20/11/2024.- Antes del traspaso de mando en Estados Unidos una administración por sus acciones y omisiones, temerosa de terminar en la cárcel, comenzó la sucesión.

Y no es necesario ser sabio o tener en la cabeza todos los diccionarios y libros de historia para darse cuenta de que el segundo gobierno de Donald Trump se dirige hacia el fascismo simple. El que hace caso omiso de las leyes, cuando se trata de agredir países más pobres y personajes de esos países.

Para esta etapa poco sirven fichas como las utilizadas en la elección del 28J. MCM, EGU y sus adláteres fracasaron y en lo único que les pueden servir a sus amos del Norte es en dar un paso de lado o más bien quedarse a la distancia, hasta que inventen un nuevo “dirigente” para esta oposición gritona, tan pirata como los antecesores, pero salido de actos de sabotajes.

La salida del país de MCM por caminos verdes para verse con el uribismo colombiano, valga decir con los narcos a los que en una oportunidad al bellaco de Guaidó acompañaron al vecino país para que ofreciera derribar el Gobierno venezolano mediante un concierto del que nunca rindieron cuentas, y otras mentiras, significa el fracaso de la gritona.

Y también significa que la violencia escala para que el dúo Trump-Marco Rubio se froten inicuamente las manos.

Y en eso no pierden tiempo los jefazos del Norte: ¡comenzaron en Margarita con sabotajes a las líneas de electricidad, a los tanques de agua y esa acción criminal fue acompañada por decenas de miles de fotos, memes y videos, donde los autores del sabotaje se quejaban por “la falta de luz, agua y gasoil para las plantas eléctricas de los centros comerciales.

Como las contradicciones de esta gentuza siempre aparecen, los mismos asalariados del interino, pasados por los momentos al borrachín sinvergüenza del EGU, los mismos que se quejaban porque “no venían turistas y los centros comerciales estaban vacíos”, protestan ahora porque “los turistas no volverán con esos centros comerciales sin luz”.

Por fortuna la vice Delcy señaló el sabotaje y las fuerzas del orden están tras la pista de los delincuentes que lo llevaron a cabo.

Pero no es solo el Gobierno nacional, sino la gente quien debe estar pendiente de estos saboteadores para su captura antes que hagan de las suyas.

Incluso el pueblo yanqui debe estar atento porque si los precios y el desempleo de Biden y su combo fueron duros, lo que viene puede ser peor, y sin las redes de salvamento que facilita la democracia que Trump y su gabinete no respetan.

Domingo Alberto Rangel