11/04/24.- La periodista y viceministra de Comunicacional Internacional del Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Exteriores, Mercedes Chacín, compartió sus impresiones acerca del 11 de abril de 2002, durante el videoforo La verdad: víctima y estrategia. Homenaje a Jorge Recio, Julian Assange, Pablo González y los periodistas asesinados en Gaza, reakizado desde la sede del mencionado ministerio, cerca de la esquina de Carmelitas, en Caracas.

La también directora del diario digital Ciudad CCS explicó que hace 22 años se experimentó en el país un golpe de Estado coordinado no solamente en las filas de las fuerzas castrenses y los empresarios, sino con los medios de comunicación, quienes silenciaron lo que ocurría en el país.

"El 11 de abril de 2002 fue el corolario de una estrategia que involucraba a los grandes medios de comunicación del país impresos y audiovisuales que por esa época copaban la escena. La verdad nunca fue difundida. Y la verdad, utilizada y devenida en mentira, fue la primera víctima. Pero no fue la única", destacó.

Subrayó que ese golpe en contra del entonces presidente Hugo Chávez Frías no era el típico que caracterizaron a varios países suramericanos a mediados del siglo XX.

"Ese día, desde muy temprano, el periodismo, la información oportuna y veraz se derramó con el paso de las horas por los intersticios de los edificios de la zona, porque muy cerca de aquí, ocultar la verdad era el objetivo, la mira, el enfoque, el encuadre que buscaban los medios de comunicación que operaban (sí, operaban como en un Teatro de Operaciones) para dispararle, para asesinarla", acotó.

A propósito del tema, trajo a colación unos párrafos extraídos del libro El que se robó el periodismo que lo devuelva, del fallecido periodista venezolano y exdiputado Earle Herrera, quien afirmaba que la objetividad en la Comunicación Social se vio fracturada por primera vez, durante la Primera y Segunda Guerra Mundial, y a pesar de que evitó durante un tiempo, en envolverse dentro de la parcialización, en el entorno coyuntural por el que atravesaba Venezuela, los medios de comunicación, asumieron un papel político.

"Un ejemplo más de los poderes fácticos que gobiernan el mundo.  Y en ese ámbito se percataron de que ya no era suficiente la ganancia por la venta de publicidad ¿para qué sirve vender noticias veraces si se puede ser dueño del petróleo, del oro y el agua siendo cómplices de quienes siempre habían sido dueños del país?, ¿para qué necesitaban la verdad si el objetivo es mentir para apoderarse de todo lo que signifique fortalecer el capitalismo robando las riquezas allí, donde el imperialismo decida que tiene derecho?", recalcó.

Pueblo y periodistas en la mira 

Chacín habló sobre la conexión entre periodistas como el fotógrafo venezolano fallecido recientemente, Jorge Recio, el australiano Julian Assange y el español Pablo González, quienes en una realidad con características similares, casi perecen en cumplimiento de su oficio por dar a conocer la verdad, en oportunidades complejas y espacios riesgosos.

La periodista recalcó que ellos "tienen varias cosas en común. La primera, que son comunicadores, ese fue el oficio que eligieron para sus vidas. La segunda es que son, fueron, seres humanos buenos y sensibles. La terceras, es que andan, anduvieron, batallando para difundir la verdad. Por ellos estamos hoy aquí, para repetir mil veces la verdad y que no se imponga la mentira", apuntó.

Añadió que el 11 de abril representó para la población una etapa de redescubrimiento y entender que la verdad puede obtenerse, según la disposición y empeño que se manifieste, sin esperar las noticias publicadas en la prensa nacional o radio y televisión, aunque la hegemonía comunicacional todavía tenga ventaja.

"Que ya hayan pasado 22 años años de aquel 11 de abril nos coloca en ventaja porque al descubrirse la mentira, cuando el pueblo venezolano impuso la verdad a punta de ´radio bemba´ y regresar al poder el Presidente Chávez, varias generaciones de venezolanos y venezolanas caímos en cuenta de que aquella frase 'eso es verdad porque salió en la prensa' es una gran mentira", subrayó.

Recordó una frase del fotógrafo Jorge Recio, respecto a los eventos de abril de 2002, donde fue impactado con un arma de fuego en la columna, por funcionarios de la extinta Policía Metropolitana, los temidos cascos blancos.

"Sobre su presencia en los alrededores del Palacio de Miraflores hace 22 años el fotógrafo Jorge Recio dijo: 'No me arrepiento de haber ido a tomar fotografías ese día… lo volvería a hacer, seguro que lo volvería a hacer... Es que defender la verdad es de las y los valientes y ocultarla es asunto de los cobardes', por eso nos encontramos alertas, activos, activas, para no comernos los cuentos de los algoritmos que supuestamente sustituyeron a los seres humanos que dictaban, que dictan,  las políticas editoriales que decidían y que pretenden decidir qué es verdad y qué no", sostuvo.

EMMANUEL CHAPARRO RODRÍGUEZ / FOTOS: VLADIMIR MÉNDEZ / CIUDAD CCS