Cine para llevar | Párpados azules (Netflix)

La película mexicana está disponible en Netflix

10/10/2024.- La mayoría de la gente le tiene miedo a la soledad, es el coco de la vida moderna. “Te vas a quedar solo”, te dicen cuando va pasando el tiempo y no logras establecer un vínculo de pareja que te lleve al matrimonio o a la consecución de una familia. Sin embargo, estar solo, sentirse solo y aceptar la compañía de cualquiera para no quedarte a solas con tus propios pensamientos son tres asuntos totalmente diferentes.

En Párpados azules, la película del mexicano Ernesto Contreras, se muestra la diferencia entre esas tres realidades. Sin dramas ni exageraciones, sin ganas de manipular al público, la cinta te lleva a la vida de Marina, una mujer que está sola, pero también se siente sola y además, en un momento determinado, toma la decisión de relacionarse no por gusto, sino por necesidad, pero sobre todo por presión social, por no soportar la mirada ajena que casi siempre juzga.

La cinta protagonizada por Cecilia Suárez cuenta cómo la soledad, entendida de un modo incorrecto, puede llevarte a la tragedia de vivir aislado, pero de la persona más importante que conocemos, nosotros mismos. Puedes fallarle al mundo entero, pero hacerlo contigo es siempre un pecado mortal.

La soledad, tema complejo y cotidiano, sobre todo en esta época de hiperconexión, es difícil de entender y manejar. En la película asistimos a las rutinas de los personajes que desean desembarazarse de ella, pero ¿a qué costo?

Sin hacer spoiler podemos decir que Párpados azules es la representación de lo importante que es no perder de vista la frase popular: “Mejor solo que mal acompañado”, porque el mayor impedimento para la felicidad es la dependencia de elementos externos para su consecución.

En el largometraje, no solo los protagonistas viven la incertidumbre que puede generar la búsqueda desesperada de compañía, también existen otros personajes que representan una gran desconexión con el alma, porque esa es la verdadera soledad, el no poder conversar contigo mismo.

En la película subyace una reflexión, no es necesario de otros para sentir, para conectar con la emoción de la vida; la única persona que en realidad puede hacerlo eres tú. De lo contrario, te puedes despertar un día deseando saborear la belleza en labios ajenos y dejar en otros la responsabilidad de tu satisfacción, siempre implica un riesgo que podría generar altas dosis de sufrimiento.

Los personajes intentan encontrar en las relaciones personales el impulso que les falta ¿satisfactoriamente? Eso tendrás que averiguarlo.

En el largometraje veremos si logran vivir plenamente o, por el contrario, sí se amoldan a una existencia creada por otros. La película puede tener ambas interpretaciones, depende de cada espectador elegir una.

No obstante, lo que sí está claro en la cinta es que la soledad, además de ser una circunstancia que puede llenarte de tristeza, es la oportunidad para encontrar un universo propio, para construirlo de cero de ser posible, para no dejarse limitar por las perspectivas ajenas y llenar los vacíos personales de la única forma posible, desde adentro.

Luisa Ugueto Liendo

Instagram: @cineparallevarl

 

 

 

 

 


Noticias Relacionadas