Trabajo Especial | Mujer venezolana en la cumbre de la ciencia mundial
Anamaría Font, científica venezolana, recibe Premio La Mujer y la Ciencia de la Unesco
14/06/23.- Reconocer la importancia de los aportes que el género femenino ha hecho, y hace, al desarrollo de la ciencia es una iniciativa promovida por diversas instituciones alrededor del mundo. Ya son numerosos los programas que registran, avalan y premian la contribución de las mujeres a la innovación científica y tecnológica.
Entre estos programas, vale destacar el denominado La Mujer y la Ciencia, promovido, desde hace 25 años, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), famoso por reconocer la excelencia de mujeres que han realizado importantes contribuciones al progreso científico a escala nacional, regional e internacional.
“Este premio internacional se concede cada año a cinco distinguidas científicas por la excelencia de su trabajo y sus destacadas carreras, una por cada una de las cinco regiones: África y los Estados Árabes; Asia y el Pacífico; Europa; América Latina y el Caribe; y América del Norte. Cada científica ha recorrido un camino único, combinando un talento excepcional, un profundo compromiso con su profesión y una valentía notable en un ámbito todavía ampliamente dominado por los hombres”. Así lo subraya la organización en su portal web.
Científica venezolana es galardonada
Este jueves 15 de junio, en la sede de la Unesco en París, se rendirá homenaje a las carreras excepcionales de las distinguidas científicas de las cinco grandes regiones del mundo por la contribución a la sociedad de sus investigaciones en ciencias físicas, matemáticas e informática.
Nuestro país celebra el logro de la doctora Anamaría Font Villarroel, acreedora del galardón 25° Premio Internacional La Mujer y la Ciencia 2023, por América Latina y el Caribe, debido a sus contribuciones a la física teórica de partículas, en especial al estudio de la Teoría de Cuerdas.
De acuerdo al portal de la Unesco, la investigación de la profesora Font “ha profundizado en las implicaciones de la teoría para la estructura de la materia y la gravedad cuántica, que también es relevante para la descripción de los agujeros negros y los primeros instantes tras el big bang".
“El área de investigación de la profesora Anamaría Font ha sido durante muchos años la Fenomenología de Cuerdas. Su tenacidad, convicciones y principios éticos inquebrantables junto a su brillante dominio del tema y el panorama general de la física, la ha llevado a la cima y es desde hace años y por mucho tiempo será, una referencia para la universidad, la comunidad de física venezolana, latinoamericana, el mundo, y un modelo para las mujeres que se aventuran a considerar el estudio en la ciencia”, refiere nota de prensa del Ministerio del Poder Popular para la Ciencia y la Tecnología (MinCyT).
Esta mujer que estudia la ciencia desde su más minúscula expresión mediante la Teoría de Cuerdas, ha puesto a Venezuela en la historia mundial de la ciencia; una ciencia que practica con el corazón, humildad, pasión y libertad, una ciencia verdaderamente abierta.
La profesora Font, oriunda de Anaco, estado Anzoátegui, obtuvo su título como licenciada en Física, cum laude, por la Universidad Simón Bolívar comenzando la década de 1980; siete años más tarde, realizó un doctorado en la Universidad de Texas, en Austin, con una tesis doctoral sobre Teoría de la Supergravedad en cuatro dimensiones que surgen de las supercuerdas. Además, fue alumna destacada del profesor y premio Nobel de Física Steven Weinberg.
"Hoy es una de las investigadoras más importantes del país y del mundo, pero lo que más la caracteriza es su calidad humana, es una persona noble, real, sincera y honesta. Es de las personas más honestas que he conocido y transmite esos valores a sus alumnos con una gran preparación en su área”, expresó Ernesto Fuenmayor, actual coordinador de extensión de la Facultad de Ciencias de la Universidad Central de Venezueala (UCV), en entrevista para el MinCyT.
Anamaría Font ha centrado gran parte de su investigación en los modelos sobre componentes primordiales de la materia y sus interacciones en el contexto de la Teoría de Cuerdas, para describir y unificar sobre las partículas y fuerzas que componen y gobiernan al microcosmos, incluyendo la gravedad. Es por ello que sus investigaciones están entre las más citadas en el mundo y su trabajo ha alcanzado reconocimientos como el premio ICTP en el campo de la Física de Altas Energías (1998), junto a Fernando Quevedo; el premio de Ciencias Lorenzo Mendoza Fleury (1991), que reconoce el trabajo de los científicos venezolanos, y en 2013, fue elegida miembro de la Academia Mundial de Ciencias (TWAS) para el avance de la ciencia en los países en desarrollo.
Con relación al galardón obtenido, la científica expresa que realmente no lo estaba persiguiendo ni buscando. Sin embargo, “causa alegría el hecho de que te reconozcan el trabajo, produce gran satisfacción aunque también es una responsabilidad.
“Es muy importante el reconocimiento; que un jurado de expertos diga que es bueno el trabajo que uno hace es reconfortante y da ánimos para seguir adelante. Y eso también es una responsabilidad. No puedo parar, hay que seguir investigando y ayudando a la formación de jóvenes (…) Uno de los objetivos de este premio es darles visibilidad a las mujeres en la ciencia, que se resalte su trabajo en este campo aún dominado por hombres”.
La mujer en la ciencia
En un artículo publicado en el portal web de la Unesco se explica que a finales de la década de 1990, las mujeres representaban el 27% de los investigadores de todo el mundo. En 2014, este porcentaje aumentó al 30%, en 2019, la tasa mundial promedio de mujeres investigadoras era de solo 29,3% y hoy en día, uno de cada tres investigadores es mujer (33%). Cabe destacar que la brecha de género se reduce conforme las mujeres avanzan en sus carreras como investigadoras. En Venezuela el 60% de las personas que hacen ciencia son mujeres.
Es notorio que el número de mujeres que siguen carreras científicas aumenta gradualmente, sin embargo, en el ámbito de la investigación este progreso es insuficiente. “Además, el techo de cristal sigue siendo una realidad: solo el 18% de los altos cargos científicos están ocupados por mujeres en Europa, y solo el 12% de los miembros de las academias nacionales de ciencias a escala mundial son mujeres. Mientras tanto, menos del 4% de los premios Nobel en ciencias naturales se han concedido a mujeres”, reseña la publicación.
Es evidente entonces que la presencia de mujeres en la ciencia, y en particular en puestos de responsabilidad, sigue siendo demasiado baja debido a la desigualdad de género y a la discriminación a la que todavía tienen que enfrentarse. De allí que la Unesco, como organismo de las Naciones Unidas con el mandato específico de la ciencia y que ha hecho de la igualdad de género una de sus prioridades mundiales, está decidida a actuar para poner fin a todas las formas de discriminación contra las mujeres y las niñas.
Por otro lado, de acuerdo con el Foro Económico Mundial, las mujeres reciben becas de investigación más reducidas que sus colegas hombres, además de que les resulta más difícil obtener capitales de riesgo para emprendimientos de ciencia y tecnología. A pesar de los avances logrados en las últimas décadas, todavía es reducido el número global de investigadoras en el campo de las ciencias.
Según el artículo Avances de las mujeres en la ciencia, publicado en Ciencia UNAM-DGDC, revista de divulgación de la ciencia de la Universidad Autónoma de México (UNAM), la incorporación de las mujeres a la ciencia no ha sido un camino fácil. “Durante mucho tiempo se les negó el acceso a la educación y anteriormente era mal visto que estudiaran una carrera profesional. Hoy en día estas barreras están desapareciendo, pero aún falta mucho para lograr un avance equitativo entre mujeres y hombres”.
Mujeres científicas en Venezuela
Según la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales (Acfiman), las mujeres en Venezuela han desempeñado un papel importante en el desarrollo de la investigación científica. Durante el siglo XX un grupo numeroso de ellas obtuvo títulos de cuarto nivel, tanto en universidades nacionales como fuera de nuestro país, y buena parte desarrollaron carreras científicas exitosas, contribuyendo a la formación de nuevas generaciones de investigadores.
Al respecto, Alicia Cáceres, investigadora y especialista en microorganismos benéficos del suelo, asegura que las venezolanas siempre han trabajado en la ciencia, sin embargo, “con la llegada de la Revolución Bolivariana, el rol de las féminas se visibilizó a tal punto que, en Venezuela, el 60 % de las personas ocupadas en áreas de investigación científica son mujeres”.
En el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, en febrero 2022, la vicepresidenta para Ciencia, Tecnología, Educación y Salud, Gabriela Jiménez-Ramírez resaltó el trabajo incansable de las venezolanas, quienes han conquistado múltiples espacios importantes en la actividad científica nacional que es estructuralmente patriarcal.
“Para nosotros, el pensar, el razonar, la lógica, el acto reflexivo tiene pasión y tiene amor, es parte de nuestra naturaleza y es parte de nuestra diversidad y de nuestra belleza. Venezuela está entre los 10 países del mundo con mayor participación de la mujer en el desempeño científico. Dos de cada tres investigadores científicos en Venezuela son mujeres, y este es un logro de la Revolución Bolivariana”, expresó.
Recientemente, en abril, durante una entrevista realizada en Venezolana de Televisión (VTV), la también ministra de Ciencia y Tecnología destacó que 60% de la fuerza científica venezolana está conformada por mujeres. “El 60% de nuestra fuerza científica nacional somos mujeres, el parque científico-tecnológico con autoridades recientemente nombradas son mujeres, lo dirige una doctora en Química, la directora ejecutiva es una investigadora también formada en las ciencias y la coordinadora de proyectos es una magíster en el área de Tecnología”, recalcó.
Asimismo, en el ámbito de Tecnología de la Información y la Comunicación “es una apropiación social de las mujeres de estas tecnologías, no solo de las redes sociales, sino también de la concepción y la práctica del software libre. Ahí son 33% de las nóminas activas de producción científica nacional”, detalló la titular de la cartera científica.
A propósito del galardón otorgado a la física venezolana, Dra. Anamaría Font, quien se alzó con el Premio Internacional La Mujer y la Ciencia, el representante permanente de nuestro país ante la Unesco, embajador Rodulfo Pérez Hernández enfatizó que Venezuela es, sin duda, un referente para la ciencia en el mundo, pese a las medidas coercitivas unilaterales impuestas por el Gobierno de Estados Unidos, desde el 2015.
“Hoy podemos contar con ejemplos extraordinarios de venezolanos, como la profesora Anamaría Font, reconocida por sus aportes a la ciencia lo que se convierte en un reconocimiento para el país, para los venezolanos y pasa por encima de cualquier intención política de tergiversar y generar matrices de opinión; y es capaz de ser reconocido por la comunidad científica internacional y los pueblos del mundo”, expresó el embajador venezolano ante la Unesco en declaraciones al MinCyT.
Pérez indicó que el reconocimiento del organismo internacional a la docente de la UCV es de trascendencia porque reconoce a la mujer venezolana presentándola ante el mundo como un ejemplo de dedicación, estudio y trabajo, inclinada a la investigación y la formación.
“Para el país es importante este reconocimiento, porque Venezuela ha sido vendida en determinados espacios y ámbitos donde no suceden cosas buenas, pero esto demuestra que está la intención de cambiar la acción del pueblo al educarse y contribuir con su conocimiento y práctica entregando eso, solidariamente, al resto del mundo”, dijo desde París, Francia.
En el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia el año 2022, la investigadora María Fernanda Correa, farmacéutica, con doctorado en Bioquímica, expresó: ¡Ser mujer y ser mujer de ciencia siempre ha sido un reto, un inmenso reto, social y familiar!, con un histórico largo de luchas, logros y reivindicaciones. ¡Hemos avanzado y bastante en 100 años!, pero aún falta. Sigamos luchando por hacer ciencia visible e impostergable, la ciencia para garantizar la vida en nuestro país. Somos un país megadiverso, ¡nos toca explorar lo que tenemos, nos toca dejar de depender de otros! Y no como una visión de egoísmo sino con una visión soberana”.
LUCILA CONTRERAS / CIUDAD CCS