16/10/24.- En Argentina, escala el conflicto entre el Gobierno neoliberal de Javier Milei y los sectores universitarios que exigen un mayor presupuesto. Nuevamente, protestas multitudinarias se vuelven a tomar las calles del país. Este miércoles, estudiantes y docentes de universidades públicas salieron masivamente para manifestarse contra la negativa del presidente argentino de ceder en la decisión del recorte al financiamiento universitario.

Estudiantes y docentes de las universidades nacionales de Avellaneda, Comahue, Córdoba, José C. Paz, Jujuy, La Matanza, La Pampa, La Plata, Mar del Plata, Moreno, Patagonia Austral, Quilmes, Rosario, Salta, San Martín, San Luis , San Juan, General Sarmiento, Tucumán y Tierra del Fuego, entre otras, tomaron este miércoles las sedes de distintas facultades y decidieron llevar a cabo clases en las calles en señal de protesta contra el reciente veto de Milei a una ley del Congreso que estipulaba un aumento presupuestario para las casas de estudio.

Dicha ley, que el Congreso había aprobado en septiembre y que declaraba la emergencia presupuestaria del sistema universitario nacional, preveía una distribución del 85 por ciento del presupuesto para salarios y de un 15 por ciento para gastos generales, con un mecanismo de actualización bimestral atado a una fórmula que combinaba el Índice de Precios al Consumidor, la variación del tipo de cambio y la variación en las tarifas de los servicios públicos.

Del mismo modo, este miércoles, el Frente Sindical de Universidades Nacionales convocó a una marcha de velas desde Plaza Houssay hasta la Secretaría de Educación, mientras que se prevé un paro de 48 horas para la próxima semana.

Las universidades en el país planean realizar, el próximo 23 de octubre, clases públicas simultáneas frente al Congreso. “Queremos que sea una clase pública federal para mostrar lo que está sucediendo en todo el sistema universitario”, expresó Piera Fernández de Piccoli, presidenta de la Federación Universitaria Argentina (FUA), citada por TeleSur .

Sin embargo, el presidente ultraliberal aseguró que no va a ceder ante los reclamos e insiste en llevar adelante las auditorías públicas del sector educativo, aduciendo que su administración no busca arancelar la educación universitaria pública, sino "auditar" los gastos de las casas de estudio, ya que, según dijo, "la política utiliza las universidades para financiarse".

Los estudiantes y profesores prometen seguir en la lucha por la defensa de la educación, mientras el Gobierno de Milei mantiene su postura firme en la implementación del plan económico de extremo ajuste de las cuentas públicas, tutelado por el Fondo Monetario Internacional (FMI).

LUCILA CONTRERAS / CIUDAD CCS