En el Día de No Fumar, la pelea es por los jóvenes

Han transcurrido décadas de concientización sobre el uso del tabaco.

El foco se ha puesto en desenmascarar las estrategias de la poderosa e influyente industria para pescar nuevos adictos entre niños, niñas, adolescentes y jóvenes

 

29/05/24.- El Día Mundial de No Fumar tiene este año como tema central la lucha por evitar que la poderosa industria del tabaco dirija sus campañas publicitarias a la vulnerable mente de niños, niñas, adolescentes y jóvenes.

Varias décadas de campañas de concientización y, sobre todo, la prohibición generalizada del fumar en espacios públicos han mermado el consumo de tabaco en muchos países (incluyendo Venezuela), pero en los últimos tiempos, los cerebros del mercadeo de este sector han encontrado fórmulas para conseguir nuevos clientes adictos entre los de menos edad.

Una de ellas, paradójicamente, ha sido presentada como una alternativa “buena” al consumo tradicional de cigarrillos: el vapeo.

Los estudios internacionales han comprobado que niñas, niños y adolescentes que usan cigarrillos electrónicos tienen al menos el doble de posibilidades de fumar cigarrillos convencionales más adelante en sus vidas.

La moda de utilizar cigarrillos electrónicos se ha consolidado como algo que proyecta la imagen de personas mundanas y ecológicas. Pero la realidad demuestra que el váper es el mejor recurso para enganchar a los más jóvenes al vicio de fumar. 

Lo hace por su pequeño pero consistente contenido de nicotina y porque el gesto social, al fin y al cabo, es casi el mismo. Ademas, vale destacar que las celebridades y los influencers de redes sociales están entre los grandes promotores de este hábito negativo.

Utilizar cigarrillos electrónicos se ha tranformado en una suerte de símbolo de estatus.

 

En el caso de Venezuela, la comercialización de cigarrillos electrónicos ha sido prohibida, según norma del Ministerio del Poder Popular para la Salud, publicada en Gaceta Oficial N° 42.682, con fecha 01 de agosto de 2023.

Por ende, esa resolución prohíbe la fabricación, almacenamiento, distribución, circulación, comercialización, importación y exportación, al igual, se proscribe el consumo, publicidad, promoción, y patrocinio de los Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (SEAN), Sistemas Electrónicos Similares Sin Nicotina (SSSN), consumibles, depósitos o cartuchos, envases de consumibles de recarga y demás accesorios, Productos de Tabaco Calentado Convencionales (PTC Convencionales y Herbales) y productos análogos.

La decisión se basó en estudios y ensayos clínicos de médicos y científicos realizados en el país, que han llegado a la conclusión que tanto los SEAN como los SSSN, contienen sustancias tóxicas que causan adicción y son nocivas para la salud, aumentan el riesgo de enfermedades cardiacas y trastornos pulmonares, entre otras patologías.

Una segunda amenaza del tabaco respecto a la infancia y la juventud en Venezuela viene dada por el incremento en este segmento de la sociedad del consumo de chimó, cuyo contenido de nicotina (además de muchas otras sustancias nocivas) es igual o considerablemente mayor que el de los cigarrillos convencionales, sobre todo en las marcas de producción industrial. 

Los investigadores utilizan el acrónimo TBNI para referirse a las formas de tabaco no  inhalado o sin emanaciones producto de la combustión, que por esta misma razón pasan inadvertidas y no violan las normas de los lugares públicos libres de humo.

Una historia reciente

El 31 de mayo como Día Mundial de No Fumar comenzó en 1988, aunque previamente se intentó instaurarlo el 7 de abril. En esa primera fecha, la Organización Mundial de la Salud (OMS) impulsó  una campaña instando a los fumadores a abstenerse de hacerlo al menos por esas 24 horas.

A partir del año 1988, la efeméride es una ocasión propicia para recordar al público los peligros del consumo de tabaco, hacerles ver las prácticas comerciales manipuladoras de las empresas tabacaleras, concientizar sobre la lucha contra las enfermedades derivadas del tabaquismo y acerca de la urgencia de proteger a las futuras generaciones.

Cada año se escoge una temática específica para desarrollar. Por ejemplo, en años recientes se eligió informar sobre las enfermedades cardiovasculares que genera o acelera el tabaquismo. En otra ocasión se informó sobre las normativas que obligan a presentar las cajetillas de cigarrillos sin marcas y colores llamativos u otros recursos publicitarios de impulso de la venta (el empaquetado neutro, le dicen). Este año, el foco se ha puesto en desenmascarar las estrategias de la poderosa e influyente industria para pescar nuevos adictos entre niños, niñas, adolescentes y jóvenes. 

“La juventud de todo el mundo está pidiendo a los gobiernos que adopten políticas que les protejan de las prácticas manipuladoras de las industrias tabacalera y otras industrias afines, incluida la comercialización incesante de sus productos peligrosos a través de las redes sociales y las plataformas de streaming”, afirma en su página web la OMS.

La Sociedad Anticancerosa de Venezuela (SAV) coincide plenamente en que es impostergable prevenir la expansión del vicio de fumar entre los más jóvenes. El gerente general de la SAV, Juan Saavedra, valora mucho en este empeño el ejemplo y el apoyo que proporcionen madres, padres y docentes, así como la vigilancia que ejerzan las autoridades para que se cumplan las normas de restricción de consumo.

“Venezuela logró reducir el consumo de tabaco desde un 49 % estimado en 1984, hasta un 10,8 % en 2018, pero las nuevas alternativas de consumo amenazan con captar nuevos fumadores con el consecuente deterioro de su salud”, explicó Saavedra, según una nota de prensa de la SAV.

Las nuevas formas de consumo resultan cada vez más atractivas para los jóvenes y la industria tabacalera las impulsa a través de grandes inversiones en mercadeo y publicidad destinadas a captar nuevos consumidores. Allí, cuerpo a cuerpo, es donde se está librando la gran batalla.

Datos para pensar

  • Mil 300 millones de personas son consumidoras de tabaco en el mundo. Esto equivale a 43 veces la población de Venezuela.
  • 8 millones de seres humanos fallecen cada año por causas atribuibles al tabaco. Para tener una idea, sería 154 veces el aforo completo del estadio de fútbol Monumental de Maturín, el más grande del país.
  • Las empresas tabacaleras gastan al año más de 8 mil millones de dólares en marketing y publicidad. Con esto podrían comprarse 19 aviones Boeing 747 nuevos. Ese nivel de inversión da una idea de cuáles son sus ganancias netas.
  • Se ha estimado que la esperanza de vida de los fumadores es al menos 10 años menor que la de los no fumadores.
  • Consumir  un cilindro de vaper de 4 miligramos, equivale a media caja de cigarrillos convencionales. En el caso de un cilindro de 8 mg, es igual a una caja; y el de 16 mg es como consumir dos cajetillas.
  • Las personas que chupan o mastican tabaco reciben aproximadamente la misma cantidad de nicotina que quienes fuman regularmente. Además están expuestos a más de 25 químicos cancerígenos, como las nitrosaminas específicas del tabaco.
  • Los productos de tabaco sin humo, entre ellos el chimó, tienen menos incidencia que el cigarrillo en las enfermedades pulmonares, pero son incluidos entre las causas de cáncer en boca, lengua, mejilla, encía, esófago y páncreas.

CLODOVALDO HERNÁNDEZ /CIUDAD CCS


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