Letra veguera | Sexo sin corriente
05/10/2023.- La noticia de la destitución del jefe de Corpoelec en Barinas ayer, en horas de la tarde, anunciada en persona por el ministro Reverol, en compañía de Jorge Arreaza, ha logrado que los habitantes del estado vislumbren una luz en el túnel de la vida y mantengan a media asta la bandera de la esperanza.
Y no es por un motivo político propiamente dicho, relacionado con la oscura, o casi apagada, gestión del gobernador Garrido —que a veces "brilla" por su ausencia, como reza la voz popular—, ni por la presencia del padre Numa en las actividades que realizan en conmemoración del once aniversario del memorable acto de masas liderado por el comandante Chávez en Caracas.
Aunque no se puede negar que la estadía del apreciado padre Numa representa una especie de bendición para el pueblo chavista y, por tanto, va a ser invocada para que el Cordonazo de San Francisco refresque el clima y, amén de una lluvia benigna, propicia para el tierno y cariñoso retozo sexual de aquellas parejas que no conciben esa cuestión sin aire acondicionado y musiquita de fondo, estas se entreguen, como Dios manda, a un amor de postal en tiempos de oscuridad, sin corriente eléctrica y en la sombra prodigiosa de un palo de mango o una ceiba centenaria, con pajaritos piando y perros, gatos y gallinas embochinchados también por la lluvia y el frescor de la tarde.
"La electricidad siempre ha sido uno de los grandes problemas que han afectado a nuestro estado, trayendo consigo varias consecuencias, entre ellas, estrés, cansancio, desesperación y, aunque sea difícil de creer, también la afectación de la vida sexual", afirmó con propiedad una distinguida sexóloga. Como había de esperarse, esta sentencia recorrió los ejes centrales, llaneros y andinos de Barinas.
Hubo golpes de pechos peludos de hombres dados al machismo sin cortapisas, que reclamaban a sus amantes curiosos estados de apatía sexual, aduciendo malestares gripales; hubo aclaratorias de parte de ellas, replicando con erudición los argumentos de la sexóloga y los géneros compartieron disculpas y explicaciones. Hasta júbilo hubo en hogares que no se explicaban la consternación por la falta de apetito sexual en las mañanitas. Y así, mientras Reverol arregla los cables y se encienden las lámparas de las mesitas de noche, los barineses aguardan sin importarles un pito si María Corina Machado regresa a la tierra de Chávez o si en el Esequibo comen caraotas con azúcar o arepas fritas con huequito.
La sexóloga explicó que la falta de electricidad no perjudica de manera directa, pero sí indirectamente, ya que no tener luz por más de seis horas hace que nos encontremos agotados e irritables. En consecuencia, al momento de hacer contacto físico, nuestros cuerpos botan chispas nada agradables.
"¿Viste —le dijo un vecino a otro—, que por eso el cuarto huele como un saco de papas de Pueblo Llano mojado cuando mi mujer y yo nos procuramos?".
La sexóloga comenta que las fallas eléctricas producen bajones de la libido. "Es que sin luz no hay agua —dijo una mujer—. Entonces una pierde el olor natural y el hombre hiede, sobre todo si está gordito y sudao".
Pero la doctora dijo al final que todo tenía su vuelta: "… que, al pensar que habrá calor, hay que hacerlo en silencio, orillado", porque esa discreción garantizaba el gozo de un buen sexo.
"Sin embargo —remató—, la sexualidad es un término muy amplio y no solo se rige al acto sexual, sino que va más allá de tener sexo. Hay cosas que se pueden realizar en esos momentos donde no haya electricidad para fortalecer los lazos íntimos".
Esta afirmación inquietó a muchos, pero fugazmente, pues como por arte de magia, concluyó que desde el punto de vista sexual, darse masajes relajantes, tener sexo oral y hacerlo en la ducha es una forma de bajar el estrés en esas horas donde la oscuridad invade.
"No hay mal que por bien no venga", dijeron en coro los vecinos de Los Pozones.
Federico Ruiz Tirado