Al derecho y al revés | Mélenchon, ¿amigo de Venezuela?
10/07/2024.- El sistema electoral francés es tan complicado como el beisbol, que, para nosotros, que lo jugamos como deporte nacional, es, sin embargo, sencillo.
Ganó la izquierda, afirman los diarios a favor de la guerra con Rusia en Ucrania, que ven al techo cuando deberían anunciar la cifra de muertes de civiles inocentes en Gaza —la mayoría de ellos, niños—, que el ejército de Netanyahu cobra a diario en territorio palestino.
Esos diarios detestan a la izquierda, pero pertenecen a intereses que no quieren que nada cambie en Francia. Viendo las cifras, es obvio que mucho hay que cambiar en el país galo, pero, antes, comparto los resultados de la última votación, donde el Nuevo Frente francés de Mélenchon sacó 7 millones de votos y 182 diputados.
El repudiado presidente Macron, por su parte, con unos 3 millones de votos, sacó 168 representantes ante la Asamblea Nacional.
Y la perdedora Marine Le Pen, a quien llaman ultraderechista cuando ni siquiera es de derecha, toda vez que apoyaría el aborto y la intervención estatal en la economía, sacó 143 diputados… con 10 millones de votos populares…
Si los lectores han seguido con detenimiento estas cifras, dirán: "Ah, ¿cómo es posible?", pero es así porque las reglas del juego en Francia son que el ganador de un circuito se lleva todo así sea por un voto, y hay alianzas, a veces contra natura.
Pero Le Pen mencionaba cambios, y hay cifras para entender esa vieja petición de la dama.
Francia bate récords europeos en varias materias, a saber:
- 100 ataques diarios a cuchillo.
- 1000 homicidios al día.
- 90 mil agresiones sexuales al año.
- 28 mil violaciones denunciadas, llamando la atención que en París el 77% las cometen extranjeros.
- 306 mil agresiones físicas al año.
- 584 mil hurtos denunciados al año.
- 225 mil robos de vehículos al año.
- 190 mil 300 asaltos a domicilio.
Frente a estos datos del Ministerio del Interior francés correspondientes al 2022, y que vienen escalando, el presidente Macron no reacciona, porque siendo globalista pro-OTAN, apoya el estatus quo que es la guerra.
Sin embargo, para los que brincan en una pata porque en Francia ganó Mélenchon —solo porque es de izquierda—, es bueno recordarles que este "nuevo amigo de Venezuela" nunca protestó porque el Estado francés desconoció al presidente Nicolás Maduro, y menos por los recursos —pocos en relación con lo robado por los británicos— que nos tienen ilegalmente retenidos en bancos franceses.
Frente a esos hechos, la única que presentó soluciones distintas fue Marine Le Pen, quien, más que de ultraderecha, luce como una nacionalista a la que le duele la pérdida de identidad de su país y el apoyo a la guerra en Ucrania por parte de Macron y su nuevo socio Mélenchon, quien apoya las prácticas islámicas en contra de la civilización de los derechos humanos… como lo es la ablación del clítoris…
La presunta ultraderechista Marine Le Pen apoya el aborto, que según los integristas católicos es una práctica diabólica, pero el izquierdista Mélenchon en Francia apoya que las mujeres de cultura islámica lleven a la fuerza velo y trajes largos para que no tienten a nadie…
Hasta aquí llego porque no soy francés, pero sigo la política del país de origen de mi abuela paterna. Amanecerá y veremos si el nuevo "amigo de Venezuela" —como pretenden hacer creer quienes quieren parangonar a Marine Le Pen con Mari Cori, para dar a entender que es como la derrotada francesa, aunque sacó muchos más votos que el ganador— y el segundo —quienes al estilo de los filibusteros pactaron en cada circunscripción— nos devuelven las divisas y dejan de reconocer al mequetrefe de Guaidó o a la pelele que lo sucede.
Domingo Alberto Rangel