09/12/24.- La situación en Siria se ha deteriorado de manera incesante en las últimas horas. La Oficina de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas reportó un millón de desplazados internos, en su mayoría mujeres y niños, desde el inicio de la reciente escalada del conflicto, el pasado 28 de noviembre. Este desplazamiento ha sido exacerbado en regiones clave como Alepo, donde más de medio millón de personas han sido forzadas a abandonar sus hogares y cabe acotar que en la misma se han registrado diferentes enfrentamientos.

La ONU, por su parte, alertó sobre las condiciones precarias en los centros de acogida, que están desbordados y carecen de recursos, lo que genera una urgente necesidad de alimentos y servicios sanitarios para los desplazados. A medida que la situación se complica, se han observado retornos “significativos y crecientes” a pueblos y ciudades sirias, aunque el contexto sigue siendo inestable, reportan los medios del Oriente Medio.

Toda esta situación es consecuencia finalmente de la salida del poder del presidente Bashar Al Assad, este fin de semana, luego de que grupos extremistas y terroristas apoyados por Israel, Türkiye y países occidentales asediaron al gobierno de ese país árabe desde 2011

La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur) instó a los Estados a garantizar el acceso a sus territorios para los solicitantes de asilo sirios, según información aportada por Sputnik.

La portavoz de Acnur, Shabia Mantoo, enfatizó la importancia de proteger a quienes buscan seguridad, a pesar de que varios países europeos, incluyendo Austria, Bélgica y el Reino Unido, decidieron suspender temporalmente los trámites de asilo en medio de la incertidumbre actual en Siria.

Recalentamiento en la región

La crisis se ha intensificado tras la caída del gobierno de Bashar Al-Assad, quien recibió asilo en Rusia junto a su familia el pasado domingo, y la toma del control por parte de fuerzas antigubernamentales en ciudades como la capital Damasco, Alepo, Hama y Homs.

En un esfuerzo por promover la reconciliación, las fuerzas milicianas sirias ahora en el poder anunciaron una amnistía general para el personal del Ejército reclutado para el servicio obligatorio, garantizando su seguridad y prohibiendo cualquier agresión en su contra.

Este giro en los acontecimientos resalta la complejidad de la situación en Siria, donde la población civil continúa sufriendo las consecuencias del conflicto, mientras que la comunidad internacional enfrenta el desafío de responder adecuadamente a la crisis humanitaria y garantizar la protección de los desplazados y solicitantes de asilo.

En medio de esto, Israel, que ocupa el territorio palestino y libra un genocidio contra ese pueblo desde hace más de un año, atacó bases aéreas de Siria y destruye infraestructuras, decenas de helicópteros y aviones cazas.

"Israel ha llevado a cabo ataques contra las mayores bases aéreas de Siria", precisó la agencia de noticias TASS en una nota de este lunes, reseñada por AVN.

Además, las fuerzas sionistas israelíes ejecutaron ataques contra el cuartel general de un regimiento especial en Qamishli, provincia de Hasaka.

El pasado 7 de diciembre, el grupo armado Hayat Tahrir al Sham avanzó hacia varias ciudades como Alepo, Hama, Deir ez Zor, Deraa y Homs.

En ese contexto, el sionismo israelí, entre otras acciones, anunció maniobras en la zona que separa los Altos del Golán y Siria.

El desenlace en Siria complejiza aún más los conflictos bélicos provocados por Occidente en la región que abarcan a Palestina y a Líbano, entre otros.

CIUDAD CCS