Tres en 1 | Memorias de un escuálido en decadencia

Usted tiene un ejército de mediocridades seguido por la multitud de tontos. Como los mediocres y los tontos siempre son la inmensa mayoría, es imposible que se elija un gobierno inteligente.

Oro

¡Oro parece y es! El réeeegimen y el dictador están arrechos con la Reina de Inglaterra y el gobierno inglés, porque claro, decidieron darle el oro a nuestro interino que las estaba perdiendo todas, pero gracias a la Reina, empezó a ganar una. Y todos salimos contentísimos, porque como dijo el interino en un Twitter, ese oro le pertenece al pueblo venezolano y el pueblo somos nosotros, la gente decente y pensante de este país. También el poeta Leopoldo López sacó su twitter felicitando al “equipo legal”, ¡qué arrecho es el poeta López!, todo el mundo sabe que todo lo nuestro es ilegal, pero él habla de “equipo legal”, y felicita a Enrique Sánchez Falcón, que debe ser uno de los conmilitones del poeta y de su padre Leopoldo López Gil, porque aquí no lo conoce ninguno de nosotros. Y además, añade que es “otra victoria para la protección de los valores”, qué bolas tiene bolaños. Los valores nuestros, los personales, esa vaina que llaman decencia y honestidad y respeto, esa vaina las mandamos al carajo hace mucho tiempo, y si se refiere al valor del oro, que nos diga qué fue lo que hicieron con Monómeros, que todavía Calderón –Petróleo– Berti anda reclamando por ahí que el culpable de todo eso es el poeta Leopoldo López. Uno es de la oposición, está bien, pero coño, no nos trates como que fuéramos unos carajitos pendejos y comedores de chucherías. Las vainas son como son. Ahí no se protegió un carajo. Y además, después el poeta López amenazó con demandar a Calderón –Petróleo– Berti y por ahí anda Calderón muerto de la risa con esa demanda más que un dinamo.

Quien  también sacó un comunicado fue la gente de Primero Justicia, encabezados, claro por –Matemático– Borges. Y allí también felicitan, pero dicen que mosca, hay que administrar bien esa vaina, porque ya en Monómeros, ellos lo saben porque denunciaron ese robo, y dijeron que nosotros somos políticos y no sabemos administrar, y hay que buscar administradores para que le echen bola a todos esos robos que hemos hecho. Más o menos así dice el comunicado de Julio –Matemático– Borges. Quién también anda preguntando cómo queda él con ese oro en Inglaterra, es Manuel –Monómeros– Rosales. A pesar de que ya en Colombia parece que Petro declaró que le iba a entregar no solo a Monómeros al dictador, sino que también le iba a entregar los ladrones, encabezados por Manuel –Monómeros– Rosales, quien según dice Calderón Berti, estaba allí mandando a poner a su gente en los puestos directivos. Así que los rabos de paja que tenemos de Maracaibo salieron y a La Guaira volverán, pero a Maracaibo cuándo.

Cuando nos enteramos de que Guaidó se iba a quedar con el oro y el moro que está en Inglaterra, un compañero, de esos mal hablados, peor que el diputado de la dictadura, Pedro –Insulto- Carreño, dijo: “Si la mierda fuera oro, Guaidó no tendría culo”, una vaina que seguro se la copió de algún lado, porque ese compañero es medio izquierdoso, y esa gente se acuerda de vainas que todo el mundo olvidó. Pero hubo otro que dijo que no solo Enrique Sánchez Falcón era el hombre que estaba al frente del equipo legal, como lo llama el poeta López, sino que también están allí los que van a administrar la riqueza amarrilla: Manuel Rodríguez Arnesto, Nelson Lugo Cordero, Carlos Suárez Villarroel, gente que no la conoce nadie, pero es bueno no olvidarlos, porque se están llenando a costillas nuestras que somos los más pendejos que seguimos apoyando, con el “perdón de Dios y de la Virgen del Valle”, este comparsa de ladrones.

El papá de Margot vio por televisión la noticia de que el oro venezolano ahora estaba en manos de Guaidó y Leopoldo López y se puso de pie y gritó a  todo pulmón: “Nos jodímos otra vez”. Y se fue de una vez al cuarto y agarró la puerta y le metió ese coñazo tan duro, que la vecina gritó: “Terremoto, terremoto, a correr todo el mundo”.

–Cantemos todos a coro, cantemos todo al oro –me canta Margot.


Noticias Relacionadas