Crónicas y delirios | Carta abierta a Míster General
20/12/2024.- Por cuanto las posibilidades de una guerra atómica que acabe con nuestro planeta están cada vez más aterradoramente cercanas, hoy publicamos, luego de 43 años de su edición primigenia en el diario El Nacional, de Miguel Otero Silva, esta "Carta abierta a Míster General", cuyo destinatario era en efecto el general Alexander Haig, secretario de Estado de Estados Unidos bajo el mandato de Ronald Reagan.
Va entonces dicha carta abierta, sin más añadidos ni otras perturbadoras alusiones de nuestras antiguas crónicas Fuegos de palabras:
Como humano y mortal, como integrante de este género en posibles vías de desaparecer por acción de la bomba solo-mata-gente, me dirijo a usted, Míster General, Jefe del State Department, para pedirle por todos los diablos, dioses y demonios de este mundo que piense con las neuronas del entendimiento antes de apretar el botón rojo de la guerra.
Estoy seguro de que mi mensaje no llegará nunca a sus agitadas manos bélicas, pero aun así, Herr General, me permito lanzárselo a los cuatro vientos de la paz.
Si a usted se le ocurre, con Nostradamus a cuestas, atomizarnos en segundos con miles de efluvios lapidarios, solo tendremos tiempo para maldecirlo de por muerte (¡malditas sus botas de fuego, maldita su mirada amarillenta!). ¿Ha pensado, Chief of Soldiers, lo que sería un planeta sin gente-niños, sin gente-novias, sin gente que sonría o se conduela? ¿Ha meditado, comandante de aviones y radares, sobre el terrible silencio de un cementerio planetario, en una noche donde nadie vea las estrellas? Si acaso usted cree que sobrevivirá a la contienda, tendrá el gusto de brindar on the rocks sobre las rocas quemantes del Louvre y de Toledo.
¿Destruirá usted a todos los Buendía, sin que duden sus manos made in USA? ¿Podrá entrever Borges, desde el lacrado más allá, todo el incendio de la humanidad? ¿Qué hará Octavio Paz con la ineficacia de su apellido? ¿Dedicará Guillén el último poema a su largo lagarto de isla caribeña? ¿Vendrá Cortázar a jugar un martirio de Rayuela con trazos de cenizas radioactivas?
No podemos adelantarnos a los acontecimientos, Dr. Jekyll, porque usted tiene la respuesta de rigor… marcial. Pero permítanos decirle que si algo ocurre, el viejo Whitman y su barba de ultratumba lo condenarán eternamente, Poe inventará cientos de cuentos extraordinarios para execrarlo, Faulkner le gritará brumas airadas desde su condado de Yoknapatawpha, y el mismo Lincoln llorará al pie de la Estatua de la Libertad.
Muchas preguntas inquietantes quedan dentro de los huesos. Por ejemplo, y es un decir a lo Vallejo, qué harán las mariposas sin hombres que las contemplen; quién cantará la línea difusa de los atardeceres, cuántos amantes dejarán de aparearse en cualquier noche de cualquier pueblo; por qué los perros aullarán a esa soledad de laberinto; dónde, ¡Míster!, estarán vuestros propios y atemorizados hijos.
Estoy convencido de que estos misiles de mi angustia jamás traspasarán la órbita de su férrea logística militar, pero sepa usted, Secretary, Sir, Minister, General, o como desee llamarse, que nunca la historia —aun en ruinas— lo absolverá.
Manchones de un genocidio en curso
—A esta fecha, hay más de 45 mil fallecidos por el embate genocida de Israel en Gaza, la mayoría niños y niñas.
—Según últimos datos de Unicef, solo en octubre pasado se registraron en la Franja de Gaza 64 ataques contra escuelas —casi dos cada día—, con saldo de 128 personas muertas, muchas de ellas menores de edad.
—Conforme a Reporteros Sin Fronteras (RSF), la cifra mortal de periodistas a manos del ejército israelí alcanza los 141, mientras algunos habitantes del mundo (agregamos nosotros) obvian la noticia y prefieren voltear hacia el lado de la indiferencia.
—Se calcula que más de 10 mil personas están sepultadas bajo los escombros en Gaza.
—Crimen de lesa humanidad cuya sanción no debe quedar ilesa: "Aviones sionistas bombardean con saña los campos de refugiados y desplazados".
—Y ahora, luego de la caída del presidente Bashar al-Ásad, Israel también ha intensificado los bombardeos en Siria para fragmentar el país, como antes se hizo con la Libia de Gadafi en el año 2011.
Igor Delgado Senior