25/05/2023.- El 24 de mayo se cumplieron 201 años de la batalla de Pichincha. Las fuerzas populares ecuatorianas se encuentran nuevamente en medio de una disputa por el poder, frente a la oligarquía que pretende imponer su proyecto antinacional. La victoria en Pichincha fue una acción coordinada entre dos grandes liderazgos: Sucre, con el mando militar, y Bolívar, quien articuló la unidad política, lo que significó organizar y establecer una unidad de mando entre liderazgos que tenían diferentes visiones sobre el proyecto político a conformar, una vez lograda la independencia del decadente imperio español. Sin embargo, sin la decidida participación de la población quiteña y guayaquileña, así como de todas las provincias que hoy conforman la nación ecuatoriana, no hubiese sido posible el feliz desenlace.

La Campaña del Sur reunió a los pueblos hechos ejército en su diversidad y capacidad para mantener la unidad en la consecución de objetivos comunes. Hoy las fuerzas populares de las naciones andinas luchan por su segunda y definitiva independencia. La pugna por ejercer la plena soberanía sobre sus territorios y recursos hace de la unidad una necesidad inaplazable. Los gobiernos de izquierda, progresistas y de centro-derecha de Latinoamérica y el Caribe entienden que la tensión de las potencias entre la unipolaridad y la multipolaridad nos obliga a la concreción de un bloque regional capaz de emerger con voz propia en el nuevo orden mundial.

El gobierno del empresario Guillermo Lasso en Ecuador fue posible gracias al apalancamiento que recibiera la derecha por parte del tránsfuga Lenin Moreno. Recordemos que la traición de Moreno costó al pueblo ecuatoriano casi noventa mil vidas durante la pandemia, producto de la desatención, el manejo inadecuado de los fondos de salud y el tráfico de insumos médicos para enfrentar el COVID-19, factor decisivo en la desmoralización y desmovilización de las fuerzas populares.

Lasso representa a los responsables de la destrucción de la economía nacional y por ende del feriado bancario de 1999, élite que manejó al país durante treinta años. A pesar del apoyo de las corporaciones mediáticas, la administración Lasso y sus medidas neoliberales vienen enfrentando, desde el año pasado, una rápida caída en la aprobación popular. El resquebrajamiento de la élite ecuatoriana parece ser una realidad que afecta al actual gobernante. Afirma el analista Luis Cubillos que "hay contradicciones entre los productores y el sector financiero; no sabemos lo que el Gobierno de EE. UU. y el Fondo Monetario estarían dispuestos a arriesgar en Ecuador, teniendo en cuenta el avance del progresismo en Latinoamérica" (2022).

El realineamiento de las fuerzas progresistas del correísmo y el movimiento indígena acabaron con el anticorreísmo construido en las narrativas de las fuerzas neoliberales, arrasando en las pasadas elecciones regionales. Revolución Ciudadana enfrentó las medidas antipopulares en el Parlamento, logrando llevar al presidente Lasso a la decisión de la muerte cruzada, para evitar así su enjuiciamiento por manejos indebidos de los fondos públicos. El pueblo ecuatoriano movilizado y encabezado por el movimiento indígena logró destituir a Abdalá Bucaram en 1996, a tan solo siete meses de su elección como Presidente; asimismo, corrieron con la misma suerte Jorge Mahuad en 1998 y Lucio Gutiérrez en 2003.

La baja en la popularidad de la gestión de Lasso se basa fundamentalmente en los continuos escándalos por corrupción y la reducción del presupuesto en áreas prioritarias como salud, educación y seguridad. La inseguridad se ha expresado en el crecimiento de los enfrentamientos entre bandas y las frecuentes masacres en las cárceles, así como las continuas violaciones a la Constitución, la persecución judicial y policial al movimiento indígena, popular y a los dirigentes de Revolución Ciudadana.

La Corte Constitucional de Ecuador decidió no admitir las demandas de inconstitucionalidad presentadas por los asambleístas contra el decreto de muerte cruzada. Por esta razón, el Consejo Nacional Electoral (CNE) aprobó iniciar el proceso para las elecciones presidenciales y legislativas de 2023.

El expresidente Rafael Correa, víctima del lawfare, mantiene un fuerte liderazgo popular y propone la creación del Frente Patriótico y Democrático para la Salvación Nacional, como estrategia para articular una propuesta unitaria en la que participen todos los sectores antineoliberales: campesinos y campesinas, la pequeña y mediana industria, la economía informal, las mujeres, los jóvenes, los movimientos indígenas y afrodescendientes; es decir, todas las expresiones del pueblo organizado, para garantizar un nuevo triunfo de las fuerzas progresistas del continente.

Anabel Díaz Aché

Fuentes consultadas:

CNE de Ecuador aprueba inicio del proceso para elecciones presidenciales 2023. (2023, mayo 18). Telesur. Disponible en: https://www.telesurtv.net/news/ecuador-cne-proceso-elecciones-presidenciales-legislativas-20230518-0038.html

Cubillos, L. (2022, marzo 9). Ecuador: un frente para construir poder popular. Revista Digital América Latina en Movimiento Alainet. Disponible en: https://www.alainet.org/es/articulo/215082?language=es

Demandan ante Corte Constitucional "muerte cruzada" en Ecuador. (2023, mayo 18). Telesur. Disponible en: https://www.telesurtv.net/news/ecuador-parlamento-presenta-demanda-muerte-cruzada-20230518-0011.html