Hablemos de eso | Haití y el racismo estructural

Castigada por el atrevimiento del pueblo esclavizado al declararse independiente

23/10/22.- En Europa, la gente espera el invierno con el temor de que no habrá o no podrán pagar el combustible para la calefacción. Aunque ya han iniciado las protestas por el efecto económico sobre europeos y europeas de las sanciones que sus gobiernos impusieron a Rusia, esos mismos gobiernos les habían recomendado sacrificios de distintos tipos y hasta instrucciones para bañarse. Los sacrificios serían necesarios para frenar la “agresión rusa” contra Ucrania, no tolerarían que el fuerte se imponga al débil y por ahí se van.

Justo hay un video del canciller ruso Serguei Lavrov que parece haber sido muy visto en YouTube, donde hace un paralelismo con la situación en Palestina ocupada por Israel, que bien puede extenderse a la presencia de tropas francesas en Mali o las de los Estados Unidos en Afganistán (donde permanecieron durante 20 años antes de la “retirada”), en Irak o en Siria. Si se trata de africanos, árabes o latinoamericanos, la incursión de tropas de las “potencias” aliadas en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) les parece legítima. El racismo estructural lo justifica, se trataría de “pueblos menores”.

Y en la lista de “pueblos menores”, casi en el último lugar está Haití. Castigada por el atrevimiento del pueblo esclavizado al declararse independiente, durante el siglo XIX el ejército imperialista francés les impuso por las armas una deuda impagable como indemnización a los “propietarios de esclavos” que habían perdido sus “bienes”. Desde inicio del siglo XX, los Estados Unidos asumieron el castigo a la nación que está en el centro del mar Caribe. La invasión comenzó en 1910 cuando el Citybank se apropió de las finanzas de Haití, en 1914 llegan los marines y se roban las reservas de oro, en 1915 ocupan completamente el país. Las tropas estadounidenses se retirarían en 1935. Pero la injerencia seguiría, con la activa participación de sus socios internos y externos.

En 2004 vuelven a invadir y permanecen las tropas interventoras de Estados Unidos, Alemania, Brasil, Canadá España, Francia y la Unión Europea (UE). Esta vez bajo la cobertura de la Organización de Naciones Unidas y la denominación de Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah). La ocupación se prolongó hasta 2017. Sobre la intervención de la Minustah pesa la acusación de más de 2000 violaciones de mujeres y niñas y la de propagar una epidemia de cólera que dejó más de 10 mil personas muertas.

Pero, además, después de la salida de las tropas, Haití ha seguido intervenida. El llamado Core Group es el órgano constituido para estos efectos. El Core Group está formado por los embajadores de EEUU, Francia, España, Brasil, Alemania, Canadá, la UE, así como por los representantes de la ONU y de la OEA.

Veamos lo que dice la Conferencia de Pastores de Haití (Copah) en carta dirigida al “grupo” en mayo de este año: “No es ningún secreto que son ustedes [el Core Group] quienes, a través de sus intermediarios, ejercen el poder real en Haití. Ustedes hacen y deshacen gobiernos a su antojo… os gusta especialmente los que vienen del crimen organizado, porque son más vulnerables y más manipulables, para realizar vuestro trabajo sucio… Esto explica su continuo apoyo incondicional a los regímenes corruptos, totalitarios e incompetentes de Haití. Este apoyo ciego revela el grado de odio, racismo y cinismo que caracteriza su política neocolonial en Haití” (elnuevodiario.com.do).

Voceros del ejército de Estados Unidos admitieron que algunos de los mercenarios colombianos que asesinaron al expresidente Jouvenel Moïse fueron entrenados en su país. Allí residía la agencia que los contrató, dirigida por un “opositor venezolano” (heraldodemexixo.com.mx). El Core Group brindó su apoyo a quien actualmente ejerce la presidencia de Haití (dw.com), el mismo que hoy solicita una nueva intervención militar extranjera.

Lucen inquietos y apresurados para lograr el aval del Consejo de Seguridad de la ONU. Ya Estados Unidos dijo estar dispuesto.

Negro y pobre está destinado a ser subordinado y si se alza se convierte en salvaje, es lema del racismo estructural.

Humberto González Silva


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