02/08/24.- Cientos de miles de personas se unieron a las protestas que se originaron en Tel Aviv y Jerusalén, después de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaran, este domingo, que fueron encontrados los cuerpos sin vida de seis rehenes en un túnel del movimiento palestino Hamás, cerca de la ciudad de Rafah, refiere el canal ruso de televisión internacional, RT.

Se estima que hasta 500.000 personas participaron en los actos de protesta que comenzaron este domingo por la noche a lo largo del país, dirigidas al Gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu, a quien se acusa de bloquear un acuerdo de alto el fuego y la liberación de rehenes para priorizar su propia supervivencia política personal.

Convocatoria a huelga total

El jefe del sindicato de trabajadores israelí Histadrut convocó una "huelga total" para este lunes en apoyo de los rehenes de la Franja de Gaza, con el objetivo de presionar al Gobierno para que llegue a un acuerdo con Hamás que garantice su liberación.

Las manifestaciones obligaron a suspender los vuelos en el Aeropuerto Internacional Ben Gurión, el más grande de Israel. Hospitales trabajan con una capacidad reducida. La medida también abarca transporte, instituciones educativas, bancos y restaurantes, destaca el portal Telesur.

Las protestas fueron en su mayoría pacíficas, pero algunos manifestantes rompieron las líneas policiales y bloquearon las principales calles y avenidas de Tel Aviv, haciendo llamamientos a la liberación inmediata de los rehenes que todavía se encuentran en la Franja de Gaza, la renuncia del primer ministro Benjamín Netanyahu y el fin de la guerra.

Con imágenes que representaban a los cuerpos de seis rehenes hallados en la ciudad de Khan Yunis y otros que siguen cautivos en el enclave, los manifestantes se preguntaron de "¿por qué todavía están en Gaza?" y acusaron al Gobierno israelí de "actuar contra la nación".

Asimismo, los representantes del Foro de Familias Rehenes pidieron al primer ministro que asuma su responsabilidad por la muerte de estas personas. "Hace más de 2 meses que se está negociando el regreso de los rehenes. Si no fuera por los retrasos, los sabotajes y las excusas, aquellos cuyas muertes conocimos esta mañana probablemente seguirían con vida", reza su comunicado, citado por la agencia turca de noticias, Anadolu.

Reacción del Gobierno

Este lunes, el mandatario israelí insistió en que, para alcanzar un acuerdo de alto al fuego con Hamás, Israel debe garantizarse el control del corredor de Filadelfia.

"Hamás obstinadamente no nos quiere allí, y por esa razón, exigimos obstinadamente que estemos allí porque nuestra presencia allí es una cuestión estratégica", dijo Netanyahu en rueda de prensa.

En cuanto a la huelga, el Gobierno maniobró para que llegara a su fin. Así la fiscal general, Gali Baharav-Miara, solicitó en la mañana del lunes a un tribunal que declarara “ilegal” la paralización.

Por su parte, el ministro del Desarrollo del Néguev y Galilea, Yitzhak Wasserlauf, indicó que la huelga organizada por el sindicato es una "huelga política criminal que va contra la ley, destinada a impedir ampliar medidas de seguridad promovidas por el Gobierno y la coalición".

Asimismo, Bezalel Smotrich, el ministro de Finanzas de Israel, declaró que, en lugar de ayudar a la economía israelí, el jefe del Histadrut "estaba cumpliendo el sueño del líder de Hamás, Yahya Sinwar, y en lugar de representar a los trabajadores israelíes, elige representar los intereses de Hamás".

Por su parte, el líder del sindicato Histadrut, Arnon Bar-David, aseguró que respetaba el dictamen del tribunal, pero anunció que la lucha continuaría. "Prometo a las familias de los secuestrados que Histadrut seguirá desempeñando un papel principal y central en los esfuerzos por traer a nuestros hijos e hijas a casa", declaró.

Represión policial

Las autoridades de Tel Aviv arrestaron al menos a 30 personas durante diferentes manifestaciones contrarias a la prolongación de la guerra sostenida por el primer ministro israelí.

Durante la movilización la policía utilizó granadas aturdidoras, gases lacrimógenos y cañones de agua, lo que provocó varios heridos, según reseña Telesur.

Según denunció el diario israelí Haaretz, las cargas policiales que se produjeron por la noche dejaron varios heridos en estado grave, entre ellos un manifestante con golpes en el pecho y la cabeza, un joven alcanzado por una granada aturdidora, un manifestante que cayó desde un lugar elevado rompiéndose las dos piernas y una anciana con heridas en la cara.

LUCILA CONTRERAS / CIUDAD CCS