15/03/23.- Luego de la crisis bancaria suscitada el pasado fin de semana en Estados Unidos con el cierre de tres instituciones financieras, sus efectos se extienden hacia el continente europeo, tal como lo evidencian los problemas que desde hace meses padece el banco suizo Credit Suisse.

Esta empresa experimentó un desplome de 28% en las primeras horas del miércoles 15 de marzo y un repunte de 18%, con secuelas en otras entidades bancarias europeas.  

Sin embargo, desde octubre de 2022, obtuvieron pérdidas que oscilaban entre los 4 millones de dólares y para noviembre del año pasado, se esperaba un descalabro de 1.500 millones de francos suizos, que equivalen a 1.600 millones de dólares.  

Cabe recordar que los clientes de Credit Suisse estuvieron retirando sus ahorros e inversiones e dicha institución financiera, por lo que analistas económicos debaten sobre un riesgo sistémico provocado por este proceso.

Entre las razones por las que los clientes han declinado de los servicios del prestamista suizo, radican las conexiones con la banca estadounidense y el viejo continente.

Entretanto, corporaciones como el banco francés BNP Paribas, que es el segundo más grande Europa, así como el UBS, UniCredit, Monte dei Paschi o Société Générale, sufren una serie de correctivos cuyo promedio se aproxima al 10%. 

Expertos en materia económica afirman que la crisis de Credit Suisse constituye uno de los principales detonantes del derrumbe de las acciones de otros bancos en la región, por lo que se le compara al Silicon Valley Bank (SVB) en Nueva York, debido a sus efectos similares.

CIUDAD CCS