05/12/2024.- Comentábamos en el capítulo anterior de Pluma acústica sobre los antecedentes del bajo en la música afrocaribeña y, nos dio chance de mencionar a tres de los más importantes ejecutantes de este instrumento. En esta segunda entrega seguiremos homenajeando a los grandes bajistas de nuestra música. También estaremos recomendando temas donde el bajo no solo es protagonista, sino acompañante rítmico y melódico. Expresado esto, debemos admitir que hubo un término que no explicamos en el episodio anterior de esta modesta trinchera musical y que es de gran importancia para la comprensión y valoración del instrumento musical que los engrana a todos. Se trata del concepto del tumbao.

Dentro de este universo de términos y conceptos relacionados a la música afrocaribeña, existen dos que, probablemente al oído menos entrenado, pasan por debajo de la mesa. Uno es el montuno en el piano, guitarra o tres cubano, y el otro es el tumbao en el bajo.

El tumbao es una línea melódica y rítmica ejecutada por el bajo, mejor dicho, por el bajista, que ofrece a los otros instrumentos una base sólida donde poder desarrollar su discurso. Algo parecido al llamado montuno, una figura que ejecuta el piano o el tres, con ciertas características rítmicas y melódicas que generan ritmo y cadencia que excitan al escucha y/o bailador.

El tumbao en el bajo no es un estilo en sí, sino más bien una forma de tocar que se aplica a varios géneros de música afrocaribeña, incluido el jazz latino. Una de las principales características de las líneas de bajo en estos géneros es que van colgadas en el tiempo. Por una parte el bajo anticipa notas de los acordes que vendrán y, es el único instrumento armónico que lo hace, puesto que los patrones rítmicos del resto del resto no incluyen esta anticipación. Aunque en la mayoría de los casos, el bombo de la batería o el tambor más grave tocará también en esos espacios.

Aclarado este término, o por lo menos, haciendo una aproximación al concepto; continuemos mencionando a algunos de los personajes que han llevado al bajo a niveles estratosféricos.

Otros bajistas que han hecho del tumbao una historia

Bobby Rodríguez, mejor conocido como “Big Daddy”, fue un multiinstrumentista que se destacó, no solo en el bajo, también lo hizo como saxofonista, clarinetista, percusionista y director de orquesta. Tocó el bajo con la orquesta de Tito Rodríguez, entre otras. Tenía un estilo vanguardista a diferencia de, por ejemplo “Cachao”, que era más tradicionalista. Sin embargo lo que lo trae aquí fue su faceta como bajista con la extraordinaria agrupación Alegres All Stars, que fue la orquesta con la que lo escuché por primera vez como solista y quedé deslumbrado. Los Alegres grabaron más de diez discos, en los cuales el bajista, mejor dicho, el contrabajista fue Bobby Rodríguez. Ejecutando el instrumento de forma magistral. Se destacó como formidable acompañante y sus ejecuciones de “solos” eran impecables.

Eddie “Gugua” Rivera, es otro de los infaltables cuando de bajistas de música afrocaribeña hablamos. “Guagua” comenzó tocando a muy temprana edad la trompeta, el trombón y el bombardino. Tocaba en una banda llamada Combo Caribe, integrada por niños, quienes a la postre también fueron grandes figuras de la música. Llegó a tocar el bajo de una forma algo aparatosa, si cabe el término. Resulta que el bajista de dicha agrupación (Combo Caribe) era el que menos talento tenía. Hubo un altercado entre el director, que por cierto era bajista, Wllie Centron, y este personaje de poco talento que derivó en el término de su relación laboral. Willie le comentó a Eddie y este le dijo que se sentía capaz de ejecutar el bajo. Así que el padre de Eddie alquiló un bajo y comenzó clases con el gran “Cachao”. Luego vino una avalancha de trabajo con grandes artistas como los hermanos Charlie y Eddie Palmieri, Mongo Santamaría, Larry Harlow, Marckolino Dimond, entre tantos. Eddie también es fundador de la legendaria agrupación Batacumbele junto al maestro Giovani Hidalgo.

Enumerar a los bajistas de alta talla que han hecho historia dentro de la música afrocaribeña nos ocuparía varis capítulos. Sin embargo debemos mencionar a dos grandes que hicieron aportes importantes, sobre todo en la incorporación del bajo de pecho. Uno de ellos es el maestro Bobby Valentín, uno de los legendarios bajistas de la Fania All Stars; de quien podríamos decir que fue uno el primero en utilizar el bajo de pecho en la emblemática agrupación. El otro grande es Salvador cuevas, quien revolucionó el sonido clásico del bajo en la salsa incorporando la técnica del slap; que consiste en golpear las cuerdas contra el mástil y halarlas. Esta técnica es mayormente asociada con el funk y con el rockabilly.

Líneas y “solos” de bajo legendarios

Existen líneas de bajo que son icónicas en la música afrocaribeña. Podemos mencionar al menos tres, la primera de ellas la del tema Manteca, compuesto por Dizzy Gilespie y Chano Pozo, sin embargo el intérprete de esa maravillosa línea de bajo fue el gran Al´ Mc´Kibbon. Otra línea extraordinaria de bajo en la música que nos ocupa es la de la canción Para Ti, de Mongo Santamaría. Este tema fue grabado por Mongo en diferentes álbumes, pero el original fue grabado en el disco Sabroso de 1959 y el bajista para ese álbum fue Víctor Venegas. Y mi última recomendación en cuanto a líneas de bajo es la del tema Black Orchid, de Cal Tjader y Eddie Palmieri, ejecutada por otro grande del bajo: George Duvivier.

En cuanto a “solos” magistrales también puedo recomendar tres de mis favoritos. En primer lugar el “solo” de Eddie “Guagua” en la canción Popo Pa Mí, grabada en el disco Salsa de Larry Harlow; en este “solo” Eddie “Guagua” nos deleita con una demostración de punteos y acordes disonantes que enriquecen al ya emblemático tema de una manera formidable. La segunda recomendación es el "solo” de Jule “Slim” Cordero en el tema Cocinando grabado en el disco Se Busca Vivo o Muerto, de Joe Cuba. Este “solo” no tiene desperdicio, “Slim” lo ejecuta con arco utilizando un baby bass, instrumento del que ya hablamos en nuestro capítulo anterior. Y ya para finalizar, recomiendo un “solo” de corta duración pero de gran impacto interpretado por el gran Bobby Rodríguez en el tema estoy buscando a Kako, de los Allegres All Star en su disco homónimo, también conocido como Vol.I.

Kike Gavilán