Trump, las primeras órdenes
Al menos 76 órdenes ejecutivas ha firmado en sus primeras horas de gobierno
En Alemania el saludo nazi está prohibido, es ilegal, de allí que resulta imposible mostrarlo en los medios de comunicación.
Esa es la razón, por la que el diario alemán Zeit en su versión impresa y online publicó el saludo nazi de Elon Musk, durante la toma de posesión de Donald Trump, pero mostrando solo media foto ya que debieron tapar el brazo extendido, con una macha azul.
Ese saludo nazi está prohibido por una ley que, además, califica la apología al nazismo o la negación del Holocausto como delitos que tienen penas de hasta cinco años de prisión.
Este “saludo” del dueño de la red social X, fue apenas un asomo de las nuevas formas que adopta el segundo mandato del republicano Donald Trump, el 47° presidente de Estados Unidos.
El destino manifiesto
En las horas inaugurales de su segundo mandato de Trump, parece volver con renovadas fuerzas la ideología de la supremacía blanca.
Juró como primer mandatario diciendo, entre otras cosas, que en aquel evento, ocurrido en Pensilvania, cuando una bala rozó su oreja, fue “salvado por Dios para hacer grande de nuevo a Estados Unidos”.
Agregó que “Estados Unidos reclamará su legítimo lugar como la nación más grande, más poderosa y más respetada de la tierra, inspirando el asombro y la admiración del mundo entero”. Un alegato que evoca el argumento de carácter religioso (1845), conocido como el destino manifiesto.
Enarbolado por John O' Sullivan, este argumento estadounidense dirigido a otras naciones era claro en su amenaza contra aquellos que, intentasen "torcer nuestra política y obstaculizar nuestro poder, limitando nuestra grandeza y bloqueando nuestro destino manifiesto de cubrir el continente señalado por la Providencia para el libre desarrollo de nuestros millones multiplicados cada año".
Al respecto, la periodista e investigadora argentina Telma Luzzani escribe en el libro 'Territorios Vigilados' (2012) que "el argumento del periodista [O' Sullivan] se basaba en una convicción que llega hasta nuestros días y es la de que Dios había elegido no simplemente a un grupo de hombres y mujeres (anglosajones) racialmente superiores, sino a un pueblo en su conjunto (EE.UU.) para llevar a cabo su proyecto divino en este planeta".
Pistoletazo de salida
Al menos son 76, las primeras órdenes ejecutivas rubricadas por el republicano y con las que se propone revertir hasta en 80% las políticas dictadas por su antecesor demócrata.
Una de sus primeras polémicas consistió en anunciar que "dentro de poco, cambiaremos el nombre del Golfo de México por el de Golfo de América".
La presidenta de México Claudia Sheinbaum respondió ironizando: "Dice que lo va a llamar Golfo de América (...). Para nosotros sigue siendo Golfo de México y para el mundo entero sigue siendo Golfo de México".
Seguidamente, y según publicó el diario El Economista, Trump decidió eliminar el nombre indígena de la montaña más alta de ese país, para volver a llamarla McKenley, en homenaje al expresidente William McKenley (1897-1901) conocido como el Napoleón del proteccionismo y responsable de tomar los territorios de Filipinas, Guam, Hawaii y Puerto Rico.
Vale recordar que en el año 2015, Barack Obama ordenó renombrar a la montaña McKinley como “Denali, o montaña grande en la lengua de los nativos atabascanos koyukon”.
Entre esas decenas de órdenes ejecutivas se supo que Trump pondrá fin a los programas de diversidad y las políticas de identidad de género, con el argumento de que “el gobierno sólo reconocerá dos géneros: masculino y femenino”. La decisión figura en una orden que deberán aplicar todas las agencias federales.
También aseguró que Estados Unidos reclamará nuevamente el control del Canal de Panamá. Dijo: “a los barcos estadounidenses se les está cobrando gravemente de más y no se les está tratando justamente de ninguna manera, forma o manera, y eso incluye a la Marina de los Estados Unidos y, sobre todo, China está operando el canal de Panamá. Y nosotros no se lo dimos a China. Se lo dimos a Panamá y vamos a recuperarlo”.
Por otra parte, Donald Trump concedió indultos y eliminó las penas de cerca de 1.600 personas que fueron procesadas por diferentes delitos cometidos en el conocido Asalto al Capitolio, registrado el 6 de enero de 2021, por supremacistas blancos. Recuerda la BBC que “el violento asalto al Capitolio dejó cinco muertos y varios heridos, y se dio luego de que Trump insistiera, sin pruebas, en que las elecciones de noviembre de 2020 -en las que fue derrotado por el demócrata Joe Biden- habían sido un robo”.
Otra noticia que explica las nuevas formas del gobierno de EE.UU., se desprende del anuncio de la transnacional Meta (empresa matriz de Facebook, Instagram, WhatsApp, Messenger Live y Threads) sobre la relajación de la política de Conductas de odio. Una decisión que permite que los discursos homófobos, tránsfobos, misóginos y racistas, estén permitidos en las redes sociales de Meta.
Por otra parte, la nueva administración de la Casa Blanca, rápidamente activó el mecanismo para retirar a Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Igualmente ordenó retirar (por segunda vez) a su país del Acuerdo de París sobre el cambio climático, dejando claro que su gobierno “cesará o revocará inmediatamente cualquier supuesto compromiso financiero contraído por Estados Unidos en virtud de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático”.
Al ser consultado sobre las relaciones con América Latina expresó con arrogancia: "Ellos nos necesitan. Mucho más de lo que nosotros les necesitamos a ellos. Nosotros no les necesitamos. Ellos nos necesitan. Todos nos necesitan".
Y, para poner la guinda a sus primeras 72 horas de gobierno, volvió a incluir a Cuba en la lista de países patrocinantes del terrorismo.
Un comunicado difundido por el Ministerio de Relaciones Exteriores del gobierno cubano, tras la decisión estadounidense señala:
“La decisión de restablecer las férreas medidas de guerra económica contra Cuba, que su predecesor eliminó solo días antes, es demostración de la agresividad del imperialismo estadounidense contra la soberanía, la paz y el bienestar de la población cubana. Entre ellas está la inclusión de nuestro país, nuevamente, en la lista arbitraria de Estados que supuestamente patrocinan el terrorismo, designación que evidencia un desprecio absoluto a la verdad”.
¿Alguna predicción?
Más adelante agrega el comunicado: “Trump ha interpretado su llegada al poder como la coronación de un emperador. Su ambición abarca, solo para empezar, la conquista de Canadá, la usurpación de Groenlandia, el cambio de nombre del Golfo de México y el despojo a los panameños de su canal. La hegemónica Doctrina Monroe y el Destino Manifiesto, que a golpe de sangre y fuego se impusieron en América Latina y el Caribe, son la guía del nuevo equipo de gobierno”.
Citado por la agencia Sputnik, el analista internacional y profesor de Ciencia Política en la Universidad de Maryland, Ernesto Calvo, dijo encontrar “mucha similitud” entre los objetivos de este nuevo mandato de Trump, y las gestiones de Jair Bolsonaro y Milei. Agregó que las políticas del republicano resultan “muy imponderables. Él siempre ha sido alguien que, en términos de políticas públicas, ha anticipado poco. La ley más importante que se aprobó en su primer mandato fue la reducción de impuestos. Después no hizo muchas modificaciones”.
ERNESTO J. NAVARRO / CIUDAD CCS