Venezuela reitera apoyo a iniciativas que impulsen al desarme general
Canciller Gil resalta importancia del desarme para lograr un mundo pacífico y seguro

25/02/25.- El canciller de la República, Yván Gil, reiteró la posición histórica de Venezuela a favor del desarme general y no a la proliferación de armas nucleares, por considerar que "su existencia es una negación de la vida y de la dignidad humana".
Estas declaraciones se dieron en medio del foro multilateral, que se desarrolla junto a la jornada inicial del 58° período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Suiza, en el Segmento de Alto Nivel de la Conferencia de Desarme.
En su intervención, abogó por la reivindicación de la Carta de la ONU, sobre todo en el contexto de su 80° aniversario y reafirmó el compromiso inquebrantable de su país, con la paz, la justicia y el fortalecimiento del multilateralismo.
Por otro lado, resaltó que el desarme y el desarrollo son dos caras de una misma moneda y que la reducción de arsenales, no solo disminuye el riesgo de conflictos armados, sino que libera recursos que se dirijan a áreas prioritarias, como la educación, la salud y la infraestructura.
Gil, advirtió que a lo largo de los últimos años “hemos sido testigos de cómo los Estados occidentales han destinado cuantiosos recursos financieros para distribuir, en cantidades sin precedentes, un gran número de los llamados paquetes militares. Sin embargo, esta acción se ha llevado a cabo sin una evaluación exhaustiva de las consecuencias posteriores para la paz. La realidad es que, en la mayoría de los casos, estas armas terminan siendo absorbidas por el mercado ilegal, donde adquieren un propósito desestabilizador”.
Ante ello, detalló el caso de Venezuela, en el que los organismos de seguridad del Estado, han neutralizado en repetidas ocasiones el ingreso irregular de armas al país.
Pecisó que el Gobierno nacional cree firmemente, que la cooperación para el desarme es de vital importancia en cuanto a la búsqueda de un mundo más pacífico y seguro, pero esta colaboración no puede considerarse equitativa.
"Cuando apreciamos la indolencia hacia el sufrimiento de los países en vías de desarrollo, por la imposición de ilegales medidas coercitivas unilaterales, las cuales denunciamos enérgicamente”, destacó.
A su vez, agregó que en el país, mil 27 de estas medidas han provocado gran daño social, lo cual lo calificó como crimen de lesa humanidad, reseñó Cancillería.
CIUDAD CCS