salió en defensa de muchos de sus compañeros de equipo.

También refería, con mucha gracia, que lo señalaban como el primer latino en actuar en un Juego de Estrellas, récord que jamás será batido. Pero había otro que nunca será superado, porque fue nombrado como el primer jefe civil que tuvo el 23 de Enero, cuando esa urbanización fue declarada parroquia.

Se puede agregar que tiene otro récord, que es ser el jugador que conectó el primer jonrón, como jugador del Cervecería de Caracas, en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, en 1946, en el campeonato inicial de esa organización,  en el recordado estadio San Agustín, en Caracas.    

Hay otra. Fue cuando la gente salió en caravanas el 23 de enero de 1958, para recorrer las calles de todos los pueblos de Venezuela, con la intención de festejar la caída del general Marcos Pérez Jiménez,  él afirmó que era para celebrar su cumpleaños.

En otra ocasión, cuando regresó triunfante de Estados Unidos, expresó que lo que le sobraba era voluntad, porque en varios momentos sufrió lo que los norteños definen como “home sick”, es decir, nostalgia por su casa o su terruño, pero las palabras que más utilizaba eran “échale bolas”.

Narraba siempre que el número 17 de su uniforme se debió a que cuando llegó al beisbol profesional con Caracas, todos los números bajos estaban utilizados por peloteros con más experiencia. A alguien se le ocurrió sumar las letras de su nombre y apellido y se lo colocaron a su franela.

También se ganó el mote del Fantasma de la Calle 35, donde quedaba el estadio Comiskey Park de Chicago. Árbitros y aficionados aseguraron que parecía que la bola iba a pasar de hit hacia la zona izquierda del campo, Carrasquel salía como de la nada, como una figura fantástica, para atrapar y realizar el out.

TRAYECTORIA DEPORTIVA

Cuando apenas tenía 14 años de edad se inició en el beisbol de la categoría doble A, con un equipo conocido como Cauchos General, donde dictó cátedra, tanto en el  campocorto como a la ofensiva, durante  cuatro temporadas seguidas.

Con 18 años, en 1946, en el inició de la Liga Venezolana de Beisbol  Profesional, firmó con Cervecería, equipo con el cuál se hizo emblemático, porque los aficionados cada vez que nombraban a Carrasquel lo relacionaban con  el Caracas, o sea, que “Chico” y el equipo capitalino eran una sola pieza.

En 1949 firmó con los Dodgers de Brooklyn, pero el mánager del conjunto prohibía hablar en español en el dogout y poco podía entender las órdenes en inglés. Esa situación hizo que fuera cambiado para la organización Medias Blancas de Chicago, donde había intérpretes que ayudaron a los latinoamericanos en sus primeros tiempos.

Con el equipo de Chicago fue creciendo su prestigio como jugador y en 1951 esa aureola creció al ser seleccionado como el primer latinoamericano para el Juego de Estrellas. Igualmente ese año estableció el récord de 297 jugadas sin errores, para un campocorto en la Liga Americana. Al final de la temporada de 1955 fue firmado por los Indios de Cleveland.

“Chico” Carrasquel estuvo tres años con Cleveland y en 1958 pasó a Atléticos de Oakland y en la temporada de 1959 jugó para Orioles de Baltimore. Ese año se retiró como jugador activo y pasó a ejercer labores como técnico y comentarista.

Alfonso Carrasquel en  las Grandes Ligas actuó en 1.325 juegos, con 4.644 veces al bate, 568 carreras anotadas, 1.199 imparables, de los cuales 172 fueron dobles, 25 triples y 55 jonrones. 474 carreras impulsadas, 31 bases robadas, recibió 491 bases por bolas, fue ponchado en 467 ocasiones. Se sacrificó en 67 oportunidades, 19 de las cuales fue con elevados. Fue golpeado por los lanzadores en 38 turnos.

En la pelota venezolana, “Chico” Carrasquel comenzó en el primer torneo profesional en 1946 con el conjunto Cervecería Caracas, equipo con el cual estuvo hasta la temporada 1951-52 y cuando el conjunto cambió el nombre por Leones del Caracas en la 1952-53, siguió con la misma divisa hasta la 1959-60. Luego militó con Pampero desde la 1960-61 hasta la 1963-64. Con Indios de Oriente, que luego cambió el nombre por Indios Orientales, jugó en los torneos desde 1961-62 hasta la 1963-64. De allí pasó a Navegantes del Magallanes en la 1964-65 y en la 1966-67 con Tigres de Aragua y pasó a retiro como jugador.

Sus actuaciones  en el beisbol venezolano se resumen en 815 juegos, 2.898 veces al bate, 421 carreras anotadas, 801 incogibles, de los cuales 125 fueron dobles, 27 triples y 46 jonrones. Impulsó 347 carreras, recibió 316 bases por bolas, lo poncharon en 134 ocasiones, robó 46 bases y quedó con un promedio de 276. En una ocasión  fue utilizado como  lanzador, en relevo, en una oportunidad. Se enfrentó a cinco bateadores, en un episodio y dos tercios y los retiró sin problemas, para dejar una inmaculada efectividad de 0.00.

Al retirarse como jugador se destacó como mánager, tanto en las selecciones nacionales como en el profesional. Dirigió a Navegantes del Magallanes, en el torneo 1964-65; a Tigres de Aragua en 1966-67; Águilas del Zulia en 1970-71. Igualmente logró conquistar el título de la Serie del Caribe en 1982, organizada en Hermosillo, México, con el conjunto Leones del Caracas.

RECONOCIMIENTOS

Alfonso “Chico” Carrasquel, quien falleció en Caracas, el 26 de mayo de 2005, a causa de insuficiencia renal, fue motivo de innumerables homenajes por su trayectoria deportiva y su conducta ciudadana, las cuales sirvieron de ejemplo para las generaciones que le siguieron.

Recibió condecoraciones deportivas y las correspondientes a sus actividades como buen ciudadano, entre las que destacan Francisco de Miranda, Libertadores, Mérito al Trabajo. Fue exaltado a los salones de la fama de Venezuela y del Beisbol en 1972 y en 2003, respectivamente.

JULIO BARAZARTE / CIUDAD CCS