19/12/24.- El presidente ruso, Vladimir Putin, defendió con firmeza la presencia militar de Rusia en Siria, desestimando que la caída del expresidente Bashar al Asad signifique una derrota para Moscú.

Durante su sesión anual de preguntas y respuestas ante la ciudadanía y medios de prensa, el mandatario del país euroasiático puntualizó que se logró el objetivo principal de impedir el establecimiento de un califato islámico.

“Ustedes quisieran presentar cuanto sucede en Siria como un fracaso o una derrota de Rusia, pero les aseguro que no es así”, afirmó Putin a un periodista del canal estadounidense NBC.

El mandatario destacó que los objetivos iniciales de Rusia al intervenir en Siria han sido cumplidos con éxito. “Llegamos a Siria hace diez años para impedir la creación de un enclave terrorista, hemos logrado nuestros objetivos”, subrayó.

Desde la llegada del contingente militar al territorio de Siria, en septiembre de 2015, un pedido del Gobierno derrocado para ayudar en su lucha contra el terrorismo, Rusia llevó a cabo operaciones decisivas contra grupos radicales.

Putin aseguró que Rusia mantendrá su presencia estratégica en la base aérea de Hmeymim y el puerto de Tartus, enviando refuerzos si es necesario para garantizar la seguridad y estabilidad del país.

En cuanto a la situación actual en ese país del Medio Oriente, señaló que “quien más se beneficia de lo que ocurre en Siria es Israel”, al tiempo que precisó que la presencia militar israelí se estima ahora en millas de efectivo.

Expresó su preocupación por el hecho de que Israel parece estar reforzando su presencia militar en lugar de retirarse. Sin embargo, Putin reafirmó la postura inquebrantable de Rusia contra cualquier ocupación territorial siria.

Además, abordó el delicado tema del problema kurdo, enfatizando que debe resolverse con las autoridades legítimas que controlan el territorio sirio.

CIUDAD CCS