Noviembre de 1992: Entre la rabia y la esperanza

En un año se generaron múltiples protestas y pérdidas humanas en busca de un cambio

La unión cívico-militar despertó el interés de lograr cambios en el sistema político de Venezuela.
 
04/11/22.- Venezuela vivió en 1992 un año agitado, lleno de protestas universitarias, crisis económica, una insurrección militar fallida el 4 de febrero, encabezada por el Movimiento Bolivariano 200 (MBR-200) y liderado por el teniente coronel Hugo Chávez Frías que asumió estar al frente de la operación y pagó con cárcel junto a otros militares que se replegaron en Valencia y Maracaibo, mientras otros entregaron sus vidas en el intento.
 
Pero al retroceder hasta el 27 de febrero de 1989 con El Sacudón (también llamado El Caracazo) se demostró hasta qué punto era capaz de llegar la población cuando veía el aumento de la gasolina, el pasaje urbano o los productos de la cesta básica y los servicios públicos. 
 
Estos elementos formaban parte del paquete de medidas conocido como "El paquetazo", anunciado por el presidente Carlos Andrés Pérez junto a su gabinete ministerial, producto de consecuencias heredadas de los gobiernos anteriores, que obligaron a adoptar medidas neoliberales que causaron malestar en la población y una reacción inesperada para algunos sectores. 
 
Las medidas económicas de Carlos Andrés Pérez comprometían la estabilidad integral de la población venezolana.
 
1992 no fue un año distinto en el sentido que le dan las familias durante cada 31 de diciembre cuando se consuelan al decir que el año viejo fue terrible y el siguiente será mejor, porque nunca pasó, y menos en un país que se sometía, no solo a las medidas económicas del jefe de Cordiplan, Miguel Rodríguez, sino también a morir en manos del hampa en cualquier esquina del barrio o calle desolada, simplemente por caminar con unos zapatos Air Jordan, que enfrentaba la represión policial indiscriminada y la recluta, que se empeñaba en ser la eterna pesadilla para todo aquel adolescente que atravesaba el umbral de la adultez a los 18 años.
 
Todavía se recordaba la muerte de estudiantes universitarios como Belinda Álvarez, Gonzalo Jaurena y Yulimar Reyes, mientras se sumaban mártires en cada protesta ucevista de los recordados Jueves Culturales, y pobre de aquel que osaba transitar con su carro cerca de "la casa que vence las sombras" en medio de ese bochinche, recordando la expresión usada por el Generalísimo Francisco de Miranda. 
 
En otras ciudades hubo movimientos similares, sin embargo Caracas adquirió con el paso de los años, un papel protagónico en los cambios políticos y sociales del país, y noviembre representó un mes en el que la capital sirvió como escenario una vez más.
 

Noviembre de armas y rosas

 
El 25 se presentó en el estacionamiento del Poliedro de Caracas la banda de rock estadounidense Guns N' Roses y el público pagó 2.500 bolívares para ver a sus ídolos, al igual que a Benjamín Rausseo "Er Conde del Guácharo", quien fue el telonero durante 40 minutos de aquella noche y cantó un tema rocanrolero compuesto por él mismo: "Vamos a la orilla del río, vamos a hacer un sancocho, no será de carne de res, ni pescado ni corroncho, vamos a hacer un sancocho que nos quedará muy fino, vamos a hacer un sancocho con pellejo de cochino".
 
Entrada general para el concierto de Guns N' Roses en el estacionamiento del Poliedro de Caracas.
 
Hubo más de 50 mil personas y la droga fluyó de manera natural entre los jóvenes que comenzaron a aburrirse del monólogo de comedia del nativo de Musipán, cuando este ripostó a la multitud que lo abucheaba: "Si no me dejan terminar, le voy a decir a Axl que no salgan", lo que provocó la calma en pocos y el repudio en la mayoría.
 
En la música caribeña se fueron de este mundo dos intérpretes que llegaron al status de leyenda: Guadalupe Yoli Raymond "La Lupe" y Daniel Santos.
 
La primera falleció en Nueva York el 29 de febrero y el segundo en Florida el 27 de noviembre, este último en un día que convulsionó nuevamente a Venezuela por el camino de las armas.
 
Se llevó a cabo un segundo intento de golpe de Estado solo que, en esta ocasión fue posible la unión cívico-militar bajo la batuta de los contralmirantes Hernán Grüber Odremán (jefe de la operación), Luis Enrique Cabrera Aguirre, el general de brigada de la Fuerza Aérea Francisco Visconti Osorio, el coronel del Ejército Higinio Castro y el mayor de la Guardia Nacional Carlos Salima Colina.
 
Los canales como Venezolana de Televisión, Radio Caracas Televisión y Venevisión fueron tomados por el teniente Jesse Chacón para la transmisión de un video en el que se explicaba las razones del golpe de Estado e invitaba a la Fuerza Armada Nacional a sumarse en estas acciones.
 
El teniente Jesse Chacón fue detenido junto a otros compañeros tras el fracaso del segundo intento de golpe de estado
 
Hubo enfrentamientos en Caricuao, el 23 de Enero, un motín en el Retén de Catia que derivó en la fuga de varios reclusos y fallecidos en enfrentamientos con la Guardia Nacional.
 
El fracaso del segundo intento incrementó la popularidad de los militares que se rebelaron al gobierno de Pérez en busca de un cambio que involucraba a todos los venezolanos.
 
Pero la historia oficial tiene un límite y ante ese vínculo cívico-militar que se gestó aquel día, actualmente hay hombres y mujeres que deambulan diariamente por las calles de Caracas viviendo de varios oficios para ganar dinero, y llevan en sus hombros un cúmulo de anécdotas, hazañas y vivencias que fácilmente pueden enriquecer este capítulo que forma parte de la Venezuela contemporánea.
 
Ese 27 de noviembre hubiese cumplido 50 años quien es considerado uno de los mejores guitarristas en la historia del rock: Jimi Hendrix.
 
En definitiva, un mes de solidaridad en la lucha por marcar nuevos senderos para el siglo XXI en Venezuela.
 
EMMANUEL CHAPARRO RODRÍGUEZ / CIUDAD CCS

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