11/01/2024.- Al momento de su inauguración, en el año 1956, la avenida Fuerzas Armadas (FF. AA.), con 2,7 kilómetros, era la más larga construida en la ciudad capital, superando la avenida Bolívar (1949), de 2 km, y la avenida Urdaneta (1953), de 1,8 km.

Representó también varios desafíos para la ingeniería de la época, como lo fue cruzar a través de un elevado sobre la avenida Urdaneta para hundirse de inmediato por debajo de la avenida Universidad. Seguidamente, debía hacer otro cruce subterráneo por las avenidas Bolívar y Lecuna y, por último, prolongarse sobre el río Guaire hasta la Roca Tarpeya, a través del puente Sucre. ¡Algo en verdad audaz!

Otra curiosidad digna de mencionar fue el proceso de adquisición, demolición, expropiación y modificación de fachadas de al menos 390 inmuebles a largo de la avenida Norte Sur 7, donde se proyectaría la avenida FF. AA.

El recorte de la fachada de la iglesia Corazón de Jesús

Uno de los casos más emblemáticos de la construcción de esta avenida hacia el sector sur fue toparse con la iglesia Corazón de Jesús, templo edificado por el ingeniero Luis Muñoz Tébar, en el año 1923. La iglesia quedó comprometida en el trazado de los planos de la vía, por lo que tuvieron que ser demolidos ocho metros de longitud, en sus tres naves, para ajustarse al proyecto. La nueva fachada fue diseñada, con el mismo estilo neogótico del templo, por el arquitecto de origen ruso Jan Gorecki, la cual se terminó y consagró en 1963.

La tragedia

Era el martes 13 de noviembre de 1956, tan solo a trece días de su inauguración, cuando el último tramo de la avenida FF. AA., comprendido entre el puente Sucre y la Roca Tarpeya, colapsó. Esta tragedia cobró la vida de catorce obreros y resultaron heridos más de cincuenta trabajadores.

Los ingenieros reportaron la caída del encofrado que albergaba 400 metros cúbicos de concreto, distribuidos en una estructura de 700 metros de largo por 12 metros de ancho.

La acción inmediata del gobierno y de la empresa contratista hizo que en apenas 36 horas se removieran los escombros, se rehicieran los encofrados, se armara la estructura y se vaciara el concreto; inaugurándose la avenida (con el nuevo puente Sucre incluido) el 5 de diciembre, únicamente tres días después de lo programado en un inicio.

Desde esa época "se dice" que, el día antes de su inauguración, el presidente Marcos Pérez Jiménez convocó a las 3:00 a.m. a todos los ingenieros para darles un agasajo y felicitarlos. Al terminar el brindis, les indicó que se colocaran bajo los puentes recién terminados y dio la orden de que pasaran seis tanques de guerra a la vez, para de esta manera comprobar que estaban bien construidos. Pasaron sin problemas y, según se comenta, los ingenieros ¡respiraron profundo!

Para ver el video de la tragedia, haz clic en:

https://youtu.be/Ga-dcvqANOo?si=Rl0grDz4LUthEqws

Gabriel Torrealba Sanoja
parroquiadentro@gmail.com