Tinte polisémico | ¿Qué es el apalancamiento financiero?

En el mundo empresarial, "apalancarse" se traduce en endeudarse

28/10/22.- En los ámbitos de los negocios y las finanzas resulta de uso generalizado la expresión: apalancamiento financiero. Y podemos inferir de la noción que tenemos del campo de la física, el uso del concepto de palanca para lograr un efecto multiplicador de la fuerza o potencia que se aplica para mover un cuerpo o realizar un trabajo con menor esfuerzo físico.

Al circunscribir el término al mundo empresarial, "apalancarse" se traduce en endeudarse, en otras palabras, recurrir a préstamos, con la finalidad de contar con mayor capacidad financiera para incrementar el nivel de las operaciones, traducido ya sea  en volúmenes de producción, ventas o cantidad de servicio prestados, con el objeto preciso de incrementar los beneficios.

Para medir el grado de apalancamiento financiero de una organización, simplemente se calcula la relación que existe entre las cifras de sus activos totales, dividida por el monto del patrimonio. ¿Cómo interpreto este resultado? Si el resultado es igual a 1, significa que a cada unidad de activo le corresponde una unidad de patrimonio, es decir, no se tiene deuda, se han financiado todos los activos con recursos propios. Si el resultado es mayor que la unidad, por ejemplo 1,2, quiere decir que un 20 % de los activos se encuentra financiado por un tercero, hay un endeudamiento o apalancamiento.

 ¿Cuándo es adecuado apalancarse y qué implicaciones trae consigo contraer deuda? 
Se recurre al apalancamiento con el propósito de incrementar el volumen de las operaciones y no se cuenta con el capital propio suficiente a tales efectos. Se necesitan mayores inventarios o materias primas, equipos o capital de trabajo para las actividades ordinarias. 

Sin embargo, el endeudamiento exige generar el margen de utilidad suficiente para poder honrar el pago del principal o capital solicitado, así como el servicio por concepto de intereses y comisiones bancarias que genera cualquier crédito. Por otro lado, debe considerarse, que pedir prestado significa asumir un mayor riesgo, que a su vez se asocia con el compromiso de evitar caer en situación de retraso o incumplimiento del pago del financiamiento contratado.

Cualquier organización con fines empresariales recurrirá al financiamiento con terceros, como forma de incrementar su capacidad de generación de utilidades, pero deberá considerar otro concepto: el apalancamiento operativo, que está asociado a su estructura de costos, lo cual atañe a la eficacia y eficiencia para lograr alcanzar su punto de equilibrio. Demostrada su productividad a un determinado nivel de operaciones, es que podrá evaluar el escenario de apalancarse y ubicarse en otra dimensión para el incremento de la rentabilidad.

Uno de los aspectos que demanda la mayor atención por parte del administrador financiero, cuando se decide apalancar a través del financiamiento bancario, se refiere a las condiciones de plazos y términos de pago, con especial énfasis en las tasas de interés y sus modalidades que se pactan y formalizan en los documentos legales.

Por solo destacar e ilustrar con un caso general, las tasas que se indican en los instrumentos de préstamos.son conocidas en el ambiente bancario como tasas nominales. Sin embargo, cuando se aplican para su cálculo y cobro de manera anticipada, aunado al cobro adicional de comisiones flat (de contado) entre otros conceptos, resultan onerosas y abusivas, propias del negocio bancario, lo cual conlleva a estimar con la mayor precisión posible lo que se denomina la tasa efectiva de interés que se pagará realmente por el apalancamiento.

Llama mucho la atención ese concepto del cobro anticipado de intereses y deducido del monto del préstamo conferido, cuando el interés como gasto debería originarse una vez transcurrido el tiempo por el cual se disfrutó del capital otorgado en préstamo, así como del anatocismo, la conversión de intereses en capital, su capitalización, pero esa es la lógica y funcionamiento del capitalismo.  

Como conclusión, deberá determinarse con la mayor exhaustividad cuál es la tasa efectiva de interés que se pagará por el crédito contratado y, de esta forma, evitar que el apalancamiento financiero se convierta en contraproducente, y en lugar de incrementar la rentabilidad, apalanque el riesgo y la pérdida. 


Hétor E. Aponte Díaz
      


        
   


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