30/08/23.- En Colombia, en el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) imputó por primera vez al general retirado del Ejército colombiano, Mario Montoya, así como a los tenientes coronel Julio Novoa e Iván Darío Pineda, implicados en 130 casos de ejecuciones extrajudiciales, conocido como falsos positivos.

#ATENCIÓN | JEP imputa crímenes de guerra y lesa humanidad al general (r) Mario Montoya y ocho militares más por 130 ‘falsos positivos’ en el oriente antioqueño

Les contamos más de la decisión adoptada por la Sala de Reconocimiento en este 🧵https://t.co/m2mWgFQtqt

— Jurisdicción Especial para la Paz (@JEP_Colombia) August 30, 2023

Según nota de Prensa Latina,  Montoya junto a otros ocho militares, fueron acusados por ser autores de “crímenes de guerra y de lesa humanidad”, sentenció la JEP, componente de justicia del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y no Repetición, creado por el Acuerdo de Paz entre el Gobierno y las FARC-EP en 2016.

La instancia señaló  que los militares cometieron “asesinatos y desapariciones forzadas ilegítimamente presentados como bajas en combate por agentes del Estado”, durante 2002 y 2003 en el oriente del departamento de Antioquia, Colombia.

Mario Montoya también fue acusado de “mentir sobre el número de bajas, encubrir casos de extralimitación del uso de la fuerza, y presionar a los miembros de las unidades militares bajo su mando, para obtener bajas en combate”, en sus funciones como comandante de la Cuarta Brigada del Ejército.

Además, por “emplear un lenguaje violento que exaltaba el derramamiento de sangre y ordenar que no se reportaran capturas por considerarlas resultados operacionales indeseados”, explicó la magistrada de la Jurisdicción Especial para la Paz, Catalina Díaz.

En el caso del general (r) Montoya, la JEP lo imputó a título de autor de crímenes de guerra y de lesa humanidad por mentir sobre el número de bajas y encubrir casos de extralimitación del uso de la fuerza pic.twitter.com/LGpkvzclyb

— Jurisdicción Especial para la Paz (@JEP_Colombia) August 30, 2023

El general retirado Montoya es el militar de mayor rango que ha rendido versión ante la JEP por el caso “falsos positivos”, nombre dado al caso que involucra principalmente a miembros del Ejército nacional en el asesinato de civiles no beligerantes, haciéndolos pasar como bajas en combate en el marco del conflicto armado interno.

La JEP también imputó a Julio Alberto Novoa Ruiz y a Iván Darío Pineda Recuero (ambos con el grado de teniente coronel), a cuatro subtenientes, un teniente y un soldado regular, todos antiguos integrantes del Batallón de Infantería N° 4 Jorge Eduardo Sánchez (Bajes) y retirados del Ejército nacional, por instigar o inducir a los ejecutores materiales.

Es significativo resaltar que se continúa investigando los hechos ocurridos en Antioquia entre 2004 y 2006, al igual que algunos hechos ilustrativos del 2007 y la presunta responsabilidad del general Mario Montoya en otros hechos de ejecuciones.

Para la JEP, este tipo de ejecuciones extrajudiciales, conocidos como falsos positivos, fue “una práctica que se replicó a lo largo de toda la cadena de mando militar, hasta constituir el punto de partida del patrón macrocriminal de asesinatos y desapariciones forzadas presentadas ilegítimamente como bajas en combate” y como señala el documento acusatorio: "La conducta pertenece a tipos penales no amnistiables”.

En febrero de 2021, la JEP, mediante un informe, estableció que la cifra total de víctimas era de 6 mil 402, entre 2002 y 2008, principalmente durante el Gobierno de Álvaro Uribe (2002-2010).

EMILY CAZORLA /  CIUDAD CCS