18/10/24.- Las autoridades haitianas han expresado su profunda preocupación por el aumento de la xenofobia y la falta de respeto a los procedimientos legales y a la dignidad humana en el contexto de las deportaciones masivas de migrantes haitianos por parte del Gobierno de República Dominicana.

 A través de una comunicado oficial, el Gobierno de Haití, liderado por el primer ministro Garry Conille, condenó enérgicamente las “deportaciones masivas y discriminatorias” que se están llevando a cabo, instando a las autoridades dominicanas a poner fin a estas prácticas y a garantizar el respeto a los derechos fundamentales de los migrantes haitianos, tal como lo establecen las convenciones internacionales.

Durante una reciente reunión del Consejo de Gobierno se adoptó una resolución que resalta la necesidad de asegurar un trato digno para todos los migrantes, así como la implementación de estrategias inmediatas para salvaguardar sus derechos humanos. Asimismo, se discuten acciones necesarias para facilitar la reintegración de los ciudadanos haitianos que están siendo repatriados.

El primer ministro Conille, en su cuenta de X, denunció “los malos tratos” que enfrentan los haitianos durante su repatriación, y aseguró que varias instituciones y autoridades locales están movilizando recursos para garantizar que los repatriados sean acogidos con dignidad y respeto.

El 2 de octubre, el Gobierno dominicano anunció su intención de repatriar hasta 10.000 indocumentados por semana, una medida que afecta principalmente a ciudadanos haitianos, cuyas cifras superan al medio millón en el país. Las autoridades de República Dominicana rompieron un récord la primera semana de implementación de esta medida al repatriar a 11.177 ciudadanos haitianos. El presidente dominicano, Luis Abinader, ha argumentado que la inestabilidad en Haití representa una presión considerable sobre los recursos de seguridad, salud y educación de República Dominicana.

El Consejo de Transición de Haití también ha solicitado a las autoridades dominicanas que implementen el protocolo de repatriación firmado en 1999 por ambas naciones, donde se establece que las deportaciones deben realizarse respetando los derechos humanos y evitando la separación familiar. Además, el protocolo estipula que dichas deportaciones no deben llevarse a cabo en horas nocturnas, domingos o días festivos, y deben realizarse solo por puestos fronterizos determinados.

Haití ha reiterado su compromiso por un diálogo constructivo a nivel diplomático para restablecer una política de buena vecindad entre ambas naciones.

CIUDAD CCS