"Argentina, 1985": del Goya y los Globos de Oro hacia el Oscar
La película de Santiago Mitre está nominada a mejor película extranjera
09/03/23.- Ricardo Darín lo volvió a hacer: como siempre, le imprimió carácter magistral a su actuación en "Argentina, 1985", film de Santiago Mitre, que compite en la categoría de mejor película extranjera en la 95ª edición de los premios Oscar de la Academia.
La historia comienza el 4 de julio de 1984, cuando Antonio Troccolli, ministro de Interior de Argentina, habla en nombre de la Comisión Nacional sobre Desaparecidos de Personas y en la que se insinúa la falta de las víctimas. Inmediatamente los familiares de los afectados solicitan justicia.
Ante esto, el entonces presidente Raúl Alfonsín ordenó que se realizara el juicio contra los "milicos" por crímenes de lesa de humanidad.
La secuencia de la película es impecable en la cinta, pues detalla situaciones históricas con fechas exactas que le dan hilación a lo que vendría: el 25 de septiembre de 1984 el máximo tribunal argentino ordenaba que se hiciera el juicio. Ahí es cuando Julio César Strassera (Darín), tiene la gran responsabilidad como fiscal para llevarlos a un juicio civil, pese a que los acusados "exigían" ser enjuiciados por tribunales militares.
La trama lleva al espectador a la investigación que llevan a cabo Strassera y su fiscal adjunto, Luis Moreno Ocampo (interpretado por Peter Lanzani), junto a un grupo de jóvenes.
La idea de la Fiscalía era eso, que fueran unos muchachos los investigadores, pues si tomaban en cuenta a abogados defensores de derechos humanos, iban a ser calificados por los medios de comunicación y por la clase media como "comunistas".
Sea como fuera, en la cinta muestran cómo muchos querían empañar el juicio y desprestigiar a la Fiscalía, al punto de decir que hasta contaban con muchachos en vez de "veteranos".
Asimismo, en la cinta se deja claro cómo la clase media de ese país justificaba a los militares y sus atroces medidas de secuestro, encierros ilegales en centros clandestinos, torturas, desapariciones, persecuciones y muertes, pues las víctimas eran "comunistas".
Momentos emotivos
Los hechos son cronológicamente contados en la película como realmente ocurrieron.
Había poco tiempo. En cinco meses la Fiscalía tenía que presentar pruebas irrefutables contra nueve comandantes: Jorge Rafael Videla, Orlando Ramón Agosti, Roberto Eduardo Viola, Omar Domingo Rubens Graffigna, Jorge Isaac Anaya, Basilio Arturo Lami Dozo, Armando Lambruschini, Leopoldo Fortunato Galtieri y Emilio Eduardo Massera. Los cargos: homicidio, privación ilegítima de la libertad, aplicación de tormentos y robo calificado.
Las amenazas y testimonios se evidencian en la película, que llenan de indignación al espectador, sobre todo a quienes vivieron desgarradoramente o tuvieron familiares que fueron víctimas de las dictaduras del Cono Sur en los años 70 y 80.
Una de las partes emocionantes de la película es cuando el 15 de febrero de 1985, fecha tope, la Fiscalía presentó las pruebas: 16 tomos, 4 mil documentos, más de 700 casos y más de 800 testigos.
Siete meses después, el 18 de septiembre de 1985, fue la acusación, cuando Strassera dio un discurso impecable, histórico, emotivo e inolvidable (como increíble fue la interpretación de Darín) que ponía fin a 17 semanas de audiencia, 709 casos de los miles que fueron denunciados y que representaron el mayor genocidio de Argentina. Esta escena mueve todas las fibras.
La película no podía culminar mejor que con "Inconsciente colectivo", canción esperanzadora del maestro Charly García, que se convirtió en un himno para los argentinos: "Ayer soñé con los hambrientos, los locos; los que fueron los que están en prisión. Hoy desperté cantando esta canción que ya fue escrita hace tiempo atrás. Es necesario cantar de nuevo una vez más".
La película ya ganó el Globo de Oro a mejor película en lengua no inglesa y el Goya como mejor película iberoamericana. Ahora, este domingo 12 de marzo en la ceremonia de los Oscar, compite contra la cinta alemana "Sin novedad en el frente", de Edward Berger, que trata sobre los horrores que vivieron soldados jóvenes en la Primera Guerra Mundial. Ambas son favoritas, pero obviamente los latinoamericanos cruzaremos los dedos por el filme de Mitre.
¡Nunca más!
ROCÍO CAZAL / CIUDAD CCS